Cómo Entrenar A Tu Dragón (Una historia distinta)

Capítulo 66

/Narra Estoico/
  Luego de escuchar como mi hijo logró darle cordura a Dagur, quedé completamente sorprendido.

  Hipo me pidió que hablara con Alvin y cuando se fue a su antigua habitación, Valka se me acercó a mí y me agarró del hombro.

Valka: Se que no has hablado con Alvin en mucho tiempo, pero si Hipo pudo hacer que ese muchacho cambiara en unos pocos días, tú también puedes hacerlo.

Estoico: Él lo hizo genial porque se parece a tí.

Valka: Si, pero también se parece a tí. *Desanimada* Ojalá hubiera tenido un hermano o hermana con quién compartir esto.

Estoico: *Animado* Aún puede.

Valka: Ja. Que lindo, pero ahora estamos en una situación crítica. Cuando esto termine, quizás tengas mi autorización.

Estoico: ¿Al menos dormiremos juntos?

Valka: Desde que regresé dormimos en la misma cabaña y en la misma cama.

Estoico: Es que tengo miedo de volver a perderte.

Valka: No sucederá - Dijo mientras acariciaba mi mejilla - Aunque me vaya, siempre volveré a tí. No quiero perderte tampoco.

  Esa noche me fuí a la prisión de Berk y allí estaba Dagur completamente calmado. A lado de él, estaba la razón de mi visita.

Alvin: Veo que estás en forma, viejo amigo.

Estoico: Quiero formar una alianza, con ambos.

Dagur: Seguro. Ya no tengo razones para atacar a Berk.

Alvin: Ni lo sueñes, Estoico. Voy a reclamar lo que es mío por derecho.

Estoico: Está isla le perteneció a mi padre y al padre de mi padre. Nunca fue tuya.

Alvin: ¡Si, pero yo sé mejor como dirigir un pueblo de guerreros, tú solo sabes dirigir un pueblo de cobardes!

Estoico: Te mataré Alvin.

Alvin: No si lo hago yo primero, Estoico.

  Seguimos discutiendo por un rato hasta que escuchamos un fuerte ruido de metal.

Dagur: *Molesto* ¡¡¿Ya pueden callarse?!! Quiero dormir.

Alvin: No te metas. No sabes de lo que se trata.

Dagur: ¿Ah no? Tú estás celoso de su éxito y la suerte que tuvo en nacer en un lugar privilegiado como la familia del jefe. Y el jefe Estoico quiere proteger a todos sin importar lo que piensen los demás. Ustedes están peleando debido a que sus opiniones no coinciden para nada. O eso creen.

  Quedamos completamente sorprendidos por la inteligencia de quién hace unos días, era un completo demente.

Estoico: ¿Qué crees que podamos hacer?

Dagur: Bueno, ustedes están discutiendo debido a que no creen que pueden hacer las mismas cosas de las misma manera.

Alvin: Eso es cierto.

Dagur: ¿Si tratan de sobrevivir a las garras de la muerte? Quizás con eso vean que son más parecidos de lo que creen.

  Luego de esas palabras, me retiré y pasé toda la noche planeando cualquier cosa con tal de obedecer lo que dijo el psicópata. Antes de darme cuenta, todos habían despertado y yo seguía con el grafito en la mano mirando aquel papel en blanco. Mi hijo se acercó a ver y yo no me di cuenta hasta que puso un tarro de hidromiel cerca mío.

Hipo: ¿Qué pasa?

  Le conté hacerca de lo que discutí con Alvin y lo que dijo Dagur. Valka estaba cerca y también escuchó, se acercó y trató de apoyarme.

Hipo: Tengo una idea, pero es muy peligroso.

Valka: Nosotros podemos vigilar que nada les pase.

Estoico: Gracias. Me alegro tenerlos cerca.

  Al día siguiente, Alvin y yo estábamos en una isla desconocida.

Alvin: ¿Qué es esto Estoico?

Estoico: Es una pequeña reconciliación.

  Discutimos por un tiempo hasta que escuchamos unas voces y rugidos. Al acercarnos notamos unos hombres armados y unos dragones enjaulados siendo transportados a unos barcos.

Alvin: Bueno, al menos están quitándonos peligros y estorbos de nuestro camino - Yo ví como esos dragones eran capturados mientras que él solo hablaba. Tome mi hacha y me preparé para el combate - Oye ¿Que haces?

Estoico: Mi esposa e hijo protegen a esos seres. No voy a permitir que les hagan daño.

Alvin: *Curioso* ¿Eso quiere decir que tendremos que pelear?

Estoico: *Serio* Si.

Alvin: *Emocionado* Cuenta conmigo.