De verdad.
Digo, ¿cuántas posibilidades existen de que apenas llegáramos a la pista mi celular sonara?
Era mi mamá.
Dijiste que no contestara.
Que bailáramos y luego atendiera.
Pero no podía.
Sabía que había ido a buscarme.
Y atendí.
«Si no querías bailar conmigo sólo tenías que decirlo»
¿Es una broma?
Contesté que no fueras dramático.
Y fuimos hacia la salida.
Y en la salida noté que aún llevaba el abrigo de tu amigo.
ESTÁS LEYENDO
¿Recuerdas?
RomanceTe dedico este "algo", que no tiene forma. Como lo nuestro. En fin, metafórico tú. ¿Estás preparado para oir nuestra historia?