Epiphany. [Traducción]

◦Capítulo 49 parte 2◦

Al fin y al cabo, este minusválido poco atractivo era una piedra filosofal aclamada en el sector inmobiliario.

Para retenerlo, el director general de Amaranthine Land Holdings le entregó directamente acciones por valor de 1.500 millones. Además, sus ingresos anuales, sin incluir los dividendos, no bajaban de 100 millones. El patrimonio neto de este asalariado de alto nivel era probablemente muy superior al de muchos empresarios serios de China.

Pero en este momento, la persona sentada delante de Lin Jingzhe todavía no se había pulido hasta convertirse en la gema brillante de la que se hablaba antes. En la actualidad, no era más que un grano de arena polvoriento, discreto e incluso feo. Estaba inmerso en la sombra de su primer fracaso empresarial, un fracaso que se mencionaría comúnmente después de alcanzar el éxito...

Después de graduarse, él y sus dos compañeros de dormitorio juntaron un millón de yuanes y se fueron corriendo de Ciudad Yan a la región administrativa especial para iniciar una tarea de gran envergadura. Estaba lleno de confianza en esto y dedicó toda su energía, pero cuando su carrera estaba empezando a tomar forma, fue echado a patadas por sus dos compañeros.

Obviamente, le dolió profundamente y siguió atormentándole varias décadas después. Lin Jingzhe le miró suavemente con ojos vigilantes: "Señor Mao, somos compañeros de escuela, y usted puede ser considerado como mi hermano mayor. Para ser sincero, he comprobado su información. Sé que tiene dos años de experiencia empresarial en la región administrativa especial. Después de conocer la promoción comercial en la que participaste, tengo mucha fe en tus fuerzas".

Mao Dongqing miró sus ojos gentiles, y no encontró en ellos el menor desdén oculto. Bajó los ojos. En sus oídos, aún podía oír la palabra que sus dos buenos hermanos soltaron cuando discutieron con él por el reparto de beneficios: 'Lisiado'. Nerviosamente, bebió un trago de agua.

Lin Jingzhe continuó: "Presumiblemente, debes haber oído algo sobre nuestra empresa antes de tu llegada hoy".

Como este tema era de su especialidad, Mao Dongqing finalmente se relajó. Asintió y dijo: "Estoy familiarizado con la 'tierra del rey' de Shiku Lane, en el norte de la ciudad".

Cuando mencionó esto, la desconfianza que tenía hacia Lin Jingzhe debido a su corta edad se disipó gradualmente. Posteriormente, había estudiado repetidamente cada paso de la transacción del 'rey tierra' desde el principio hasta el final no menos de cien veces. Desenterró todas las minucias que mucha gente no había notado. Desde el préstamo de Lin Jingzhe, cada paso subsiguiente era tan preciso y audaz que no pudo evitar convencerse.

Él también estaba avergonzado. Entonces, él también era optimista sobre el desarrollo del norte de la ciudad, pero se planteó correr un riesgo tan desesperado para tener éxito. Incluso ahora, con un precedente triunfante, aún podría atreverse a hacerlo. Lin Jingzhe podía tener la visión que él tenía, pero no compartía su fuerza en coraje.

Lin Jingzhe captó el cambio en el rostro de Mao Dongqing, por lo que la sonrisa de su cara se hizo gradualmente más sincera. Dijo amablemente: "Ya que el señor Mao tiene una buena impresión de mí, iré directamente al grano. Deberías haberlo visto cuando acabas de llegar, a la Inmobiliaria New Beginnings le falta mano de obra. He oído que volviste a Ciudad Yan y trajiste a un grupo de buenos hermanos que te siguieron para empezar un negocio en la Región Administrativa Especial. Creo que nuestra empresa es la etapa muy convertida donde todos perfeccionan y muestran sus puntos fuertes. ¿Estaría interesado, Sr. Mao?"

Mao Dongqing vino aquí por esta misma razón. De hecho, tenía la intención de unirse tras conocer la historia de la Inmobiliaria New Beginnings. La docena de personas que habían abandonado la Región Administrativa Especial con él porque no podían soportar la visión de los otros dos altos cargos. Abandonaron porque no compartían sus sentimientos de matar al burro cuando acabara la molienda[1]. Después de que todos regresaran a Ciudad Yan, cada día suponía un gran gasto para los ahora desempleados. Encontrar un trabajo estaba en la agenda, pero sin duda era demasiado descabellado que tanta gente fuera contratada por una gran empresa al mismo tiempo. Una pequeña empresa emergente como New Beginnings Real Estate era sin duda la mejor opción. Los miembros del equipo estaban acostumbrados a cooperar, conociéndose y trabajando juntos se podía conseguir el doble de resultados con la mitad de esfuerzo, y estaban más inclinados a permanecer juntos después de llegar a Ciudad Yan.

Además, Mao Dongqing tenía una buena impresión de Lin Jingzhe, y el salario ofrecido también era muy generoso. Tras una breve vacilación, Mao Dongqing accedió a traer a los miembros de su equipo al día siguiente a la Inmobiliaria New Beginnings y empezó a trabajar oficialmente.

El problema de la mano de obra, que ha estado rondando el corazón de Lin Jingzhe durante mucho tiempo, por fin se ha resuelto. Él, que había estado fingiendo que no le importaba todo este tiempo, no pudo evitar dar un suspiro de alivio. Sin embargo, su éxito fue celebrado prematuramente- Mao Dongqing apareció solo al día siguiente.

Tras llegar a la empresa, casi se le saltan las lágrimas cuando Deng Mai le preguntó por las personas que había prometido traer el día anterior.

"Señor Lin". Abrió de un empujón la puerta del despacho, con la voz temblorosa por la ira y los ojos enrojecidos: "De las doce personas, sólo puedo traer a seis".

Lin Jingzhe le miró dubitativo, y luego le oyó apretar los dientes y decir: "Un responsable de una empresa llamada Qiqing Real Estate encontró nuestra residencia de la noche a la mañana. Le subieron el precio tres veces más de lo que usted ofrecía. No creí que fueran de fiar, pero trasladaron a varias personas, y luego todo el mundo... se desbandó".

Mao Dongqing habló brevemente, pero al mirarle a la cara, Lin Jingzhe supo que la noche anterior debió de ser muy fea.

Esos camaradas que habían luchado codo con codo durante tanto tiempo. Y ahora, se disolvían por la diferencia de salario. Aunque se trataba de la naturaleza humana, debía de ser un golpe bastante duro para Mao Dongqing, que seguía sufriendo por su anterior fracaso empresarial.

La sonrisa de Lin Jingzhe se desvaneció al oír las palabras 'Inmobiliaria Qiqing'. Asintió y le consoló: "Está bien, lo entiendo. Empecemos a trabajar cuanto antes. Si tienen alguna dificultad, la empresa puede dar a cada uno una parte de su salario por adelantado para ayudarles".

Después de despedir al avergonzado Mao Dongqing, Lin Jingzhe bajó directamente la cara y se dejó caer en su silla.

Para ser sincero, siempre había sido reacio a tratar con Qi Qing y Jiang Qiaqia personalmente. Eran una monstruosidad; prefería mantenerse alejado de ellas y permitirse vivir más cómodamente.

Incluso la última vez que se desahogó, no golpeó al perro, sino que atacó directamente al dueño del chucho.

Pero el poder ofensivo de aquel pedazo de tierra no surtiría efecto en poco tiempo. Por supuesto, no se podía permitir que el odioso perro siguiera ladrando así sin escrúpulos.

Lin Jingzhe tomó el teléfono de la mesa, marcó el número de Deng Mai y dijo con voz grave: "Ven. Necesito que me ayudes con algo".

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Nt:

1) Matar al burro cuando la molienda estaba hecha es un modismo que significa deshacerse de alguien/algo una vez que ha dejado de ser útil.