🔵Capítulo 72🔴Mi propia sentencia de muerte

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—Que... — logra decir Anni antes de que todos volteemos a la vez.

La mesa del centro de lado sureño se vuelve el foco de atención cuando Cressida se pone de pie. Se está tocando el estómago con una mano y secándose el sudor con la otra, se ve mareada y sus amigos se acercan a preguntarle qué le pasa. Ella no les contesta, está demasiado ocupada viendo la mesa. Hasta que lo peor sucede.

Está por contestarle hasta que una arcada que se escucha por toda la cafetería la interrumpe, la chica vomita su desayuno entero y lo deja esparcido por toda la mesa. Todos los que estaban sentados en ella se separan de inmediato. Las muecas de asco de estos no faltan e incluso veo a Ian y Jason limpiarse con unas servilletas. El problema es que no es solo una ronda, la chica vomita dos veces más sobre la mesa.

Y si, luego vienen las burlas por todos. Creo que más allá de burlarse por el vómito es ver a la idiota ponerse a gritar y chillar mientras vómita, lo que hace soltar la carcajada en masa. Skandar que desde la primera ronda ya se había alejado por completo de la mesa, ahora la mira con una ceja alzada, sin pena, burla o enojo. Si no con curiosidad.

Oh...

—¡Muévanse! — Cressida pega un grito antes de rodear la mesa, se limpia con su mano el otro poco de vómito que sale de su boca mientras se toca el trasero con la otra mano.

—Déjame ayudarte Cress — le dice Jack mientras la sigue, detrás de él vienen sus amigas con cara de preocupación.

—Déjame en paz — le dice antes de acelerar a la puerta, pero antes de poder salir todos podemos escuchar los gases que se tira.

—Oh mierda — dice Claire antes de taparse la boca, se seca las lágrimas de la risa.

—¿Eran flatulencias? — pregunta Anni con la boca abierta.

—Pedos Anni, pedos — la corrige Ted casi sin poder hablar —, esa pobre no se podrá sentar en tres días.

—O comer algo que no sea agua — menciona Edmon igual de sonrojado—. ¿Qué habrá comido?

—Chilli, algo con frijoles, guacamole o picante — menciona Anni —, pensaba que era de las que hacen dietas extremas.

—Lo mismo digo — menciona Claire —, se miraba tan... Barns hace media hora.

Eso antes de tomar su batido de leche de almendra y un croissant de queso de cabra.

Pero nadie ha dejado de ver la mesa de centro, los de intendencia entran con rapidez y se ponen en la tarea de limpiar. Lily se acerca a sus amigos y se ponen a murmurar cosas mientras ven la puerta por donde Cressida salió. Skandar se queda quieto viendo la mesa, de un segundo a otro se mete a la boca un pedazo de las donas glaseadas que pide todos los viernes.

Un par de mordidas después viene una mueca de asco, en menos de un segundo se acerca a un bote de basura y lo escupe todo. Lily corre y le ofrece un vaso de agua, el resto de sus amigos palidecen al ver a Skandar así y le preguntan cosas.

—Que carajo... — murmuró Ted viendo con horror.

La reacción es distinta esta vez. Un escalofrío me deja quieta al notar como unos pocos se burlan, al contrario todos suspiran asustados y murmuran entre ellos. Los únicos que lo disfrutan son Gonzalo y sus amigos, que aunque no son escandalosos los veo hacer chistes entre ellos.

—¿Quién fue el suicida? — pregunta Edmond.

—¿Quién fue el imbécil? — corrige Claire.

—Creo que se pueden ambos — agrega Anni —, oh no, eso no está bien...

Vindicta (Segunda parte de Mirada Cruel)Where stories live. Discover now