Las Crónicas de Veigar

Parte 189: Escapada con estilo

Teemo y Tristana se habían encontrado en medio de una acampada con los Yordles Scout, cuando extraños y mortales meteoritos empezaron a caer del cielo.

Tras investigar ambos se encontraron con Veigar a los pies de la llamada Nave Nodriza.

"¡Tu eres Veigar!" - gritó Tristana señalándolo

"La mocosa de la cárcel... te soltaron, eh..."

"¡¿A quién llamas mocosa?!"

"Os... os conocéis por lo que veo..."

"¿Habéis venido a molestarme?" - preguntó el brujo mientras cerraba el panel de control de la nave

"Soy el Capitán Teemo y te ordeno que ceses con la lluvia de meteoritos"

"Por supuesto, una vez que me haya hecho con la nave nodriza"

"¿Cómo has dicho?"

"Tu no vas a huir con la nave, es un monumento" - dijo la chica armando su cañón

"¿Monumento? No sabéis el poder que hay escondido aquí...."

"Si intentas llevártela te las veras con nosotros" - dijo Teemo agarrando su cerbatana

"Está bien.... acepto... vuestra ejecución...." - dijo mientras sus ojos brillaban con fuerza

"Nuestra ¿qué?"

En cuestión de segundos los meteoritos de Materia Oscura empezaron a caer alrededor de la plaza y de Veigar, sin llegar a tocarle.

"¡Cuidado Tristana!" - gritaba el yordle mientras esquivaba los meteoritos

"¡Eres un cobarde Veigar! ¡Un cobarde y un matón!"

"Y vosotros sois la decepción de esta ciudad...." - dijo mientras alzaba su cetro

"¡Eh!" - se quejó el explorador - "Ahí te has... pasa..."

En ese momento un gran de número de globos aparecieron atados a la nave, todos ellos brillaban con energía oscura y empezaron a elevar la estructura poco a poco.

"¡Se está llevando la nave!" - gritó un yordle niño

"¡Se la está llevando de verdad!"

"¡Se la está llevando de verdad de la buena!"

Los chicos acababan de llegar, entre ellos estaba Timmy con una escayola.

"¡Niños! ¡Fuera de la plaza!" - gritaba Teemo a la vez que esquivaba la Materia Oscura

"¡Estate quieto! ¡Solo quiero dispararte!"

"Por supuesto que no..."

"Grgrrr...."

Pero la mayoría de las balas eran bloqueadas por los meteoritos del villano.

"Nos vemos.... capitán...."

"¡No tan rápido!" - dijo mientras sacaba una pequeña hoja

"¿Una hoja? ¿Pretendes derrotarme con una hoja?"

"No es solo una hoja..."

"De acuerdo, ¿qué es entonces?"

Teemo se acercó la hoja a los labios y emitió un silbido que se escuchó en toda la ciudad.

"¿Esa es tu mayor arma? ¿Un simple silbido?"

"Se llama pedir ayuda"

"¿Ayuda? ¿A quién?"

"A ellos..."

Tras es maestro del mal se encontraba una bandada de Gansos Afilados, unas aves con el pico hecho de acero, que volaban rápidamente hacia él, estrellándose contra los globos.

"¡Chúpate esa! ¡Enano!"

"De acuerdo... con eso no contaba yo...." - dijo poco antes de que los gansos destruyeran los globos

"Es lo que te pasa por meterte en el camino de la justi..."

"¡Cállate de una maldita vez!"

La nave empezó a caer a gran velocidad, momento en el que el villano sacó un último globo con el cual se desprendió del cohete.

"¡Está huyendo!" - gritó uno de los niños

"¡Has frustrado mis planes!" - gritó Veigar al capitán scout - "Y yo nunca olvido...."

"¡Teemo! ¡Haz algo o se escapará!"

"Vo... voy, un momento..."

El explorador intentó disparar sus dardos, pero el mago ya se encontraba demasiado lejos como para frenarlo.

"Bueno, al menos hemos impedido que robara la nave"

"Si, no ha sufrido muchos daños" - dijo el tejón

"¡Oh, no! ¡La nave se ha movido un centímetro!" - gritó uno de los yordles

"¡Es cierto! ¡Injusticia!"

"¡Quiero seguro dental!"

"¡Peguemos al pequeño Timmy!"

"¡Estaos quietos de una maldita vez!" - les gritó la artillera

Todos los yordles scout empezaron a pegar al pequeño Timmy, cosa que hizo que Teemo y Tristana tuvieran que separarles.

Fue ese día cuando Teemo se enfrentó por primera vez a su archienemigo, el Maestro del Mal... que usó globos y fue derrotado por gansos...