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Estaba arreglándome cuando mamá entró en mi habitación para avisarme de que se iba a trabajar. Se fue después de que le dijese dónde iba a estar. Estaba echándome la base de maquillaje cuando el timbre sonó. Escuché a mi hermano moverse y busqué en el neceser el lápiz de ojos.

Mi hermano empezó a reírse y escuché la puerta cerrarse. Fruncí el ceño y salí del baño con el lápiz de ojos en la mano.

— ¿Quién era? —pregunté.

— Un gay —dijo sentándose de nuevo en el sofá y poniéndose el portátil sobre sus piernas.

Me dirigí a la puerta y miré por la mirilla. Mi corazón se paró y no tardé en abrir la puerta sorprendida.

— ¿Justin?

— Hola —sonrió.

Lo miré de arriba abajo. Llevaba una gorra blanca, unas raybans aviador, una sudadera gris, y una camiseta blanca debajo. Un collar de oro debajo de su camiseta blanca, unos pantalones vaqueros caídos y unas supras.

— ¿Qué haces aquí? —sonreí un poco aturdida y me acerqué para besar su mejilla. Me puse de puntillas y besé sus mejillas.

— Bueno, he terminado una parte de mi gira, y pensé en venir a visitarte.

— Oh —me puse nerviosa. Él había venido a verme—. Pasa —me quité de la puerta y lo dejé pasar.

— Lo siento por lo de antes, mi hermano suele ser así de idiota.

— ¡He escuchado idiot y brother!

— Es lo que he dicho —dije en español—. Te lo presento - le dije a Justin.

Él sonrió.

— Daniel, este es Justin —mi hermano lo miró de arriba abajo— Justin, este es Daniel, mi hermano —le dije en inglés.

Justin le ofreció la mano y mi hermano se la cogió. — Lo siento, a él no le agradas. —junté mis labios en una fina línea.

— ¿Qué has dicho? —preguntó Daniel.

— Nada que pueda interesarte —cogí a Justin del brazo sabiendo que acabaríamos en una discusión y que yo acabaría tirándome a su yugular.

— Yo... estaba arreglándome - me paré en la puerta del baño.

¿Ibas a salir? - me preguntó.

— Si, iba a McDonald's a tomar un helado con una amiga —lamí mis labios—. Si quieres puedes venirte, ella quiere conocerte —mordí mi labio.

— Claro, eso estaría bien.

Sonreí. Entré en el cuarto de baño y delineé mis ojos con el lápiz negro. Un momento. ¿Cómo Justin sabía dónde vivía?

— ¿Cómo sabes dónde vivo? —me giré para mirarlo.

Él se encogió de hombros. — Soy Justin Bieber, yo lo sé todo.

— No, en serio. ¿Cómo lo sabes?

— ¿Te acuerdas que me diste la carta de una amiga? —asentí—. Ella ponía que os siguiera en twitter, así que hablé con ella.

— ¿No era más fácil preguntármelo a mí? —alcé una ceja.

— Bueno, sabía que ibas a decir algo cómo. ¿Cómo vas a venir a verme? Descansa, ya nos veremos —puso voz de chica.

— Yo no tengo esa voz - sonreí divertida.

— Claro que la tienes.

Hice una mueca y abrí el estuche del maquillaje guardando el lápiz de ojo y sacando el gloss. Lo apliqué en mis labios y me miré al espejo viendo que no tenía ninguna mancha de maquillaje. Dejé de mirarme y miré el rostro de Justin por el espejo. Su vista estaba baja ¿Estaba mirando mi trasero? Me giré y Justin subió la vista rápidamente.

— ¿Cómo has venido? —guardé el neceser en el mueble.

— En avión —se encogió de hombros y me siguió hasta mi habitación.

— ¿En serio? Pensé que vendrías nadando —rodé los ojos y guardé la cartera en mi bolso.

— No, estaba demasiado fría el agua —lo miré y estaba mirando mi habitación—. ¿Por qué solo tienes dos posters míos?

— Porque son los que más me gusta, y si pongo más, la habitación se vería muy pequeña.

— Mmmm... Tienes mis dos libros y... —miró mis cd's—. ¿No tienes My World y My world 2.0 ? —me miró extrañado.

— ¿Para qué quiero esos dos si tengo My World The Collection? Te vienen todas las canciones ahí.

Cogí las llaves y Justin me siguió hasta la puerta de entrada.

— Daniel, después vengo

— No hagáis nada malo por ahí —rió. Cerré la puerta rodando los ojos.

— ¿Qué ha dicho? —preguntó Justin

— Nada —me dirigí al ascensor y esperé a que llegara—. ¿Cómo has llegado a mi casa? —volví a preguntar.

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Undercover // Justin Bieber Donde viven las historias. Descúbrelo ahora