Espacio y renacimiento: La doctora y empresaria genio favorita

Capítulo 248: Pequeño fantasma

Jing Mingkai tenía la actitud de dar las cosas por sentado. Pensando en lo que sucedió con los nuevos juguetes de hoy, realmente no estaba dispuesto. Obviamente era algo para él, pero Jing Yunzhao en realidad se lo quitó todo al final, ¡qué mezquina!

"Mamá te comprará uno más tarde, pero hoy es todo por tu culpa, si no hubieras causado tantos problemas solo por ver su bolso..." Wang Xinfang estaba molesta. Se dio la vuelta y volvió a abrir la puerta, entrando en la habitación en la que estaba encerrada Jing Xiu.

"Mamá..." La expresión de Jing Xiu estaba llena de precaución.

En su rostro había una marca roja. Se pudo ver cuán fuerte fue golpeada antes.

Wang Xinfang miró afuera y cuando vio a los otros dos niños jugando solos, se relajó. Luego, comenzó a preguntar: "¿De qué crees que estabas hablando hace un momento? ¿Una forastera como ella está siendo protegida por ti? ¡¿Mamá te crió por nada?!"

Estaba bien pensar en Jing Yunzhao, pero seguía teniendo la sensación de que esta hija suya sabía algo.

La expresión de Jing Xiu se convirtió en pánico mientras negaba con la cabeza como un cascabel, "Mamá, estoy equivocada ..."

"¡Por supuesto que estás equivocada! No sé qué mal hice en mi vida pasada para dar a luz a todas ustedes, chicas inútiles, ¡son todos agujeros negros de dinero! Déjame decirte, si tu hermana mayor está relacionada con nuestra familia puede o no construir una casa grande, y tal vez hasta puedas seguir asistiendo a la escuela, pero si no eres sensata y nos haces perder nuestra mina de oro, ¡Veré cómo te cuido! " Wang Xinfang advirtió.

Al escuchar esto, Jing Xiu comenzó a entrar en pánico y temblar.

Sus lágrimas cayeron al suelo cuando se sintió asustada y en pánico, pero aún más, se sintió en conflicto.

Aunque no sé exactamente qué querían hacer mi padre y mi madre, me di cuenta claramente de que lo que estaban haciendo no estaba bien. Además, la hermana mayor no estaba feliz cuando reconoció a nuestra familia. Claramente ella no es parte de nuestra familia, pero todavía tiene que sufrir como yo, no es justo para ella.

Wang Xinfang vio la apariencia de su hija como un globo desinflado y se sintió aliviada.

Ese año, Wang Xinfang esperaba ansiosamente el nacimiento de su hijo, Jing Xiu, pero al final, lo resintió mucho.

Cuando se casó con un miembro de la familia Jing, no pudo quedar embarazada ni siquiera después de tres o cuatro años. La presión provocó que tuviera varias crisis nerviosas y todos sus vecinos la miraban con desdén hasta el punto de que ni siquiera se atrevía a salir. Sin embargo, su suegra también contribuyó a su sufrimiento. Ella siempre la regañaba y torturaba con la palabra 'nieto'. Al final, quedó embarazada después de muchas dificultades y esperaba que fuera un niño. Ella pensó que finalmente podría relajarse y disfrutar de la vida, pero ¿quién sabía que daría a luz a una hija?

La palabra decepción ni siquiera fue suficiente para expresar sus sentimientos en ese momento. Si su suegra no hubiera tirado a esa niña, ella misma se habría vuelto loca y estrangulado a la niña.

En ese momento, su esposo encontró a la niña sin señales de vida y lo enterró en las montañas, pero su única reacción fue un suspiro de alivio. Esto le dio la idea de que con la muerte de su hija mayor, su mala suerte finalmente terminaría y podría dar a luz a varios niños seguidos.

Efectivamente, no pasó mucho tiempo antes de que volviera a quedar embarazada. Esta vez incluso preparó un nombre para su hijo, incluso las personas de los alrededores dijeron que sería un hijo, pero ¡ay, era una niña otra vez!

En ese momento, su suegra ya había fallecido, por lo que Jing Xiu pudo vivir.

Posteriormente, dio a luz a Jing Ling, y finalmente a Jing Mingkai.

El sufrimiento que soportó todos esos años no se pudo expresar con unas pocas palabras.

Por lo tanto, Jing Mingkai era su vida, mientras que Jing Xiu y Jing Ling eran el fantasma cobrador de deudas que la buscaba. Eran sus enemigos en su vida anterior que renacieron específicamente solo para enojarla. Agradeció a Dios que su hija mayor ya no estuviera aquí, porque si ella era como Jing Yunzhao, no estaba segura de si podría vivir hasta ahora.

Jing Xiu bajó la cabeza aún más, pero aún podía percibir la mirada sin amor de su madre, lo que la asustaba.

"¡LLORAR, LLORAR, LLORAR! Todo lo que sabes hacer es llorar. ¡Has arruinado la fortuna de nuestra familia con tu mala suerte! " Wang Xinfang regañó y golpeó brutalmente a Jing Xiu en la casa.