Capítulo 50

4.1K 387 4
                                    

[André]

Ir al Paramo Mental de una persona, incluso el propio, puede ser un completo reto de supervivencia. Pues sumergirse a ese lugar no brinda ninguna protección, te encuentras solo y vulnerable a cualquier cosa y ahí es donde se encuentran Iván y Norah. Ambos solos y vulnerables a que entren en sus mentes y los manipulen tal como André lo hará a pesar de la mirada de asesino de Elian; al no poder soportar que entrara Merlín en su mente para hacer los experimentos, puesto que él perdió la oportunidad.

Ahora, André está en su habitación, Merlín está parado justo a su lado y deseaba con todas sus fuerzas que su hermano estuviera también allí, pero misteriosamente había desaparecido pero sabía que no estaba muerto, pues sentía las emociones que lo embargaban. Cerca de la puerta están sus padres y en el sofá esta Rumpel, Elian y Su Yeong, todos expectantes por lo que ocurrirá.

— ¿Recuerdas lo que le dirás a la princesa? —pregunta el anciano mago. A lo cual el príncipe asiente—. Voy a proteger tu mente para que no lo olvides. Cuando encuentres a la princesa no debes tocarla. ¿Entendido?

— ¿Por qué no?

— Es muy peligroso para ambos, sobre todo para ella que tendrá dificultades para saber quién eres y que representas en su vida.

— ¿No sabrá quién soy? —pregunta André, rápidamente.

— Esta en el limbo de sus recuerdos, no sabe que es el pasado, presente o futuro, te recordara pero..., es mucho muy complicado explicártelo ahora, tan solo no la vayas a tocar, no me hagas arrepentirme de esto —con duda, André vuelve a asentir—. Muy bien, tu tan solo duerme, tal como lo hiciste antes, pero esta vez será mucho más intenso y doloroso.

André mira a los reyes, Dreagan y Amelia, quienes irradian nerviosismo y preocupación. Si algo sale mal, esta sería la última vez que vería a todos y volvería a caer en un letargo permanente, perdido en su propio Paramo Mental.

Toma tres largas y profundas respiraciones, después cierra sus ojos e intenta pensar en su princesa y en su hijo nonato. Hace minutos tomo la poción que Merlín le dio; al principio no hay sensación alguna, pero ahora... el centro de su ser comienza a arden, el calor que siente es indescriptible. Desde que quedo maldito no volvió a saber lo que era la calidez hasta que encontró a Norah, y ahora este fuego en las entrañas. Abre sus ojos y se encuentra en un lugar completamente en blanco, con una luz tan radiante que tiene que parpadear varias veces hasta que sus ojos se adaptan al ambiente y como si alguien moviera el interruptor de luz, todo se vuelve tan oscuro como la noche. No sabe hacia dónde ir, de repente chispas de colores comienzan a caer, son como pequeñas centellas explotando al tocar el suelo.

El príncipe camina hacia ellas, con su brazo estirado al frente para tocar alguna, jamás había visto un evento tan espectacular. Al mirar hacia arriba ve a una extraña estrella pero no luce como las demás, la luz que desprende es muy débil, el corazón de Norah comienza a latir en su pecho de forma acelerada, esa estrella es su inimă y sin pensarlo la toma.

André es succionado por la centella y expulsado de ella en un lugar gris, el sol es abrazador, pero gris... absolutamente todo es del color de las cenizas de un volcán, mira los matorrales, los pocos árboles casi ahogados por el calor, la tierra árida sin un poco de agua que la humedezca. Camina de forma opuesta al sol, hacia el oeste, buscando una sombra para protegerse del intenso calor.

Camina por varios minutos, que le parecen horas. El sol no parece cambiar de posición pero, André no se detiene y continúa caminando. Llega a las faldas de una montaña, donde repentinamente el clima cambia de caluroso a completamente invernal, con vientos fuertes y donde la oscuridad reina. Con dificultad ve a lo lejos un bulto negro, se mueve de forma extraña y es más oscuro que la misma noche, André corre con todas sus fuerzas hasta detenerse a escasos metros de lo que ha visto.

My Immortal (Fény 1#)   |   EN EDICIÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora