70. Roles invertidos. (R18)

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Paraíso del Infinito de FanHarem.
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Si bien Suki se sintió confundida por la repentina noción de entrenamiento, Nik no la dejó varada en la oscuridad como un buen entrenador y explicó en voz baja, casi gruñendo contra ella: "Vamos a practicar conteniendo nuestras voces".

"Eso es lo más estúpido-" Antes de que Suki pudiera completar su declaración, jadeó un poco fuerte con sorpresa parpadeando en sus ojos, "¿Dónde crees que estás tocando?" Ella gruñó.

"No pareces tan molesto durante el entrenamiento", comentó Nik, lo que provocó que Suki se volviera al instante. Ahora sentía que accidentalmente había entrado en un territorio muy peligroso y si seguía mirando hacia otro lado, terminaría 'perdiendo'.

Coincidiendo con su mirada, Nik simplemente sonrió. Ahora se dio cuenta de una de las razones por las que su primer entrenador lo sometió a algunos actos peculiares en su vida anterior: fue divertido. Y Nik sintió que si no pisaba bien, o si ya no lo sabía mejor, ya podría empezar a engancharse para 'entrenar' a otros.

"Eso es diferente", resopló Suki, "Cuando dos personas pelean, no hay ningún lugar que se considere intocable y todos los lugares pueden ser atacados".

"Es lo mismo aquí, también", coincidió Nik con el sentimiento mientras acercaba a Suki, peligrosamente.

"Sigue así y te golpearé", Suki entrecerró los ojos con la mano en medio de ella y la entrepierna de Nik. Pero a pesar de sus palabras, un rubor feroz tocó sus mejillas. Lamentablemente, Nik tampoco podía ver muy bien en la oscuridad. La mente de Suki estaba zumbando mientras subconscientemente rastreaba el miembro flácido y lo sentía cada vez más duro.

"¿Ves? Puedes tocar en cualquier lugar", Nik sonrió, no un poco tímido mientras sus manos se extendían hacia el rostro de Suki, acariciando su mejilla suavemente, "Y ahora déjame entrenarte adecuadamente".

"Entréname en qué-" Antes de que Suki pudiera completar, sus palabras se convirtieron en un jadeo ahogado cuando Nik cubrió sus labios con los de él. No se pasó de la raya y pronto se detuvo para mirar a la estupefacta Suki que ahora no sabía qué decir con muchos de sus pensamientos ahora desvanecidos de su mente.

Todavía en silencio, sus labios húmedos ahora se sentían secarse nuevamente a lo largo de su garganta mientras agarraba un palo grueso en su mano, al menos, eso es lo que se sentía. "Nik... tú", susurró, sin saber qué decir, pero esto solo hizo que se sintiera más cómodo y agregó: "Déjame devolverte el favor, Suki".

"¿Que favor?" Preguntó, feliz de tratar de dirigir la conversación pronto para poder salir de esta 'batalla' con la menor cantidad de 'lesiones'.

"Me has entrenado muy bien", Nik se inclinó y se acostó de lado para asegurarse de que pudiera mantener la parte superior de su cuerpo dependiente de su brazo hacia el lado interno mientras su otro brazo se enrollaba alrededor de su cintura, "Déjame entrenarte, también."

Suki no pudo responder por el momento, su mente se quedó en blanco una vez más cuando sintió que la 'cosa' en su mano palpitaba. Su aliento se estremeció cuando supo lo que realmente era.

'¿Qué hay de Michi?' es lo que Suki quería preguntar ahora que sabía que Nik era su amante, pero un lado más egoísta de ella resistió el impulso. Él ya estaba en esta condición por ella, debería significar algo, ¿verdad?

Nik no tenía estos pensamientos agobiándolo. Antes de la despedida, sí se lo dejó claro a Michi y a ella no pareció importarle mucho. Pues bien, terminó esa despedida con una nota particularmente 'alta' que también incidió en los motivos que convencieron a la mujer. Sintiendo que la respiración de Suki se volvía más áspera con cada segundo que pasaba mientras su imaginación comenzaba a controlar sus acciones, Nik agarró con firmeza sus nalgas, lo que provocó que emitiera otro chillido.

Paraíso del Infinito Parte 1Where stories live. Discover now