La vida de Horacio

Día 181

Mensaje de Gunter

Estuve jugando con un Missing Link. Le había pedido uno a Román después de leer un mensaje de Cronos donde pedía lo mismo. ¿Saben qué? Mientras trataba de encajar las piezas, me vinieron a la mente cuatro notas musicales, como si fueran tocadas a través de un órgano de catedral. No sé nada de música así que no puedo decir cuáles son. Dejé el juego por unas horas y cuando volví a girar sus caras, otra vez escuché las notas. Cerré los ojos y vi a un anciano tocándolas en una cartulina flotante, que tenía dibujada las teclas de un piano. Se encontraba en medio de una zona árida, sin gente ni casas alrededor. Apenas había algunos pequeños arbustos a lo lejos.

—¿Cómo puede sonar tan alto si no tiene amplificadores? —me pregunté a mí mismo en voz baja.

—Porque es un piano del futuro —me respondió alguien invisible.

—¿Y tú quién eres? —pregunté.

—No importa quién soy, yo solo vine a entregar el mensaje.

—¿Cuál es el mensaje?

—Las cuatro notas musicales son el mensaje.

—¿Para qué sirven las cuatro notas?

Después de preguntar eso, vi que mientras el anciano tocaba las notas, se formaba alrededor de él una enorme figura geométrica en tres dimensiones, que cambiaba de forma a cada instante. Un segundo era un cubo y al otro algo parecido a un dodecaedro. Sus lados estaban hechos de luces, de varios colores. Y desaparecían cuando el anciano dejaba de tocar. Me daba la impresión de que necesitaba armar la estructura de una casa para vivir. Una casa con la forma de algún poliedro.

—¿Me puedes dar más información? —insistí.

—No —respondió la voz.

—¿Por qué?

—Otras entidades pueden venir a escuchar este mensaje. Hay información que proteger en la dimensión donde vives, pero también en esta. Es mejor que abras los ojos ahora mismo.

Hice lo que me pidió.

Nadenka, necesito hablar contigo. Si canto las notas en frente tuyo, seguro puedes decirme cuáles son. Aunque no tengo la menor idea sobre qué podemos hacer con ellas después.