Capítulo 132: Jongin

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*llora por la canción*

Duerme, bebé, duerme, ¿qué es lo que estás esperando?

La mañana está en camino. Tú sabes que esto es solo un sueño.

Duerme, bebé, duerme. Me acuesto a tu lado.

La belleza de esta confusión me lleva cerca de ti.

Yo podría ser el único para darte todo lo que soy

con un suave toque y un tonto amor.

  (Broods, Sleep Baby Sleep).

  (Broods, Sleep Baby Sleep)

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Un año después.

     ¿Boda entre Kyungsoo y yo? No hubo tal cosa.

     Es verdad que lo amaba, pero habían pasado numerosos hechos que no eran fáciles de superar. Por mucho que lo quisiera, un ramo de rosas y una declaración no serían suficientes. Comprendía que no era una declaración cualquiera, sé cuánto pudo haberle costado decir esas cosas frente a todo mundo en mi trabajo, sé todo lo que implicó y me parecía un buen modo de empezar.

     Después de aquella vez que nos besamos en mi empleo, lo llevé al hospital y acabó de recuperarse en casa de su padrastro. Con el paso del tiempo, seguimos no solo un horario de visitas para que viera a Tae Oh, sino un espacio cada dos sábados para dejar al niño con alguno de sus tíos mientras nosotros íbamos a alguna cita.

     Yo necesitaba ir despacio, quería corroborar que podía volver a confiar en él, que cuando las cosas salieran mal, no iba a volver a ponerme un cañón en la cabeza. Lo había perdonado, sí, pero seguía recordando lo horrible que se sentía ser víctima del enojo de Kyungsoo. Con el paso del tiempo, las inseguridades se volvían un brumoso y oscuro recuerdo, el miedo se iba y en ese espacio limpio que dejaba en mi alma, crecían emociones más positivas. Tae Oh estaba muy bien porque sus dos padres ahora parecían estar de acuerdo siempre. No volvimos a tener discusiones, pero tampoco nos besábamos frente al niño para no ilusionarlo, por si las cosas no funcionaban a futuro. Actuábamos muy precavidos respecto a todo porque ya no éramos los mismos de antes, habíamos madurado.

     Cierta tarde, veía televisión con mi niño cuando escuchamos a Soo acercarse. Tae corrió de inmediato hacia afuera y yo lo observé por la ventana. Ni siquiera le dio tiempo a Soo de bajarse de la moto cuando el pequeño se le colgó de la pierna.

—Súbeme, súbeme —insistió. Kyungsoo lo levantó y lo sentó de frente antes de besarle la cabeza—. ¡Quiero manejar!

     Vi la paciencia con la que Soo le permitía hacerlo y le ayudaba llevar la motocicleta desde la entrada de la casa hasta el jardín trasero. Caminé hasta la cocina para seguir espiándolos por la ventana. Los vi bajar y avanzar de la mano, pero al llegar al porche trasero, Soo se sentó en las gradas.

Proyecto Haema [Fanfiction EXO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora