HELLBOUND WITH YOU TRADUCCIÓN AL ESPAÑOL

Capítulo 145 Siempre que

"Ejem..." Andrew llamó la atención de la pareja y el padre de Abi comenzó a hablar.

"Entonces, Alexander... ¿cómo conociste a mi hija?", preguntó, con cara de expectación y curiosidad. La pareja de ancianos los miraba también con esa curiosidad. ¿Cómo encontró Abi a este joven tan bueno? ¿Fue amor a primera vista para ambos? Hacía sólo unos días que ella se había ido a vivir a la ciudad.

Había muchas preguntas en sus ojos, pero la pregunta de Andrew sacudió a Abi que no se dio cuenta de lo fuerte que había agarrado la camisa de Alex por debajo de la mesa. ¿Cómo iba a contarles la historia de su primer encuentro?

Abi tragó nerviosamente mientras miraba a Alex. El hombre seguía masticando su comida mientras también miraba a Abi.

Una vez que tragó la comida en su boca, miró al padre de Abi mientras abría la boca para hablar, haciendo que los latidos del corazón de Abi se aceleraran.

"La conocí por accidente en un aparcamiento. Pensé..." miró a Abi y el agarre de ella a su camisa se tensó aún más. "Pensé que era una linda acosadora".

" ¿A-acosadora? ¡Yo también te conocí por accidente! No sabía quién eras antes de ese día!" Abi se entrometió de repente antes de volver a hundirse en su asiento.

"Oh, qué bonito. Parece que fue un día predestinado para los dos", dijo la anciana abuela de Abi y Alex asintió.

"Efectivamente".

"¿A qué te dedicas?" volvió a preguntar Andrew.

Alex guardó silencio por un momento.

"Actualmente tengo un trabajo a tiempo parcial".

"¿Puedo saber qué tipo de trabajo a tiempo parcial?"

" Cuidado de niños".

Papá: ". . ."

Abuelos: "...!"

Abi: "!!!"

"¿Estás cuidando niños?" Andrew sonaba como si no pudiera creerlo. Pero entonces, Alex ni siquiera dudó en asentir con la cabeza y no había ninguna señal de picardía en sus ojos.

"Estoy tratando de criar una pequeña fruta".

"Oh, así que te gusta la jardinería".

Abi finalmente tosió.

"A Alex le gustan los melocotones", fue lo primero que le vino a la cabeza y salió de su boca mientras intentaba cambiar de tema.

"¿Vive tu familia en esta ciudad?"

"No, todos han fallecido", contestó sin cambiar su expresión ni su tono y la cocina quedó en silencio.

"Lamento escuchar eso..." La voz de Andrew se volvió suave mientras su mirada hacia Alex se suavizaba.

"No pasa nada. En realidad ya no recuerdo sus caras", les dijo antes de recoger otra carne y comerla.

Actuaba con bastante despreocupación, casi como si simplemente estuviera hablando de una vieja fotografía olvidada.

"Uhm... papá, ¿puede Alex quedarse aquí por la noche?" Debido al frenético deseo de Abi de romper el incómodo silencio, esas palabras fueron todo lo que se le ocurrió decir. Se mordió el labio porque sabía que su padre definitivamente no estaría de acuerdo, pero lo hecho, hecho está. Lo más importante era que ella era capaz de desviar su atención de ese tema.

"Por supuesto, cariño... Ya es bastante tarde. Puede quedarse a pasar la noche si quiere. Pero comamos primero y hablemos de eso después", su abuela fue la que habló y todos hicieron lo que ella decía.

La cena fue armoniosa. Abi y su familia sonreían y reían de vez en cuando mientras hablaban de la obra. Abi y su abuela hablaban mucho mientras los tres hombres se limitaban a escucharlas, interviniendo de vez en cuando, mientras que Alex no hablaba ni una palabra más sino que se limitaba a asentir de vez en cuando para hacerles saber que estaba prestando atención.

Le gustaba este ambiente ajeno, quizá porque era el mismo que sentía siempre que Abigail estaba cerca.

Una vez terminada la cena, Abi y su abuela lavaron los platos mientras los hombres se sentaban en el sofá.

Abi estaba un poco inquieta pero su abuela la tranquilizó diciéndole que todo estaba bien. Y tenía razón. Toda la atención de Alex se centró en las fotos de la casa. Después de mirar todos los marcos de fotos que colgaban por la casa, se sentó y Andrew le mostró grandes álbumes llenos de fotos de Abi desde su nacimiento.

Andrew pensaba en qué tema debía iniciar una conversación, pero dudaba y era cuidadoso. Este joven no sabía de la enfermedad de Abi y eso le preocupaba mucho. Estaba preocupado por su hija y por este joven.

El hombre terminó perdiéndose en sus pensamientos sin entablar ninguna conversación mientras el joven que tenía enfrente estaba totalmente inmerso mirando las fotos hasta que Abi terminó en la cocina.

"¡Ah!" gritó Abi en cuanto vio el álbum en la mano de Alex. ¡Tenía un montón de fotos tontas ahí!

Abi intentó arrebatárselo pero Alex se apresuró a apartarlo, haciendo que Abi pusiera mala cara.

"Papá, ¿por qué has sacado eso?" se quejó Abi a su padre y el hombre se limitó a suspirar.

"De todos modos, Alexander, ¿estás seguro de que estás bien para dormir aquí esta noche?" preguntó y Alex lo miró y asintió.

"No tenemos habitación de invitados así que dormirás en mi habitación", le dijo Andrew pero esta vez, Alex ya no asintió.

"Dormiré en la habitación de Abigail. Estoy más cómodo siempre que duermo con ella", contestó Alex y los ojos del hombre se abrieron de par en par con sorpresa.

" ¿Siempre que? ¿Y-ya te has acostado con mi hija?" preguntó Andrew con incredulidad y Alex finalmente se dio cuenta de que el hombre estaba hablando de otra cosa. Estaba a punto de explicarlo cuando el corderito se entrometió.

"Papá... está bien. Uhm..."

"Abigail, ¿ya te has acostado con ese novio tuyo?".

Abigail asintió vacilante. La boca de Andrew se separó y no supo qué decir. Fue entonces cuando la abuela de Abi empujó a la pareja para que fueran a instalarse en la habitación de Abi.

Una vez que Abi y Alex subieron al piso de arriba, la anciana abuela encaró a su hijo y le dio unas palmaditas en el hombro.

"Está bien, Andrew. Tu hija ya es adulta. Y estoy segura de que esto es lo que quiere. No seamos duros con ella ahora, ¿de acuerdo?", animó a su hijo y Andrew supo que su madre tenía razón. Abigail ya no era una niña; había crecido hasta convertirse en una dama muy hermosa. Pero aun así, pensar que ya habían llegado tan lejos... Andrew no pudo evitar preocuparse. De nuevo, no sólo por Abi, sino también por aquel joven.