Epiphany. [Traducción]

◦Capítulo 69 parte 1◦

Era la mañana del año nuevo. En cuanto Xiao Chi se levantó, oyó a su madre y a su padre, que estaban leyendo el periódico en el sofá, comentando las últimas noticias de sus vecinos del complejo: "Aiyo, he oído que el hijo de la familia Shi acaba de recibir el alta el día treinta, pero se ha vuelto a caer en la puerta de su propia casa. Ahora tiene la tibia fracturada. Qué desastre... Su familia y la Familia Qi no habían tenido un año nuevo tranquilo en mucho tiempo".

La anciana llevaba puestas sus gafas de leer y bordaba otro amuleto de la paz, puntada a puntada. La artesanía no era muy buena, así que a menudo remendaba las puntadas sueltas. Al oír las palabras de su nuera, intervino sin levantar la cabeza: "Deben de haberse encontrado con un espíritu maligno. Que su familia venga a nuestra casa a adorar al Bodhisattva..."

Yu Shuyuan no creía en el budismo, así que no tuvo más remedio que decir: "Mamá, no digas tonterías".

Las cartas enviadas por la garita a primera hora de la mañana estaban todas amontonadas sobre la mesa, de las cuales reposaba un grueso sobre de papel kraft al que nadie parecía darle importancia. Xiao Chi lo vio cuando bajó las escaleras. Tras acercarse, lo tomó y lo sopesó en la mano, consciente al instante: "¿Está aquí otra vez?"

Debían ser las mismas fotos de él y Lin Jingzhe que fueron tomadas y enviadas la última vez. Dado que el autor no vio ningún escándalo en su casa la primera vez que se enviaron las fotos, probablemente pensó que Xiao Chi había destruido las pruebas antes de que los ancianos lo descubrieran. De todos modos, poco después llegaron a su casa la segunda y la tercera copia.

Yu Shuyuan echó un vistazo al sobre que tenía en las manos y tarareó en señal de afirmación. Luego se quejó: "Esa persona debe de tener algunos problemas. No para de enviar y enviar. Hemos recibido varios ejemplares en menos de dos semanas, nos estamos quedando sin espacio para ponerlos. Tan faltos de respeto básico común, ¿no saben enviar un álbum de fotos?"

Xiao Chi se rió. Caminó hasta sentarse en el reposabrazos del sofá y frotó los hombros de su madre. Xiao Shenxing se asomó por detrás del periódico y preguntó: "¿Sabes quién lo hizo?"

Xiao Chi había investigado el asunto, el remitente era muy cuidadoso y tenía fuertes medidas contra el reenvío. La dirección desde la que se envió el sobre estaba fuera de Ciudad Yan, por lo que no quedaban pistas que rastrear. Sin embargo, incluso sin pruebas, Xiao Chi ya lo sabía en su corazón, por lo que respondió con calma: "Shi Nanxing o Qi Kai, lo más probable es Shi Nanxing".

Pero estas dos personas se mezclaban todo el tiempo, la acción de uno de ellos era suficiente para representar a ambas personas, por lo que no hace una gran diferencia cuál de ellos lo hizo.

El rostro de la anciana, que normalmente era todo sonrisas, se volvió imponente cuando escuchó las especulaciones de su nieto. E incluso la Madre Xiao puso los ojos en blanco; la reputación de Shi Nanxing y Qi Kai en el recinto siempre había sido bastante escasa.

Xiao Shenxing frunció ligeramente el ceño, guardó solemnemente el periódico y se sumió en profundas reflexiones. Después de un rato, le dijo a su hijo: "Mantente alejado de esas dos personas. Hace unos días me enteré de que Shi Nanxing ha vuelto a inquietarse. Habrá gente vigilándolos".

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Como había prometido, Lin Jingzhe llegó a la Casa de la Familia Shen el día 1. Shen Tiantian se levantó a las seis para esperarle, y en cuanto llegó, se pegó a él con su pelo revuelto, contándole los interesantes acontecimientos recientes.

Llevaba un camisón, sentada junto al brazo de Lin Jingzhe, con su delgado cuerpo hecho un ovillo. Lin Jingzhe alargó la mano y le recogió el largo pelo esparcido por las mejillas detrás de las orejas, con una actitud muy paciente, le contestó: "¿Ah, sí?"