Paraíso del Infinito Parte 1

85. Diario Avatar- Cláusula de Rebelión. (2)

Paraíso del Infinito de FanHarem.
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"¡Detente en este instante!" Gritó Zhao, otro pilar en llamas incapaz de alcanzar su objetivo ya que Mai era ágil. Más ágil de lo que Zhao habría esperado de la hija de un alcalde que ya había perdido la orientación mental, pero sabía bien que ninguna mujer común de la nobleza pasaría por un entrenamiento intenso para hacer que su objetivo fuera tan loco. Se trata de la mentalidad y es por eso que Zhao también sabía que Mai no se detendría. Las mujeres como Mai no se detienen en las palabras.

'¡Bien entonces!' Zhao resopló internamente. Dio un paso salteado en una postura agachada antes de juntar su mano, creando un vórtice de fuego apuntando en su dirección mientras Zhao se dirigía a ella. Su carga fue rápida, pero Mai notó algo.

Zhao estaba sin sus botas y con cada paso que daba, un breve estallido de llamas lo impulsaba hacia adelante desde su contacto con el suelo, asegurándose de que la igualara en velocidad, si no podía en agilidad.

"Responderás por tu traición", comentó Zhao con frialdad, dando un golpe con el codo mientras Mai se inclinaba hacia atrás, sacudiendo un pequeño cuchillo que casi atravesó los ojos de Zhao si no fuera porque él bajó rápidamente la cabeza, causando que la hoja pasara. el rabillo de sus ojos.

"¡Gah!" Gruñó, un chorro de llamas similar a un soplete salió disparado de su puño cerrado y Zhao lo golpeó.

Los ojos de Mai se abrieron momentáneamente. Su posición no le daba espacio para esquivar, pero aún no se había quedado sin movimientos. Especialmente, no después de un calentamiento con los maestros fuego que fueron enviados a empacar lo suficientemente pronto. Su dedicación en lanzar cuchillos la llevó a aprender más técnicas de combate en primer lugar y agarrando la mano de Zhao que estaba a punto de hacer un agujero ardiente en su hombro, se deslizó a través de los espacios entre sus piernas, haciéndolo dar la vuelta y tropezar con su espalda.

"Ugh-" Zhao resopló, solo ahora sintiendo el ligero agotamiento provocado por generar fuego durante tanto tiempo, pero sus palabras se atascaron en su garganta cuando encontró a Mai arrodillada sobre una rodilla y sosteniendo un cuchillo justo en frente de su globo ocular izquierdo.

"No te saldrás con la tuya".

Zhao amenazó finalmente.

"Al contrario", susurró Mai, "un almirante derrotado por una niña pequeña... Diría que eres tú quien no se saldrá con la suya y definitivamente perderá su título".

"Escúchame", el color desapareció del rostro de Zhao mientras apretaba sus labios secos, "Si detienes tus acciones ahora... olvidaré que trataste de ayudar al Avatar".

Los ojos de Mai se contrajeron por un momento antes de que su mirada se volviera un poco... caída, impasible y desinteresada.

"¿Un perdón? Qué aburrido..."

"Lo es", una tercera voz sorprendió a los dos. Mai miró a su lado y Zhao miró en la misma dirección para encontrar a un maestro de fuego con su uniforme mirando a Zhao con diversión.

"¿Qué deseas?" Mai cuestionó. Si ella fuera a ser atacada, entonces el hombre no se habría presentado simplemente y regalado el elemento sorpresa a menos que sea un idiota.

"Um, señorita, mi nombre es Hara", el hombre sonrió, "Vine aquí una vez que escuché la conmoción causada por su... reunión. El almirante dijo que está aquí por el Avatar, ¿verdad? El Señor del Fuego Iroh explícitamente ordeno la formación de un grupo de caza para buscar al Avatar. Puedes ir en esa dirección..."