Paraíso del Infinito Parte 1

24. Templo Aire del Sur. (2)

Paraíso del Infinito de FanHarem.
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Después de leer la carta y ver algo más familiar que las estructuras y estatuas rotas, Aang se había calmado un poco. No estaba tan alegre como antes, pero sus lágrimas también se habían secado. La persona que Aang deseaba conocer más en este templo estaba detrás de la puerta con extraños artilugios que Nik y Sokka no habían logrado entender en absoluto.

Aunque Nik podría simplemente devorar la puerta, como había sentido anteriormente, devorar reliquias y estructuras que pueden tener importancia para sus servicios de vuelo puede no ser lo ideal. Además, se supone que la nación del fuego tiene muchos barcos de guerra. Podría aumentar su AP entonces.

"Unos días después de que se reveló que yo era el Avatar, Monk Gyatso me dijo que no me sintiera abrumado", habló Aang, permitiendo que otros a su lado supieran lo que estaba pasando en primer lugar, "Según él, la persona que puede guíame a través de este viaje está detrás de las puertas de este santuario. Dudo que esté vivo, o incluso que esté aquí después de que haya pasado tanto tiempo... pero una pista es todo lo que puedo esperar alcanzar".

"Lo intentamos", se quejó Sokka, "La puerta no se mueve". Luego miró al lémur que aún estaba sentado en el hombro de Nik y se lamió los labios.

"Por favor, no me mires así", Nik entrecerró la mirada y Katara se rió entre dientes, "Ah, olvidé que Sokka también está en edad de casarse".

"¡Oye!" Sokka siseó a su hermana mientras veía sonreír a los que lo rodeaban, el estado de ánimo de Aang también se levantó un poco.

"Esta puerta solo puede ser abierta por un Maestro Aire. Es por eso que incluso tengo la confianza de que la Nación del Fuego no podría haber entrado al Santuario", Aang comenzó a mover sus manos en círculos con el viento comenzando a acumularse entre el espacio de sus palmas

"Hmm, un hombre para guiar al Avatar... tal vez todos tus maestros estén adentro y no tengamos que ir a esa cobarde Tribu Agua del Norte", reflexionó Sokka, "por mucho que odie la perspectiva de eso, tal vez allí son maestros agua, fuego y tierra en el interior que pueden ser tus maestros".

"Tal vez la mía también", agregó Katara.

"Vamos a averiguarlo", Nik se encogió de hombros. Aang parecía confiado en abrir la puerta para que todas las especulaciones pudieran confirmarse en unos momentos.

Concentrándose, los brazos de Aang salieron disparados con el intenso viento que entraba en los tubos del espiráculo.

*Hmmmm*

Un suave zumbido resonó y el trío vio las tres insignias de los nómadas del aire dar la vuelta una por una mientras el aire parecía pasar a través de los espacios de su ajuste. Una vez que las tres insignias dieron la vuelta, las otras tuberías detrás de la estructura más amplia se movieron y giraron antes de dejar escapar una ola de aire presurizado y llevarse el hielo y la nieve acumulados. La puerta finalmente se movió con un fuerte ruido sordo, sus paneles se abrieron hacia adentro con la mirada del grupo recibida por la oscuridad solo aparte de la entrada que reveló una situación particularmente limpia y preservada.

"Oh, bueno, siempre es bueno tener esperanza," Sokka se encogió de hombros.

*Krmm*

El lémur peludo en el hombro de Nik saltó y entró al santuario y Aang lo siguió pronto.

"Puedo sentir algo dentro", murmuró el joven y todos entraron antes de que Nik y los demás se pusieran rígidos. Apenas visible, dentro del santuario había una exhibición de estatuas. Muchas estatuas.