La vida de Horacio

Día 356

Diario de Gunter

Hago viajes astrales a lugares en el mundo donde hay gente enferma, intento sanarlas. Es mi forma de practicar para el día de la Gran Contraseña. Eva me dijo que lo más probable es que la primera persona que necesite una sanación en el día 360 sea Cronos, por el gran esfuerzo que hará en activar las figuras de dos dimensiones, corriendo sobre sus lados, conectando puntos energéticamente. Pero igual que para todos, lo que pasará cuando los contrarios nos ataquen en busca del control de la Figura, es un misterio. Y tengo la intuición de que solo entonces sabré qué tan duro puede ser mi trabajo de sanación.

Por lo demás, fui el primer niño X en activar mi contraseña personal con movimientos de Wing Chun. Esto se practica sobre un muñeco de madera donde se hacen algunos golpes, como si se estuviera peleando contra alguien. Los movimientos del Wing Chun no se sienten como un sistema de pelea, más bien los asimilo como una forma de conexión entre la mente y el espíritu. La contraseña personal es cambiante y aparece cuando uno se deja llevar por los golpes que hace. El espíritu toma el control de uno, forma sus propias figuras. Creo que esa es la actitud para todos los movimientos en el día de la Gran Contraseña, dejarse llevar por el espíritu y no razonar mucho las cosas.

Cronos, Milena y Teseo lograron activar su contra-seña personal con el Wing Chun, poco después de que yo lo lograra. Luego practicamos activar las contraseñas a la vez. Allí nos dimos cuenta de que se crea una nueva contraseña grupal.

Todos tenemos un diario donde anotamos estos pequeños triunfos, porque son muchas figuras y movimientos los que uno debe cumplir. Si mi cuaderno está lleno de anotaciones y ya voy llegando al final, me imagino que Toshiro debe tener varios cuadernos llenos.

Todos los niños X estamos a la expectativa por recibir nuevas instrucciones de Toshiro, pero él está muy reservado en estos días. De alguna forma, debe estar dejando que la energía del aprendizaje personal de cada uno siga fluyendo hasta que cada uno domine su talento para el día 360.

En este momento acaba de entrar un colibrí por la ventana, y está cerca de mi cuaderno. Me da la impresión de que quiere leer lo que escribo.

Es muy probable que otros colibríes estén entrando o mostrándose por la ventana de las habitaciones de los demás niños X.

Lo acabo de confirmar porque la energía del colibrí tiene los códigos de Milena. Sin duda, es parte de su entrenamiento personal.