53. Agridulce.

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Paraíso del Infinito de FanHarem.
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"Bueno, verás... Aang es un niño. Cuando un niño tiene una rabieta, también terminará pronto, *Khaannnk* ¡y esos espíritus me dijeron que querían divertirse!"

Todavía dentro del ataúd de metal con la cabeza asomando, Bumi explicó lo más "simplemente" posible.

"¿Qué espíritus?" Nik, siendo el único conocido del Rey Loco, preguntó al grupo.

"¡Espíritus a nuestro alrededor! ¡Mira a Aang, tantos espíritus!" Bumi se rió entre dientes antes de fruncir el ceño, su rápido cambio de temperamento hizo que los demás retrocedieran un poco mientras gritaba: "¡Ve, apúrate! ¡Ayúdalo después de que se deshaga de ese asqueroso alcalde y mi hijastro Zhao!"

Todavía continuó con la broma... o probablemente la vivió. Ahora, Nik no sabía si Bumi estaba bromeando sobre golpear a la madre de Zhao o realmente lo hizo... o creía que él mismo había tocado a la madre de Zhao. Pero no iba a cuestionar la cordura de un hombre encerrado durante años con sus extremidades amputadas y probablemente torturado más que la imaginación.

A sus palabras, Aang emitió un rugido.  Su voz estaba distorsionada como si varios individuos rugieran a través de él y, de repente, la plataforma en la que se encontraban todos los maestros tierra y fuego creció para cubrir a la totalidad de los hombres que estaban adentro, dejando solo sus rostros mientras revelaban una expresión de terror.

Esto fue más prominente en Ukano que nunca se había enfrentado a una batalla real en la vida y los Maestros Tierra que descubrieron que ya no podían apartar las rocas y el suelo que los cubría como si pertenecieran a una fuerza superior.
Flotando, su cuerpo resplandeciente visible para todos en Omashu, Aang levantó las manos en alto.

"¡Ohh! ¡Eso es un slammer!" Los ojos de Bumi se agrandaron.

"¿Un qué?" Katara exclamó.

"¡Él los va a aplastar!"

"¡Avatar! ¿Deseas provocar la ira del Rey Fénix?" Ukano gritó cuando sintió que el suelo lo apretaba, diminutos guijarros se clavaban en su carne lentamente mientras su expresión se volvía fea por el dolor.

Sus palabras solo aumentaron la crueldad de la ejecución de Aang cuando el chico perdido en el poder apretó los puños, haciendo que todos en su agarre gritaran de dolor.

"¡Aang! ¡No hagas eso!" Katara salió corriendo de detrás del pilar, gritando a todo pulmón.

*Thmp*

Fue instantáneamente capturada por un agarre igualmente fatal de la tierra. Su voz estaba atascada en su garganta cuando los ojos de Sokka se agrandaron.

"¡Katara!" Gritó, saliendo corriendo.

"Espera, él va a-" Nik gritó apresuradamente solo para ver a Sokka, también, atrapado en la tierra de forma similar a como Katara estaba atrapada. La expresión de los hermanos palideció mientras Suki miraba a Nik.

"He sido atacado por ese niño calvo que brilla intensamente dos veces. No me mires", los labios de Nik se torcieron. Aunque los ataques no eran más que daños colaterales, aún contaban en la mente de Nik.

"Él te respeta", Suki comenzó a caminar con una expresión determinada.

Al ver esto, Nik preguntó de repente: "Oye, Suki... si tengo que llevarte a un lugar agradable, ¿te parecería agradable?".

"¿Que clase de pregunta es esa?" Suki frunció el ceño, pero su mente parecía haber formado una conclusión sugerente para ella mientras se sonrojaba y fruncía el ceño al mismo tiempo, "Concéntrate en sacar a Aang de su ira".

Paraíso del Infinito Parte 1Where stories live. Discover now