La vida de Horacio

Día 163

Historia de Cronos

Mi nombre es Max, mi esposa se llama April. Saludamos a todos los padres que nos acompañan en esta misión.

Viajamos de Estados Unidos a Latinoamérica por-que tuve sueños con una casa en medio de una zona árida y sin personas viviendo alrededor. Allí debía descender una nave el primer día del año. Esto nunca sucedió.

Estuvimos esperando dentro de la casa, mirando a través de la ventana. Salíamos de rato en rato. Tenía lista mi cámara de video, April llevaba su cámara de fotos profesional colgada del cuello durante horas —tiene un archivo interesante con fotografías de OVNIS que ha tomado durante años—. Nos poníamos impacientes a cada minuto que pasaba.

De rato en rato, usaba los binoculares para indagar por señales en el cielo. Los preparativos del viaje fueron complicados, habíamos gastado los ahorros de varios años. ¿Y si no pasaba nada? Estábamos muy excitados con la menor posibilidad de avistamiento. Recuerdo que una luz lejana, a las tres de la mañana, nos hizo levantar del sofá. Se trataba de un avión. A las cuatro de la mañana, April tuvo un presentimiento. Ella guarda en un pequeño cofre una piedra de amatista. Un regalo que recibió de niña y que tiene una larga historia. A lo largo de su vida ha pasado por momentos claves en que ha cogido la piedra, sintiendo que las vibraciones que emanan de ella son muy intensas. El primero de enero sucedió uno de esos momentos. Cogió la piedra, me miró sorprendida porque según ella, nunca había vibrado tan fuerte. April salió a caminar, la piedra la guiaba como una suerte de brújula. Su energía era más poderosa si se movía en cierta dirección. Anduvimos sobre la tierra seca durante media hora, hasta que divisamos a lo lejos la canasta. Nos acercamos a ella con cautela y así encontramos a X-8.

Después de leer tu mensaje, María, nos dimos cuenta de que hay una conexión fuerte entre nuestro hijo y el tuyo. Por ejemplo, Cronos ama los deportes y uno de sus favoritos es el baloncesto. Incluso le hemos comprado varios uniformes de equipos de la NBA, y siempre escoge la camiseta número 8. Estoy seguro que si conversamos, encontraremos más cosas en común.

No queremos revelar más información sobre la vida de Cronos. Todavía Román no ha respondido muchas de nuestras preguntas y creo que lo mejor es andar con cautela mientras todos nos vamos conociendo.

Espero que en la reunión del día 166 se nos entregue más información. Si Román no lo hace, espero que nuestros hijos sí.

Buenas noches

Max