Capítulo 120: Jongin

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Quedan más o menos diez capítulos para acabar Proyecto Haema. Desde ya voy agradeciendo por su larga compañía. Dejen muchos comentarios en estas últimas entregas, ¿sí? Sería precioso que esto ardiera en comentarios. Un abrazo enorme.  


Él sostiene el arma contra mi cabeza.

Yo cierro los ojos y ¡bang!, estoy muerto.

Yo sé. Él sabe que me está matando por compasión,

y aquí voy...

(Aurora, Murder).

 Tener a Tae Oh de vuelta hizo que la vida volviera a cobrar sentido para mí

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 Tener a Tae Oh de vuelta hizo que la vida volviera a cobrar sentido para mí. Cuidándolo y dedicándole todo mi tiempo fui capaz de meditar sobre demasiadas cosas. Podía ver lo afectado que él estaba, todo lo que debería ser capaz de hacer por sí mismo, pero que no realizaba; sus temores; sus cambios de humor; su angustia ante la separación... Ni siquiera podía despertar en una habitación a solas porque empezaba a dar gritos de terror y yo debía salir corriendo desde la cocina, el sanitario o donde sea que estuviera. Afortunadamente, era un niño muy inteligente y con el paso de los días, iba mejorando poco a poco. Ahora, hablaba mucho mejor y me avisaba para que lo llevara al sanitario.

     La tarde en la que Soo lo dejó en mis brazos lo primero que hice fue llamar a Baekhyun, quien llegó a corroborar que todo estuviera bien. Dos días después, lo llevé con Joy a causa de una crisis respiratoria, compré los mejores medicamentos y tomé todas precauciones con él. Recordé que papá había mencionado que Tae Oh era un niño enfermizo.

     Baekhyun, Chanyeol, Key, Jonghyun y Taemin me ayudaron a remodelar la recámara para mi hijo. Ya no puedo llamarle bebé. Tae Oh ya no era un pequeño bebé, sino un niño que dentro de muy poco tiempo cumpliría cinco años. Necesitaba una habitación adecuada para él, así que adorné todo como si fuera una pecera para mi pequeño caballito de mar: pinté las paredes de azul y diseñé animales marinos en ellas.

     Sus tíos y yo llegamos a un acuerdo para que de vez en cuando, Tae Oh pudiera quedarse en su casa y ahí pasara tiempo con Kyung Soo de ser necesario. Acepté, no tenía opción, así que fuimos allá, donde también pintamos y acondicionamos una habitación para él. 

     Le enseñé a colaborar con las labores de la casa: él recogía las cosas de su habitación, lavaba las tazas de plástico, tiraba los desechos a la basura, hacía una bolita con las medias limpias y las guardaba en el cajón, así como la ropa interior, le enseñé a elegir y ponerse su propia ropa. Naturalmente, no hacía las cosas del todo bien, pero empezaba a avanzar. También comencé a enseñarle mi nombre completo, la dirección y mi número telefónico, así como el de Baekhyun, le mostré cómo llamar al servicio de emergencias. Lo confundía todo, pero yo era paciente. Todas esas cosas las enseñé mientras jugábamos; me había tomado dos semanas libres en mi empleo para dedicarle cada segundo. Acudí tres veces a la oficina para trabajar en alguna cosa urgente, pero lo llevé conmigo y nunca tardé más de hora y media.

Proyecto Haema [Fanfiction EXO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora