La vida de Horacio

Día 249

Bitácora de la Dra. Ruth

> Evento: Despertar de Horacio (X-7)

> Día: 6 de setiembre 2015 / Hora: 1:14 GMT

> Idioma de contacto: No revelado.

> Primeras palabras: (Mantras tibetanos).

Horacio se despertó sin mostrar sorpresa en el rostro. Nos observó sonriendo, con esa mirada que mezcla ternura y sabiduría —la misma que tenía cuando era niño, según los videos grabados por María—. Cuando Ivo hizo la primera pregunta, no contestó nada. Ivo insistió, pero Horacio cruzó las piernas sobre el colchón de la cámara, colocando una mano sobre otra, formando la clásica posición de flor de loto para meditar. Se debió haber quedado así una media hora, con los ojos cerrados; no lo quisimos interrumpir con preguntas. Esperamos a que se cansara como los otros niños X, pero eso no sucedió. Al contrario, se puso a cantar unos mantras que Ivo reconoció como tibetanos. Solo unos minutos después, me di cuenta de que Horacio estaba alargando los sonidos de las vocales, de forma gutural y en orden aleatorio. Me sentí dentro de una caverna, o un templo. Cuando terminó de cantar, algo había pasado en la sala. El silencio tenía una frecuencia nueva, como si las vibraciones de los cantos siguieran allí, pero sin manifestarse acústicamente. Todo se llenó de calma y me di cuenta lo estresada que estaba antes de los cantos, con los últimos acontecimientos del Proyecto Sasha.

Horacio abrió los ojos, saliendo de la cámara con movimientos relajados. Ivo le alcanzó su silla de ruedas; él se sentó calmado y lo llevamos a la habitación que ya estaba preparada para él.