Yo iba pegada a la pared, por lo tanto Alfredo era quien estaba cerca de ellas. Me agarré a su brazo asustada mientras que recibía empujones. Conseguí llegar a la puerta del hotel, y Fredo entró detrás de mí mientras que ellas seguían gritando.

- Oh dios mío - susurre - Estoy temblando - le enseñé el temblor de mi mano a Alfredo. El rió.

-Adrenalina ¿eh? - asentí sintiendo incluso mis piernas temblar.

- ¿Me enseñas las fotos? - le pregunté mientras caminábamos por el pasillo hacia el ascensor. Alfredo encendió su cámara y me la dejó. Fui pasando las fotos. - Son muy buenas.

- Lo sé.

- Creído - le di un pequeño golpe en su hombro.

- Tengo donde creérmelo - sonreí y negué con la cabeza.

Le devolví la cámara y ambos fuimos a la habitación de Justin. Alfredo llamó y Poo abrió.

- Hombre pequeña española, aquí hay un regalo para ti - fruncí el ceño.

- ¿Un regalo? - entré en la suit y vi a varios chicos allí. - Hola - saludé.

- Hola - dijeron todos al unisono. Justin se encontraba sentado en el sofá, con unas calzonas negras y una camiseta de tirantes del mismo color.

- Hey - me saludó - Toma - se incorporó y me dio una caja. Y pude notar la indiferencia hacia mi, cómo la primera vez que nos vimos en Suiza.

Cogí la caja que estaba liada en papel dorado. Vi las miradas de todos en mi.

- Me intimidan - los miré con los ojos entrecerrados y rieron.

- Solo queremos ver tu reacción - Tay se encogió de hombros. Abrí el papel y lo quité hasta que vi en la parte superior de la caja un iphone dibujado, y en letras blancas ponía "Iphone 5".

Ellos rieron por lo que supuse que mi cara había transformado.

- ¿Me has comprado un Iphone? - Justin me miró y asintió.

- No puedo creerlo - murmuré en español.

- ¿No vas a abrirlo? - escuché la voz de Poo.

- Si - murmuré en español. Dejé el papel en un lado y abrí la caja. Me dirigí a la pequeña mesa y puse la caja ahí. Los demás empezaron a hablar por algo que dijo Fredo y yo me concentré en sacar el móvil de la caja.

Lo saqué con cuidado, era blanco y venía dentro de una bolsita de plástico. La abrí y saqué el móvil para después admirarlo.

- Lo mira como si fuera un diamante - dijo alguien.

- Estoy ilusionada - me encogí de hombros - Pero aquí no cabe mi tarjeta.

- Eso ya está solucionado, toma - Justin me ayudó a cambiar las tarjetas y lo encendimos.

- ¿Cómo se utiliza esto? - miré a Justin y este frunció el ceño.

- Ven - me levanté y me senté en el brazo del sofá al lado de Justin y le di el teléfono y mi tarjeta de memoria. Justin la puso y le dije el pink. Él lo introdujo y se vieron los iconos.

- Bien, ¿Empezamos a descargarte aplicaciones? - asentí. Justin me descargó twitter, facebook, instagram, WhatsApp... - Y aquí, es donde puedes hablar con todos tus contactos.

- Vale - murmuré - ¿Y esto? - señalé un icono.

- Es la biblioteca, puedes descargarte libros y demás.

- Vale, ahora, ¿Puedes poner el teléfono en español? - Justin sonrió y entró en ajustes. Sonreí cuando vi el teléfono en Español. - Gracias - besé su mejilla y me bajé del brazo del sofá para guardar la caja y tirar el papel de regalo.

Guardé la caja en la maleta, me levanté y me giré encontrándome a Justin detrás de mi.

- Me has asustado - dije con una mano en mi corazón.

- Lo siento - sonrió de lado. - Lo siento por lo de esta tarde.

Me quedé mirándolo sin saber que decirle, no iba a decirle que no importaba, porque la verdad me había hecho bastante daño. Así que me encogí de hombros.

- ¿Solo vas a encogerte de hombros?

-¿Que quieres que diga? A veces no entiendo tu actitud.

- Bien - Justin dio media vuelta para irse pero lo cogí del brazo.

- ¿Sufres algún problema de bipolaridad que desconozca?

- ¿Que estás diciendo?

- Lo que oyes, al principio estás bien conmigo, después te muestras indiferente, después vienes y me pides perdón... no te entiendo. Si quieres que me vaya solo tienes que decírmelo.

- ¿Qué? No quiero que te vayas - Justin cogió mi mano. Lo miré, lo que pareció minutos. Sintiendo como su mano sujetaba la mía. Justin me atrajo lentamente hacia él y me dejé llevar por él. Justin puso mi mano en su hombro para después poner sus manos en mi cintura.

Puse mi otra mano en su hombro sin despegar mi mirada de él ni un momento.

Quería besarlo. Aunque él a veces fuera confuso y me hiciera daño con sus comentarios, lo quería. Aunque tenía que pensar bien de que parte de Justin estaba enamorada. ¿Estaba enamorada de él Justin Bieber que ellos habían creado con el marketing? o ¿Estaba enamorada de Justin?

- ¿En qué piensas? - me preguntó.

- Nada importante - murmuré. Justin agachó la cabeza y yo me puse de puntillas para llegar a sus labios.

- Hey, chicos - escuchamos la voz de Fredo. - Mirad esto. - Justin y yo nos quedamos a centímetros, sintiendo nuestras respiraciones.

Abrí mis ojos lentamente y me puse bien, separándome de él y dirigiéndome de nuevo donde estaban los demás.

tG|

Undercover // Justin Bieber Hikayelerin yaşadığı yer. Şimdi keşfedin