The Demonic King Chases His Wife [Parte 2] [Trad. al español]

Capítulo 231: Sin palabras en el acto (4)

Capítulo 231: Sin palabras en el acto (4)

Las palabras de Su Luo inmediatamente se hicieron concisas y agudas cuando llegó al punto principal de inmediato.

Estas observaciones, en un tono burlón, tenían un fuerte tono ridículo, ya que este no era necesariamente estricto. Sin embargo, enumeró las deficiencias de Liu Chengfeng de principio a fin, lo que inmediatamente lo hizo enrojecer de ira. Jadeó cuando su respiración se volvió áspera. Estaba enfurecido hasta el punto en el que se volvía loco.

El cuerpo de Liu Chengfeng temblaba y con su dedo apuntaba a Su Luo: "Niña repugnante, ¿qué tonterías estás diciendo?"

Inesperadamente, Su Luo parecía despreciarlo mucho. Ella cogió al pequeño dragón divino y sin prisa dijo: "¿Oh? Entonces, ¿lo que dije hace un momento no tiene sentido? Antes, ¿el segundo joven maestro Liu, no me amenazó con venderle la piedra cristal? Tal vez escuché mal, si es así, entonces, lo siento mucho".

Al decir esto, Su Luo tomó al pequeño dragón divino, se dio la vuelta y se fue.

Liu Chengfeng detrás de ella se enfureció hasta que estuvo medio muerto. El único aliento que sofocó en su garganta se movió hacia arriba y hacia abajo, sin saber si debería gruñir o ser tragado.

Su Xiaoyuan, que estaba detrás de Su Luo, tenía una mirada extremadamente adoradora mientras miraba a Su Luo. Su par de ojos brillaban con luz, como si estuviera mirando al ídolo que más adoraba.

¡Genial! ¡Ella era simplemente demasiado genial!

Ese era el segundo joven maestro de la residencia del Primer Ministro. La señorita en realidad no mostró cuartel cuando lo criticó y lo colmó de abusos. No solo regañó al oponente hasta que se sintió abatido y cubierto de tierra, sino que también hizo que el oponente no pudiera expresar su amargo sufrimiento. Esta habilidad estaba realmente en el pináculo cuando se trataba de regañar a alguien.

La admiración de Su Xiaoyuan fue tan grande que estaba a punto de arrodillarse por la adoración.

"Su Xiaoyuan, ¿en qué estás pensando? Ven rápidamente y guía el camino. Hoy, todavía no he seleccionado ninguna piedra origen ". Su Luo acarició la cabeza de este pequeño. Hace un momento, había visto al viejo Chen. Pero después de que la piedra cristal fue cortada, había desaparecido sin una palabra o sonido. Ahora, solo podía confiar en su pequeño guía.

"Eh, oh, ¡está bien!" Su Xiaoyuan dijo. Con esto, sus pensamientos volvieron. Su par de ojos todavía brillaban con una luz de adoración como antes mientras miraba a Su Luo.

Su Xiaoyuan parecía estar muy familiarizado con este lugar. Guió a Su Luo a través de muchos giros y vueltas mientras caminaban hacia el área interior. Muy pronto, llegaron a un patio remoto en mal estado en la residencia.

Este patio remoto estaba vacío y desnudo, por dentro, ni siquiera había muebles básicos. Solo tenía pilas y pilas de piedras origen.

Las piedras origen se etiquetaron y separaron adecuadamente según sus grados. Cada pila tenía una etiqueta de precio correspondiente claramente marcada. Y también, en el lateral, se proporcionaban herramientas de corte de piedra de forma gratuita a los clientes que querían cortar las piedras.

Justo después de que Su Luo y Su Xiaoyuan se fueron, Liu Chengfeng repentinamente se convulsionó y despertó de su estupor.

Su mirada sombría miró fijamente los fragmentos de piedra en el suelo, sus pensamientos gradualmente se volvieron más claros.

Hoy, en total, solo había visto a esa repugnante chica dos veces, y en ambas ocasiones, ella había sido capaz de cortar una piedra cristal... ¿qué indicaba esto?

Esto indicaba que no era por su buena suerte, sino que tenía un tesoro precioso en su cuerpo. Este era un tesoro que podía distinguir si una piedra origen tenía una piedra cristal dentro o no. Sí, debía ser así, ¡no había duda!

¡No! Debo seguirla.

Incluso si ella comiera carne, al menos debería tomar un poco de sopa para beber. No podía dejar que ella monopolizara todas las ventajas convenientes.

Pensando en todo aquello, la expresión de Liu Chengfeng fue restaurada. Trajo a su sirviente y caminó con grandes zancadas hacia el patio remoto donde Su Luo había ido.

Cuando llegó Liu Chengfeng, Su Luo estaba agachada en el suelo, examinando cuidadosamente las piedras origen, mirándolas una por una.

Por supuesto, ella simplemente estaba fingiendo, la que realmente sabía si una piedra origen tenía una piedra cristal era el pequeño dragón divino, y no ella.

Sin embargo, no podía simplemente revelar las habilidades del pequeño dragón divino. De lo contrario, confiando en su fuerza débil actual, no solo no podría protegerlo, sino que también lo dañaría.

De repente, Su Luo sintió una mirada ardiente y siniestra enfocada en su espalda.

Su Luo no necesitaba girar la cabeza para adivinar que este par de ojos llenos de odio ciertamente pertenecían a Liu Chengfeng.