🔵Capítulo 91🔵 La cereza de esta pesadilla

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Claire ya me estaba viendo —, me quedaré con ella atrás, si no quieren que la vean le daré mi chaqueta...

—Gracias — dice Lily, mientras se acerca —, me iré adelante.

De las limitadas opciones que me quedan, la de la desobediencia no es la más sana. Nos demoramos un poco en cambiar de lugar, cuando tomó asiento me aseguro que Jack no se recueste en mi hombro. A estas alturas el chico viene en el quinto sueño. En todo caso decido no preguntar por él, no es el momento de poner más tensas las cosas.

Recibo la chaqueta y me la pongo, Jason me dice que con la capucha. Además antes de acercarse me pide que me quedé en cuclillas entre el asiento del copiloto y el suelo.

—Aunque no creo que sea necesario, solo es para prevenir — me dice Lily —, lo más probable es que ya estén llegando a un acuerdo provisional.

—Lo creo — dice Jason —, ya paso la parte violenta.

Resoplo y asiento, yo me metí solita así que queda aguantarme.

Seguimos adelante por un par de segundos, cuando empezamos a escuchar conversaciones. Nada claro aún por la distancia.

Un poco más adelante, Jason decide estacionarse entre dos vagones, quedando lo más lejano al vagón en llamas pero a una distancia prudencial de los tipos. Cuando paramos Lily chequea con preocupación a Jack y Jason recoge unas cosas.

—Saldremos — dice el pelirrojo —, para que no desconfíen dejaré las llaves puestas, cualquier señal de peligro lárguense, lo más lejos lo más que puedan.

—No te dejaré — dice Claire.

—¿Dónde hay otra salida? — pregunto al mismo tiempo, ganándome un ceño fruncido de mi amiga.

—Retrocede, y rodea el vagón incendiado, tendrás que ir derecho sin parar — me dice —, verás unas barandas, no recomiendo que te bajes a mover las cadenas, puedes pasarlas encima.

Me siento nerviosa —, Y nos dejarán al chico de encargo — veo a Jack.

—Si lo dejan en el hospital mejor, no está tan mal — nos dice Lily —, está ebrio, casi no siente, es probable que mañana no recuerde nada.

—Apresúrense, así nos ahorramos todo eso — les dice Claire, que está pálida —, no hagas tonterías — advierte, viendo a Jason.

—No son tonterías, son...

—Modos de operar — lo interrumpe Claire haciéndole burla, — no lo son, idiota, no si arriesgas tu vida.

—Bueno, es que así es más...

—Divertido — termina de decir Lily también burlándose de él —, no, en realidad no lo es, solo eres un loco que mierda.

El pelirrojo suspira y mira a su novia —, estaré bien, solo iremos a chismosear.

—Eso no es mentira a decir verdad — dice Lily —, apresurémonos, quizás ya estén en las últimas.

Los enamorados se despiden como si se tratara de ir a la guerra y nos dejan a las dos (bueno a los tres) en el carro. Los tenemos a una distancia que solo alcanzo ver figuras humanas negras, mi esperanza en escuchar algo son en vano.

Desesperada me paso al lado del piloto, lo que provoca que Claire me grite un: ¿Estás demente?

—No, prefiero la palabra prevenida — le respondo alistando todo por si algo malo sucede —, es mejor largarnos, además algo me dice que sí nos dejaron con las llaves es porque saben cómo salir.

Vindicta (Segunda parte de Mirada Cruel)Where stories live. Discover now