The Demonic King Chases His Wife [Parte 2] [Trad. al español]

Capítulo 291: Venir llamando a la pelea (8)

Capítulo 291: Venir llamando a la pelea (8)

Su Alteza, el Príncipe Jin... ¿Cómo podría...? Liu Chengfeng simplemente estaba incrédulo ¿No decían todos los rumores que Su Alteza, el Príncipe Jin era cruel e insensible? ¿Cómo podría importarle tanto esta persona? Además, esta persona era un hombre joven...

Liu Potian dio un paso adelante, protegiendo a Liu Chengfeng colocándolo detrás, "Su Alteza, entregue a esa persona. De lo contrario, si esto llegara frente a Su Majestad, nadie terminaría bien".

"Si no se ve bien para ti, no le importa a este rey". Nangong Liuyun sonrió fríamente mientras decía: "¿Por qué le importaría a este rey si le dices acusaciones difamatorias?"

Liu Potian tenía una bocanada de aire ahogado en sus pulmones, entonces supo que negociar con la razón no era factible. Si era así, ¡solo debía utilizar la fuerza para resolver este problema!

"Ya que es así, ¡entonces que los dioses decidan!" Liu Potian, desde hacía un momento después de que Nangong Liuyun lo había bloqueado, un temor contenido nació en su corazón a causa de Nangong Liuyun. Entonces aprovechó esta situación y sugirió: "Entonces, dejen que Chengfeng y ese joven compitan entre sí en Artes marciales. Veamos quién ganas y quién es derrotado. ¡El que gane recibirá la piedra cristal de color cian!"

Esto obviamente era un trato injusto. La piedra cristal de color cian claramente pertenecía a Su Luo. Si ella perdiera, entonces el cristal se desvanecería de sus manos.

¿Cómo podría Nangong Liuyun dejar que Su Luo aceptara este trato injusto? Estaba a punto de soltar algunas palabras ridículas, pero Su Luo lo detuvo.

Liu Chengfeng la había calumniado y el ancestro Liu había sido traído agresivamente en busca de una pelea. A Su Luo siempre le gustaba guardar rencor, ¿cómo podía dejarlos simplemente? Incluso si su fuerza marcial no era buena, todavía debía hacerlos llorar hasta que se les acabaran las lágrimas por medios ocultos, antes de que los dejara ir.

Su Luo sonrió descuidadamente. Miró al ancestro Liu, la burla en sus ojos era extremadamente obvia: "Tu plan ha sido muy bien calculado. Si perdieses, no sufrirías ni una pequeña pérdida. Si ganases, no solo podías tomar represalias contra mí, también obtendrás la piedra de cristal de color cian de forma gratuita. Esta transacción comercial que configuras es realmente rentable y sin pérdidas. Ancestro Liu, realmente puedes calcular, ah. Usted demostró ser digno de poder comprar una propiedad tan grande para Liu Manor. Admirable, admirable."

Ese tipo de comentarios, mientras hablaba, llevaba sátira. El discurso hizo que el Ancestro Liu fuera prácticamente incapaz de levantar la cabeza.

Él, un anciano respetado, había estado cultivando en reclusión durante diez años. Nunca esperó que una vez que saliera, inmediatamente se tuviera una gran pérdida. Su reputación fue cortada por un joven tan menor, sin dejarle ni un poco de dignidad.

Sospechaba si podría o no haber chocado con el Palacio Real del Príncipe Jin debido a un delito. ¿Por qué era que había no una, sino, dos personas que tenían la boca afilada llena de dientes puntiagudos? Parecían como si sus labios estuvieran manchados con jugos venenosos, y cada palabra que hablaban era extremadamente penetrante.

La esquina de la boca de Nangong Liuyun se alzó en una sonrisa de satisfacción. Su chica Luo nunca dejaría que se decepcionara. Tenía una expresión exuberante y sonriente mientras miraba a Su Luo. Una expresión embriagadora, como una ola suave, brilló a través de su par de ojos limpios como flores de durazno. Por lo general, si las mujeres echaran un vistazo rápido a esto, muy probablemente se perderían su boda.

Sin embargo, Su Luo hizo la vista gorda a su expresión. Con un movimiento, ella lo empujó a un lado, porque no le gustaba que bloqueara su línea de visión.

Nangong Liuyun suspiró impotente. ¿Por qué era tan difícil perseguir a su chica Luo?

Al ver al Anciano Liu mirando furiosamente a su chica Luo, Nangong Liuyun estaba insatisfecho con esto. Soltó unos cuantos "humph, humph", aclarándose la garganta. Nangong Liuyun levantó los ojos y lo miró de reojo, "¿Qué? Liu Potian, ¿podrías ser que estás a punto de salir volando enfurecido por la humillación?"

Liu Elder contuvo una bocanada de sangre en la garganta hasta el punto de que su tez estaba roja.

Nangong Liuyun parecía no haberlo visto y dijo con indiferencia: "Dado que ese no es el caso, entonces use un trato justo para esta competencia. La piedra cristal de color cian en la mano de Su Yun vale cincuenta mil monedas de oro. Liu Manor no es que sea un lugar indigente, saca cincuenta mil monedas de oro para apostar. Quien gane, tanto la piedra cristal como las monedas de oro irán para el grupo ganador. Ahora esto es justo".

Liu Potian pensó, de hecho, que era justo de esta manera.

Además, hace un momento, ya lo había sentido. El joven opuesto básicamente ni siquiera tenía un poco de fuerza espiritual. Era un pequeño material de desecho completo. ¿Cómo podría Su Luo ganar contra el preciado nieto de su familia?