Parte 172: Trabajo Oscuro

740 58 7
                                    

Veigar había sido atacado por algunos campeones Noxianos que aparentemente fueron enviados para asesinarlo por la bruja llamada Leblanc.

Esta se encontraba frente a los soldados de Swain, los demás Noxianos y los yordles, sujetando su bastón y mirándolos a todos con cierta arrogancia.

"¡¿Qué creías lograr poseyendo a dos de nuestros soldados?!"

"Arff.... Swain... no cambias tu humor..."

"¡Contesta de inmediato!"

"Claro, claro, claro..."

Swain normalmente no se alarmaba a menos que le hablaran de Jarvan IV, un tipo medianamente amigable al que le gustaría despedazar, o Leblanc.

"Simplemente estaba terminando un trabajo" - dijo la chica acercándose

"¿Trabajo? ¿De qué trabajo estás hablando?"

"Del trabajo del que tu te olvidaste, el que tu no quisiste hacer" - dijo la bruja con mirada acusadora

"¿Puedes hablar claro?" - preguntó el pequeño mago

"Sabes tanto como yo" - añadió Urgot

"¡Me da igual! ¡Quiero arrancarle la cabeza!"

Darius estaba siendo agarrado por varios soldados mientras que Katarina estaba ya libre del influjo de la hechicera, quien puso una expresión de molestia.

"Darkwill ordenó matar a todos los prisioneros... quería que les ejecutáramos..."

"........"

"Tu dejaste que se escaparan la mayoría... un Noxiano no hace eso..."

"¿Los prisioneros de Darkwill? Eso incluye a...."

Veigar se quedó en silencio por unos segundos hasta que empezó a reírse.

"¿Veigi? ¿Pasa algo?"

"¿De qué se está riendo?" - preguntaba Katarina

"Vienes a intentar ejecutarme... tras tantos años y aun así fallas... vaya plan tenías en mente..."

"Eso díselo a este dúo tan... decepcionante..."

"¡Eso no me lo dices a la cara! ¡Arpía!"

"La ira consumiendo a la Mano de Noxus... ¿dónde he visto esto antes?"

La hechicera luego redirigió su mirada al pequeño maestro del mal.

"Deberías estar muerto... por culpa tuya escaparon todos..."

"¿Por su culpa?"

"Cuando Veigar escapó de nuestra prisión Noxiana algunos reclusos aprovecharon para escapar" - contestó el verdugo

"¿Cómo es que has tardado tanto en dar conmigo?"

"Creí que Swain podría hacer un encargo tan sencillo..."

"........."

"El hecho de que no te traicionase fue una verdadera sorpresa"

"Ya... lo que tu digas..." - dijo el general - "Soldados... a por ella...."

Los soldados empezaron a rodear a la maga oscura, la cual sonrió.

"¿Crees que me iba a presentar sin un plan?"

"¿Plan?" - dijo Urgot confuso - "El anterior no resultó muy..."

En unos pocos segundos la hechicera noxiana usó sus Cadenas Etéreas contra Veigar, impulsándose hacia él y colocándose detrás suya.

"¿Qué demonios?" - preguntaba el brujo confuso

"Siempre hay que tener un plan de respaldo..."

"Ese conjuro es..."

Leblanc agarró la cabeza del yordle y empezó a recitar algo en voz baja, casi no se le podía oír.

"¡Soldados! ¡No dejéis que termine el hechizo!"

"Demasiado tarde... querido..."

En unos segundos los ojos del mago cambiaron de amarillos a rojos y un enorme meteorito de Materia Oscura caía entre los guardias y magos.

"¡Veigar!" - gritaba Lulu mientras se disipaba el humo

"¡Señor! ¡No podemos ver nada!"

Los ojos de Swain cambiaron a los de un ave, pudiendo observar tras el humo la figura del maestro del mal avanzando hacia ellos.

"Veigar ¿estás bien?"

"¡Urgot! ¡Espera!" - gritaba Katarina

"Tranquila niña, no creo que....."

Sus palabras fueron interrumpidas por un Estallido Primordial que le hizo caer al suelo.

Todos se quedaron callados al ver al verdugo noxiano tirado en el suelo, con Leblanc ocultándose tras el yordle.

"Nueva orden, Veigar, deshazte de ellos"

"........"

"Y esta vez, no me falles como los otros..."

Las Crónicas de VeigarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora