Epiphany. [Traducción]

◦Capítulo 19 parte 1◦

Antes de irse, expresó una vez más su pesar a Hu Yu y ordenó al vicedirector que la incluyera en la lista de maestros oficiales, lo que debería haberse hecho hace mucho tiempo, lo antes posible.

El vicedirector asintió con la cabeza todo el tiempo, junto con el director académico. Aunque fueron regañados, sintieron como si las nubes oscuras y pesadas del cielo hubieran sido arrastradas por una tormenta de viento. Luchaban desesperadamente para evitar que sus rostros se iluminaran con una sonrisa.

¡El tirano Tao Fangzheng fue derribado!

Ese árbol grande y profundamente arraigado, que los asfixió durante muchos años, ¡por fin había sido derribado!

Ya que Du Kang lo ordenó personalmente, quitar al director del poder fue excepcionalmente rápido. Cuando los miembros del equipo de inspección llegaron a la entrada de la escuela, tenían a Tao Fangzheng con ellos. Había recuperado la conciencia y estaba siendo escoltado al coche por los dos, tropezando fuertemente.

¡Esta fue una noticia explosiva! Casi todos los profesores y estudiantes de la escuela no pudieron resistirse a salir a ver el proceso desde las ventanas. Todos llevaban sonrisas emocionadas en sus rostros, no se veía ni una pizca de tristeza.

Du Kang miró, con cara de póquer. Acababa de entender la popularidad de Tao Fangzheng.

Al final, nunca encontró el momento adecuado para hablar con Lin Jingzhe en privado, y se fue con algo de pesar.

Los estudiantes de la Escuela Secundaria No. 1, sin embargo, especialmente los del tercer año de la clase 5, estaban eufóricos como una bandada de pollos que finalmente salieron de un oscuro y demasiado pequeño gallinero.

En el camino a casa, Deng Mai estaba tan emocionado que no podía caminar derecho, y su moreno y guapo rostro brillaba. Charló con el igualmente excitado Gao Sheng, y de repente, el tema de su charla cambió a Lin Jingzhe.

"Jingzhe, ¿de verdad no quieres ir a la Universidad de Qunnan?" Preguntó Deng Mai.

Gao Sheng respondió: "Dijo que quería ir a la universidad en la ciudad de Yan, pero nunca esperé que estuviera tan decidido a renunciar a la cuota de admisión. Ese chico de Yu Ziliang tuvo suerte".

Lin Jingzhe no respondió; había algunas cosas que no se podían decir en voz alta. Quería ir a la ciudad de Yan, eso era cierto, pero de hecho tenía otra razón mucho más importante para negarse...

En su última vida, la persona que obtuvo la cuota garantizada de la escuela fue Jiang Run. A juzgar por lo que Lin Jingzhe sabía ahora, su primo claramente no lo consiguió por medios honestos.

Ahora, este tramposo se convirtió en Lin Jingzhe. Habiendo vivido ya otra vida, su perspectiva y experiencia no podían compararse con la de los adolescentes comunes. Incluso sabía lo que pasaría en la próxima década o dos. Con esto, al menos por el momento, había revertido su desastroso destino.

Pero la cuota de admisión nunca fue suya, y no iba a robar a un niño.

Lin Jingzhe apretó la correa de su mochila escolar, mirando al grupo de jóvenes despreocupados, ingenuos y rebeldes caminar bajo el sol abrasador de julio, con la mirada más suave de lo habitual. Bueno, dejémosles jugar por hoy, el examen de ingreso a la universidad no estaba lejos.

Mientras contemplaba a los chicos y su futuro, su risa alegre se interrumpió bruscamente. Lin Jingzhe salió de sus pensamientos y vio que todos se habían detenido y observaba con recelo a la persona que apareció de repente delante de ellos.

Los ojos de Li Yurong estaban hinchados de tanto llorar. Salió de detrás de un árbol, las lágrimas en su cara "como gotas de lluvia en una flor de pera"(1), y pronunció débilmente: "Lin Jingzhe..." Nadie la había escuchado antes usar este humilde y lamentable tono de voz.