Capítulo 57

1.6K 132 18
                                    

/Narra Chimuelo/
  Luego de ver cómo mi amigo incineraba toda una flota de cazadores, me comencé a asustar. He notado que ha cambiado mucho desde que nos conocimos y no lo culpo. Ver a alguien morir, huir de tu hogar, enfrentar a cazadores, a dragones malos, Romanos y conquistadores. Hemos pasado por muchas cosas buenas pero las cosas malas fueron el doble. Hemos estado bajo mucha presión y problemas pero a veces siento que él es quien lleva más carga.

  Fui hacia donde él estaba y traté de hablar sobre lo que le pasaba.

Chimuelo: ¿Hipo? Eso no estuvo bien. Nos hemos enfrentado a miles de problemas y nunca hemos hecho eso.

Hipo: *Molesto* ¿Y qué quieres? Si hubieran pasado, entonces hubieran buscado el huevo y...

Chimuelo: ...Y los hubiéramos sacado. Este nos sos vos. Dime qué pasa y te ayudaré

Hipo: Estoy frustrado, el asesino, los cazadores... todos intentan meterse en problemas, todos intentan conquistar a todos. Deberían arder todos con mis llamas. Voy a calcinarlos hasta que...

Chimuelo: *Grita* ¡¡¡NO!!! - Eso lo despertó de sus pensamientos siniestros - ¡Nosotros nunca hemos hecho así las cosas! Somos mejores que ellos. A él no le hubiera gustado verte de esta forma. Sus últimas palabras no fueron que venguemos su muerte o destruyamos a todo aquello que hiciera daño a otros. El queríamos que protegieramos el equilibrio de la vida. Pidió que sobrevivieramos y evitemos que su raza se extinga.

Hipo: Pero yo...

Chimuelo: Estás enojado y yo también, pero eso no es justificación para lastimar a otros. Encontraremos a Krogan y los demás conquistadores, pero no lastimaremos o mataremos a nadie a menos que sea necesario ¿Oíste?

  Parecía que quería llorar. Ha estado guardando muchas cosas y debido a nuestras misiones no lo ha podido expresar. Estaba frustrado, molesto, confundido y ansioso. Yo lo abrazé y lo rodeé con mis alas mientras escuchaba sus llantos

Hipo: *Llorando* Yo...

Chimuelo: Está bien. Todo va a salir bien.

  Luego de un rato esperamos a que se hiciera de noche para poder relajarnos completamente. Escuché unas hojas moverse y decidí ponerme en guardia hasta que percibí un olor familiar, le dije a mi compañero que iba a hacer guardia pero quería que se quedará para relajarse un poco más. Caminé lentamente hacia el olor y dije en susurros en humanesco.

Chimuelo: El está muy estresado por todo lo que ha ocurrido hasta ahora. Necesita a alguien que lo acompañe y ayude. Te dejo esa tarea a tí, Astrid.

  Y me fuí a hacer guardia como dije y los dejé solos.

/Narra el autor/
  El chico seguí sentado viendo la noche cuando de repente llega la rubia a hacerle compañía. Sorprendido, no deja de mirarla y notó como la noche hacia que sus ojos brillarán más que de costumbre.

Hipo: ¿Que haces acá?

Astrid: Te fuiste tan de repente que no supe que te pasaba. Te busque todo el día para saber si estabas bien.

Hipo: Entonces ¿Te preocupo?

Astrid: Claro. Por qué sin tí no sabremos cómo volver a casa.

Hipo: *Descepcionado* Ah.

Astrid: *Riéndose* Obviamente también me importas. Somos casi familia ¿No?

Hipo: Si.

Astrid: Pero no creas que por esto caeré en tus brazos. Este entrenamiento es genial, me preocupo aunque no lo creas, pero no me voy a enamorar de tí solo por esto.

Hipo: Ya sé. Apenas sabías que existía, apenas me notaste cuando llamé la atención con los entrenamientos y eso. Solo te fijaste en mi cuando era mejor en el entrenamiento o me raptaron. Sin embargo, me sentí feliz cuando me notaste. Ahora debemos concentrarnos en mejorar para resguardar a Berk para otro ataque. Debemos concentrarnos en lo primordial. Solo quiero que me sigas. No te traje aquí para conquistar tu corazón... - Hipo se levanta y apoya su mano en el hombro de la chica mientras que está lo vía asombrada. El chico se fue y mientras caminaba se decía a si mismo - ...por ahora.

  La chica no lo escucho, pero él tampoco escucho lo que ella dijo en susurros.

Astrid: Lo creas o no... ya lo hiciste... *Sonrojada* Idiota.

Cómo Entrenar A Tu Dragón (Una historia distinta)Where stories live. Discover now