Día 298

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Diario de Eva

Le pedí a Toshiro que me enviara a la misma fecha: 13/11/2017. Entré en mi cámara después de tomar pastillas para dormir.

Dicen que estuve dormida unas siete horas. Para mí fue todo muy rápido.

Vi a las mismas personas formando un círculo sobre la figura de Etchilhampton. Al hombre del buzo rojo, a los gemelos vestidos con buzo azul. A los otros vestidos con buzos de diferentes colores. No había vientos salvajes ni cargas eléctricas. Al contrario, todo estaba tranquilo. Una mujer vestida con un buzo verde se me acercó, con pasos decididos.

—¿Vienen a ayudarnos, cierto? —dijo la mujer.

—Primero debemos saber quiénes son ustedes exactamente.

—Somos los Maestros de la Figura. Venimos a construir... Espera, ¿quién eres tú?

—Me llamo Eva. Soy parte de los niños X. Venimos a traer... una figura, también. —Se nos dijo que recibiríamos ayuda. ¿Ustedes la traen?

—Necesitamos información para poder ayudar —dije observando el paisaje alrededor. No había árboles ni construcciones de ningún tipo. El patio donde estaba parada era enorme; creí distinguir a lo lejos un desierto rodeándolo.

—Creímos que éramos capaces de soportar la energía de la Figura, pero no lo somos. Nos entrenamos para esto, durante años, pero no lo logramos. ¿Ustedes se han entrenado para esto?

—Cada día de nuestras vidas fue un entrenamiento, incluso cuando no éramos conscientes de nuestra misión...

—Tienen que ir más allá de sus propios límites. Tienen que hacerlo mejor que nosotros. ¿Cuántos años tiene? ¿Sesenta? Disculpa por la pregunta.

—En este momento tengo setenta y cuatro años.

—La condición física es muy importante para traer la Figura. No creo que con su edad...

—Técnicamente, tengo poco menos de trescientos días de edad. Nací el primer día del año 2015.

—No entiendo. Estamos en el año 2017.

—Estoy hablando contigo a través de un sueño lúcido. Me comunico contigo desde el año 2015. Mi ADN es diferente al tuyo.

La mujer del buzo verde se quedó callada. Frunció el ceño, ladeó la cabeza y después de mirar unos instantes el suelo, volteó hacia los otros hombres y mujeres de su grupo. Una mujer con un buzo amarillo empezó a cantar. Fue entonces que empezó el mal clima, los vientos, la tormenta eléctrica.

—Es terrible, tanto esfuerzo para ni siquiera abrir la primera fase. Dime, por favor, ¿qué información necesitas? —me preguntó la mujer, con ojos nerviosos. Sus largos cabellos, empujados por el fuerte viento, le cubrían la cara.

—Necesito saber cómo ayudarlos, desde nuestro tiempo y espacio —dije levantando la voz.

—Si pudiste venir aquí, los otros también pueden venir. ¿Cierto?

—Sí, ¡lo podemos hacer! —exclamé casi al mismo tiempo que escuché un trueno.

—La figura de Etchilhampton apareció en agosto de 2015. Nosotros practicamos con ella durante dos años. ¿Ustedes ya la encontraron?

—¡Sí! —exclamé. Nuevos truenos llegaron.

—Los hermanos gemelos se ponen en la estrella doble —dijo la mujer señalando hacia su grupo—. En el centro está la mujer que representa a "La estrella reina del cielo".

—¿Cómo sé quién es "La estrella reina del cielo" en mi grupo?

—Todos los maestros en este grupo estamos conectados al planeta Tierra, excepto dos. Un hombre está conectado a Marte y una mujer a Urano. Ella es la que tiene más poder y debe colocarse al centro. Es muy importante que...

La tierra tembló en ese instante y vi cómo se formaron enormes grietas encima del patio. Justo cuando me iba a tragar la tierra, desperté.



La vida de HoracioWhere stories live. Discover now