Proyecto Haema [Fanfiction EXO]

Capítulo 129: Kyungsoo

Noté a algunxs lectorxs un poquito confundidxs en el capítulo anterior. No suelo hacer esto, pero haré la excepción si ustedes desean que abra un espacio para explicar el asunto de la paternidad de Jeong Hyuk y estos enredos del fic, lo que sea que deseen que explique, pueden preguntarlo aquí de una vez para resolver sus dudas en la mayor brevedad y así seguir con la trama. El siguiente capítulo es el fin, pero habrá epílogo.   

¿Cuánto más tengo que amarte para que conozcas mi corazón?

¿Cuánto tiempo más tiene que pasar para que me ames?

Siempre lloro porque soy un tonto que ni siquiera puede hablar.

Me duele el corazón. Hoy se siente un poco más que ayer.

(Gummy, Day And Night).

  Darme cuenta de que mi verdadero padre era Jeong Hyuk puso todo de cabeza. Recordé nuestro dialogo antes de dispararle:

—Dile las últimas palabras a tu hijo —le pedí.

Él respondió —Te perdono, Kyung Soo.

Había asesinado a mi propio padre.

     No quise hablar con nadie ni ver a nadie, solo salí de ahí y me largué. Necesitaba estar lejos de todo durante un tiempo.

     Durante cuatro meses, fui un completo nómada que recorrió el país en soledad. Conocí a muchas personas, hablé con gente diferente, dormí en toda clase de sitios sin hacer mayor locura. Es verdad que de vez en cuando bebía algunas cervezas, pero no me sobrepasé ni utilicé drogas.

     Mi hermano intentó contactarme, pero no quise responder. Como era imposible esconderse de Chen, lo llamé para pedirle el favor de dejarme en paz. Le aseguré que estaba bien, así que fue obediente.

     Me gustaba dormir por las noches a campo abierto. Filosofé mucho acerca de mi estilo de vida y del hecho de que la mayor parte de mi existencia tenía sentido por buscar la muerte de la persona responsable por mi vida. Todo respecto a mí era tan enrevesado y oscuro que me costaba creer que Asher tan lleno de luz hubiera nacido de mis entrañas. Tal vez era así gracias a Jongin.

     Jongin... Pensé si era posible que pudiera perdonarme ahora que el muerto no tenía lazos de sangre con él. En la soledad de mis noches, añoraba una pequeña oportunidad, pero cuando me observaba al espejo podía ver el monstruo apaleado detrás de mi mirada y simplemente volvía a vagar como un lobo estepario.

     Una tarde, pasé frente a un centro de cuidados infantiles y pensé con mucha fuerza en Asher, así que por la noche me atreví a llamar a Jongin.

—¿Diga?

—No me cuelgues, por favor. —Fue lo que me apresuré a pedir.

—¿Soo? ¿Eres tú?