Parte 250: La última partida

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Veigar se encontraba frente al Jefe Final, quien había conseguido poseer a Viktor y poner en jaque tanto a la Liga de las Leyendas como a los Emisarios del Mal.

Todos los campeones estaban en peligro de muerte por culpa de su viejo enemigo y contraparte.

"¿El Jefe Final? Pero estabas muerto"

"Técnicamente sí, estoy muerto o al menos lo estaba"

"¿Y qué haces en esta dimensión?" - preguntó el yordle, aún confundido por lo pasado

"Las preguntas de una en una..."

A través de los recuerdos se podía ver lo que le había ocurrido al villano...

Acababa de perder mi cetro y mis poderes, a merced de mis viejos compañeros de equipo... a los cuales asesiné... pensándolo en frío es comprensible...

Pero ellos me tenían un destino peor, el de torturar mi alma... algo de lo que Thresh se encargó... c ada día era un infierno de dolor...

Sin embargo todavía poseía algo de magia... la canalicé día tras día, hasta que conseguí la suficiente para traspasarla a otro plano... tu plano...

El villano paró de hablar conforme se cruzaba de brazos.

"Aquí habrán pasado meses... pero para mi fueron años..."

"Pero el juego..."

"Como un alma no podía hacer nada, así que empecé a buscar algunas opciones... con el tiempo limite decidí..."

"Traspasarla a un juego..."

"La traspasé a un juego de consola, a través de mis poderes hipnóticos ordené al propietario que te lo enviara"

"¿No es un plan demasiado rebuscado?"

"Te recuerdo que soy tú... obviamente que es rebuscado"

"Pero es sumamente rebuscado"

"Tenía que actuar rápido antes de que Thresh me localizara..."

"¿Y todo para vengarte de mi?"

"No solo de ti no, sino de todos tus amigos y compañeros" - dijo con furia

"Genial, otro igual que Malzahar... lo que me faltaba"

El Jefe Final activó el brazo de Viktor y junto con su bastón señaló al brujo, luego disparó un rayo contra él. Los daños fueron menores, pero el yordle soltó su cetro.

"Necesitaras algo mejor que eso..."

"Sigues siendo un estúpido, igual que cuando tu amigo me puso en el ordenador"

"Arrrgg...."

"Me pregunto cuánta potencia tendrá este rayo..."

Realmente eso era culpa del yordle, por insistir en solucionar el problema.

"Gracias a él pude enviar mis datos hacia su armadura..."

"¿Vas a matarme o aburrirme con tu clase?"

"No, voy a mantenerte con vida hasta que veas morir a tus amigos" - dijo el Jefe Final

"Creo... creo que no..."

"¿Mmmm?"

El villano (aún en el cuerpo de Viktor) se dio la vuelta para observar a todos los héroes y villanos entrando en la habitación. Vivos, evidentemente.

"Imposible ¡no podéis haber sobrevivido!"

"En verdad si, sobretodo si puedes congelar la lava" - dijo Lissandra con tono burlón

"¡O si eres lo suficiente tanque como para aguantar una explosión!"

"Los ninjas podemos sobrepasar las arenas fácilmente" - dijo Zed acompañado de su sombra

"Mis cuervos pudieron fácilmente con tu golem"

"Parece ser que mis compañeros han aguantado... más que los tuyos..." - dijo el químico recuperándose

Realmente habían logrado evadir los daños con una facilidad alta, lo cual llevó a pensar al Maestro Final que tal vez les había subestimado.

"Da igual... basta con traspasar mis datos a través del puerto de red..."

"No voy a dejarte hacer eso"

"¡Viktor!" - dijo Singed al reconocer su voz

"Espera... ¿qué demonios?"

"¿Sorprendido?"

"No puedes..."

"Puedes apropiarte de mi traje, pero te recuerdo que algunas partes de mi si son maquinas, y yo soy... el heraldo de las maquinas"

El brazo robótico del cuerpo se Viktor se activó, empezando a cargar una gran cantidad de energía.

Llegados a este punto el Jefe Final estaba en su armadura, sin posibilidad de retomar el control.

"¿Qué estás haciendo?"

"Voy a liberar la energía del traje y a los datos residuales con ella... lo cual te incluye a ti..." - dijo mientras apuntaba a la pared

"¡No! ¡No puedes hacer eso!"

"Corrección, en base a mis cálculos... sí, sí que puedo"

El doctor lanzó su rayo de energía contra la pared, escuchando un desgarrador grito en el proceso.

"¿El espectro está muerto?" - preguntó Azir

"Si hablamos en términos jugabilisticos, esta fue su última partida"

"Debemos de informar a la academia de lo sucedido" - dijo Jarvan IV

"Id vosotros... yo necesito algo de descanso..."

"¿Estás bien Viktor?"

"Jayce... piérdete..."

Los invocadores estaban perplejos y cuando vieron salir a la Liga de Leyendas todos empezaron a preguntar por lo ocurrido.

Por su lado los Emisarios se esfumaron, retirándose para poder recuperarse sin querer verse como aliados de ese equipo de superhéroes.

Las Crónicas de VeigarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora