Proyecto Haema [Fanfiction EXO]

Capítulo 56: Chanyeol

—¡¿Qué?!

—¡No puede ser!

     Todo mundo se alborotó. Tampoco era la gran cosa.

—Es que no pareces bisexual —insistió Seungri.

—No sabía que los bisexuales tuvieran que lucir de cierta forma —me defendí con tranquilidad.

—¿Pero qué te gusta más: hombres o mujeres? —cuestionó Minzy. Me preparé para la horda de preguntas tontas que se avecinaban.

—Deben gustarle más las mujeres, porque se casó con una muy guapa —respondió Seungri. Yo solo reí.

—Espera, espera —Daesung tuvo una gran idea—. Si tuvieras que besar a Minzy o a mí, ¿a quién elijes?

     Lo miré con el ceño fruncido: 

—¿Estás de broma, verdad?

—Claro que no. ¡Elije!

—No lo tomen a mal, pero preferiría besar a un occiso de la morgue. —Todos rieron y Baekhyun se entretuvo imitando a Daesung. Le encantaba hacer eso de remedar a la gente.

—«Chanyeol, si tuvieras que besar a Minzy o a mí, ¿a quién eliges?» —repitió con voz fingida.

—A ti, por supuesto —respondí pellizcando su mejilla. Baekhyun cubrió su rostro con las manos porque se había sonrojado un poco y Daesung nos interrumpió golpeando la mesa.

—¡Hey, mocoso! ¿Estás insinuando que Byun es más lindo que yo?

—Si hay alguien aquí que piense lo contrario, que levante la mano. —Obviamente nadie lo hizo. Baekhyun era hermoso y Daesung era... muy simpático. Me levanté para ir a trabajar.

     Por la tarde, mientras recorría un pasillo ojeando las anotaciones de un expediente, me encontré a Baekhyun, quien empezó a seguirme el paso.

—Nunca me hablaste de tu ex... el chico.

—¿Ah, no? Mmm. —Seguí caminando y él se colgó de mi brazo para no quedarse atrás.

—En el fondo, siempre pensé que eras hetero, Yeol, todo este tiempo lo creí así.

     Me detuve a mirarlo. 

—¿Cómo es posible después de las cosas que hemos hecho? —pregunté tirando un poco de su oreja.

—Es que creí que solo te gustaba yo —explicó bajando la mirada y sonrojándose.

—Oh, Baekkie, deja de ser tan bonito o voy a besarte aquí mismo —advertí con una mano en su mejilla. Él miró hacia ambos lados como asegurándose de que nadie había oído nada.

—No me asustes —pidió con una mano en su pecho.

     Baekhyun es demasiado bonito. Tiré de su mano y nos metimos tras la primera puerta que vi, lo que resultó ser la habitación de limpieza. Entonces cumplí mi palabra y lo besé. Él me rodeó el cuello con sus brazos y respondió a mí con cariño.

—Deja de sonrojarte —ordené al separarme—, no me provoques —él frunció su boca—. Tampoco hagas pucheros. No. Tu labio superior está curvado hacia abajo: tienes una mueca de tristeza natural que te hace lucir como un mimado y no puedo resistirme a ello. No, tampoco te rías por lo que te digo.

—¡¿Entonces qué puedo hacer?! —rezongó.

—Nada, Baek. No puedes hacer nada porque estoy enamorado de cada uno de tus gestos, ¿no lo has comprendido? O más bien, debes detenerme. Debes alejarte de mí porque yo no tengo fuerzas para evitar llenarte de besos cada vez que se presenta la oportunidad. ¿Entiendes? Debes apartarme.