Undercover // Justin Bieber

Veinticuatro.

- Y yo a ti - colgué suspirando.

Alguien lamió mi cara y abrí los ojos apartándome sobresaltada. Me eché hacia atrás y vi a un pequeño perro en mi cama mientras Adrián me miraba con una sonrisa. - ¿Qué es esto?

- Es para ti - miró al perro. Me quedé un momento en shock asimilando las palabras de Adrián mientras el perro venía a mi regazo.

- ¿En serio? - sonreí y lo cogí. - Pero mamá no quiere animales en casa.

- Ya, me he dado cuenta al abrir ella la puerta.

- Ooh, es tan mono - jugué con él.

- Baja eso de la cama, lo llenara de pelos - mamá pasó por el pasillo.

- Ella es una gruñona - hablé con el perro. - ¿Es macho? - asintió. - ¿Que nombre te ponemos? - lo miré.

- No lo sé - se encogió de hombros y se sentó en el borde de mi cama.

- Mmmmmm... te llamaremos... Roberto.

- ¿Roberto? - Adrián me miró horrorizado.

Reí - Solo bromeaba, ya le pondremos nombre. ¿Me visto y lo sacamos?

- Claro, te esperaré fuera. - asentí y lo vi irse.

- Pues a mí me gusta Roberto - él ladró y sonreí - ¿No te gusta Roberto? - volvió a ladrar - Pensaré otro nombre más bonito. El perro se bajó de la cama y yo con él.

Lo dejé oler prácticamente toda mi habitación mientras me vestía. - Vamos Roberto - abrí la puerta y este salió.

- Dime que no le has puesto Roberto al perro - Daniel se cruzó conmigo.

- Es temporal.

- Yo le pondría Sparky.

- Veo que no sois ingeniosos para los nombres - dijo Adrián saliendo de la cocina con mamá.

- Para nada, hace tres años compramos una tortuga pequeña y ellos la llamaron "tortuguita" - Adrián rio y yo rodé los ojos. - ¡Coge al perro que no se suba en el sofá! - mi hermano lo cogió y Adrián abrió la puerta.

- Ahora venimos.

- Espero que vengas sin el perro - rodé los ojos.

- La abuela no te quiere Roberto.

«Despertar y ver esto. Gracias @adrian_fernandez . Es macho y aun no tiene nombre. ¿Alguna sugerencia? http://instagram.com/p/pWoKIOrAuP/»

Justin me llamó para decirme donde tenía que ir y que tenía que hacer, ya que él iría a Grecia desde Toronto y yo desde España.

Me senté encima de la maleta y la cerré como pude. - ¿Vas a llevarte al perro?

- Si, lo meteré en la cosa esa cuando estemos allí.

- Mételo ya, no quiero que vaya suelto en el coche.

- Esta bien.

Justin había pagado un jet solo para Roberto y para mí. - Vaya Roberto, esto es increíble - murmuré admirando el jet - Y es para nosotros, y la azafata. - Va a ser un largo vuelo amigo - suspiré.

Saqué una foto con mi Iphone por la ventana del avión cuando estábamos llegando. - Ya estamos aquí, chico - sonreí. Justin me dijo que le hubiera gustado ver mi cara cuando viera la casa. Yo llegaba antes que él.

Cuando bajé del avión, un coche me esperaba allí. Me monté en la parte trasera llevando a Roberto conmigo.

Miré por la ventana mientras llamaba a mamá para decirle que había llegado.