The Demonic King Chases His Wife [Parte 2] [Trad. al español]

Capítulo 248: Huyendo del centro de la ciudad (7)

Capítulo 248: Huyendo del centro de la ciudad (7)

Sin embargo, el tiempo parecía pasar muy lentamente.

Cuando la conciencia de Su Luo volvió, la pelea ya había terminado.

La cabeza, la cara y el cuerpo de Liu Chengfeng estaban cubiertos de sangre. Sus ojos estaban sin vida, su cabello estaba desordenado y su ropa estaba harapienta. El él de ahora parecía extremadamente patético, simplemente era insoportable ante la vista de las personas.

Era el único que quedaba en pie de Liu Manor, y también el único que no resultó herido. Sin embargo, el estar ileso ahora parecía ser un estado aún más horrible que el de los heridos.

Se lo podía ver parado allí, aturdido, mirando estúpidamente el carruaje. Su par de ojos se abrieron como círculos, como si toda su persona se hubiera convertido en un idiota. No importaba qué, no podía recuperar la conciencia.

En un instante, todos los expertos que había traído consigo fueron eliminados. Hasta el último momento, él todavía no sabía cómo atacaba el oponente... Esto, cómo podría ser así...

Lo más aterrador fue que el que había tomado medidas en aquella ocasión había sido simplemente el guardaespaldas personal de Su Alteza, el Príncipe Jin. Se decía que la fortaleza de Su Alteza, el Príncipe Jin era aún más formidable, más aterradora y aún más profundamente misteriosa...

Según las leyendas, el rasgo más aterrador de Su Alteza, el Príncipe Jin no eran sus artes marciales, sino su temperamento.

Las leyendas tenían a Su Alteza el Príncipe Jin como alguien temperamental y caprichoso, cruel y tiránico... ... Un momento estaba sonriendo como si fuera un cielo despejado y con una ligera brisa, y al segundo siguiente, su espada larga ya estaba desenvainada.

Las leyendas decían que solo había momentos en que Su Alteza, el Príncipe Jin era demasiado vago para tomar medidas. No había nadie a quien no se atreviera a mata ...

Las leyendas decían que el mundo marcial tenía innumerables leyendas acerca de Su Alteza, el Príncipe Jin. Obviamente lo sabía, pero todavía las había olvidado deliberadamente. ¡Realmente era idiota y completamente tonto! En este mismo momento, Liu Chengfeng se arrepintió de todo hasta que sus intestinos se pusieron verdes.

Ling Feng limpió lenta y metódicamente la espada larga en su mano. Miró con indiferencia a Liu Chengfeng y le dijo a Su Alteza, el Príncipe Jin dentro del carruaje: "Su Alteza, todavía queda uno vivo".

"Humm" Su Alteza, el Príncipe Jin se inclinó lánguidamente en el asiento de jade, jugueteando con el anillo en su pulgar de jade blanco en su mano y habló tranquilamente, "Déjalo, todavía tiene que regresar a Liu Manor para dar la noticia".

¡Como si nadie más estuviera cerca de ellos, la conversación del amo y el sirviente casi hizo que Liu Chengfeng rugiera de rabia!

No era simplemente un gato o un perro callejero; él era el segundo joven maestro de Liu Manor. El segundo joven maestro nacido de la primera esposa. ¡El segundo joven maestro que en este momento ya era un artista marcial en el tercer rango! ¿Podría ser que a los ojos de Su Alteza, el Príncipe Jin, él no fuera diferente de un plebeyo? A sus ojos, ¿era él mismo tan intolerable? Liu Chengfeng contuvo su ira hasta que su rostro se puso rojo. Su mirada estaba fija en el carruaje.

Sin embargo, Ling Feng y el Caballo Dragón Escamado ni siquiera se molestaron en mirarlo y se fueron directamente. Más aún, Su Alteza, el Príncipe Jin quien dentro del carruaje, nunca se había revelado desde el principio.

Las calles estaban cubiertas de una neblina sangrienta, con un silencio mortal a su alrededor. Las personas de los alrededores habían intentado evitarlo manteniéndose lejos.

Solo la figura aturdida de Liu Chengfeng estaba junto a su solitario yo.

Liu Chengfeng recordó pieza por pieza de lo que había sucedido en aquel lugar.

Todavía no podía entender por qué, solo había querido invitar a Su Alteza, el Príncipe Jin a bajar del carruaje. ¿Por qué decidió matarlos a todos sin piedad? ¿Por qué?

¿Todos estos expertos de alto nivel de la familia Liu murieron por nada?

Y todavía quedaba esa piedra de cristal de color cian. Definitivamente no debía terminar en manos de Su Alteza, el Príncipe Jin.

¿No era Su Alteza el Príncipe Jin un artista marcial de sexto rango? ¡El antepasado de su familia también era de sexto rango y podría no necesariamente perder ante él!

Pensando en esto, Liu Chengfeng juntó las piernas y corrió hacia Liu Manor.

El Caballo Dragón Escamado trotó tranquilamente durante el camino hacia la Mansión Real del Príncipe Jin.

Debajo del carruaje, Su Luo finalmente lanzó un suspiro de alivio.

Ese molesto Liu Chengfeng había sido expulsado. Al final había logrado escapar de esta crisis.

Esconderse debajo del carro nunca fue una solución a largo plazo desde el principio. Además, Nangong Liuyun... Si era posible no encontrarse con esta persona durante la mayor parte del tiempo posible, Su Luo no quería verlo.

Originalmente, Su Luo había planeado aterrizar sin ruido en el suelo, luego esperar a que el Caballo Dragón Escamado se fuera antes de levantarse para regresar a Su Manor.

Aunque su idea parecía bien desarrollada, sin embargo, en realidad, estaba llena de agujeros.