Capítulo 120: Toma mi vida como la última vida.

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Cuando Yun Qian se despertó, corrió aturdido, como de costumbre, sin ponerse siquiera los zapatos.

Ye Junli vio sus tiernos pies blancos pisando el frío suelo, sus dedos rosados y húmedos se curvaron de miedo al frío.

Pero, evidentemente, aquellos ojos temerosos revelaban algo más aterrador que el amargo frío.

Yun Qian helado dio un paso y se desplomó impotente en el suelo, con la boca abierta incrédulamente, jadeando bruscamente en busca de aire.

Ye Junli acababa de terminar de ejecutar a la persona que pensaba que era la más antiestética, y todavía sostenía el corazón que le habían sacado del pecho, ensangrentado, y su hostilidad era muy pesada.

Pero cuando Yun Qian entró en sus ojos, su cara se volvió instantáneamente ansiosa e inquieta.

Ye Junli habló primero tentativamente para romper el silencio: "¿QianQian?".

Con las manos cubiertas de sangre, se debatía incómodo en su sitio, sin atreverse a envolver a la persona que amaba en su túnica exterior como había hecho en el pasado.

El hombre seguía mirando a Ye Junli con aquellos ojos aterrorizados, con las manos apoyadas suavemente en el suelo debido a la debilidad de su cuerpo.

Sus labios temblaban ligeramente y sus ojos estaban enrojecidos, como si fuera a llorar descontroladamente al momento siguiente.

Pero el ambiente permaneció en silencio durante mucho tiempo y él no emitió sonido alguno.

Fue sólo después de unos instantes de mirar fijamente a Ye Junli cuando por fin se armó de valor para mirar al charco de sangre del suelo, y al hombre ensangrentado rodeado por la sangre y un perro blanco con el que mantenía una relación unilateral pero muy estrecha.

Debido a que Ye Junli no tuvo reparos en ese momento, su golpe fue demasiado decidido y contundente, resultando a Barro un movimiento fatal.

El pelaje blanco como la nieve se manchó instantáneamente de sangre, y en el cuello se hizo una cicatriz llamativa, que fue la causa del golpe fatal.

Ye Junli por la oscuridad, observó con aprensión el cambio en la expresión de Yun Qian y volvió a gritar en voz baja: "¿QianQian?".

Yun Qian, por su parte, dio instintivamente un paso atrás al oír la llamada del hombre...

Era rara la ocasión en que no había nevado, y fuera de la casa, un poco de luz de estrellas decoraba suavemente el crepúsculo exterior.

Dentro de la casa, sin embargo, había una escena sangrienta diferente.

"QianQian, la sangre de su corazón fue tomada, no tienes que sufrir más..."

Estos pocos días, lo duro que Yun Qian estaba sufriendo, Ye Junli lo vio todo, y supo por sí mismo, lo mucho que Yun Qian esperaba ser curado en su corazón.

Ahora que su esperanza se había hecho realidad, Yun Qian debía estar feliz...

Se sintió reconfortado por esto.

Sin embargo, Yun Qian ya no pudo controlar sus emociones después de que Ye Junli dijera estas palabras, y las lágrimas brotaron de sus ojos, sus delgados hombros temblaban más allá de las palabras, como si todo su cuerpo hubiera sufrido un estímulo inimaginable.

Yun Qian de repente se dio cuenta de por qué Ye Junli no se había entendido realmente hasta ahora. Obviamente, lo último que quería ver era que alguien estaba herido por su culpa. Además, lo que Ye Junli lastimó en este momento no fue alguien que no fuera ligero o pesado para Yun Qian. Eso fue Ran Chen, siempre sintió "Ran Chen es muy bueno."

E.S.D.E.ADonde viven las historias. Descúbrelo ahora