PREFIERO MORIR ©

87.- Directo al grano.

Miranda

Casi pude sentir como el corazón se me detuvo de golpe por la impresión, me obligue a pestañear un par de veces para asegurarme de que no estaba soñando, de que no me lo estaba imaginando en medio de mi desesperación, pero por más veces que abrí y cerré los ojos, el seguía ahí, era real y estaba vivo. Solté el ramo que tenía entre las manos quedándome petrificada, aunque las ansias de correr hacia él y abrazarlo, llenarle de besos la cara y hacerle saber cuánto es que lo extrañaba. Mire a Tania de reojo estaba igual o más sorprendida que yo, pero la confusión le dio paso a un brillo demasiado evidente en sus ojos: le daba gusto verlo con vida.

—Henry creo que tienes a la novia equivocada, el único hombre con el que Miranda se casara, es conmigo y bueno...como ves vengo preparado—dijo Alec mientras señalaba elegante el traje que llevaba puesto. La madre de Henry; Olivia Miller, se levantó agitando su abanico observando a Alec indignada. Los hombres de Henry comenzaban a acercarse a la escena a rodear a Alec, quise caminar hacia el para evitar que le hicieran daño ¿Cómo se le había ocurrido venir solo? Pero la dura mano de Henry me lo impidió tomando por el brazo de manera brusca.

—No sé si eres estúpido o demasiado valiente para venir a interrumpir mi boda solo—dijo Henry arrogante mientras caminaba unos pasos delante de mí.

— ¿Quién dijo que venía solo? —pregunto Alec irónico sonriendo de medio lado. Tenía razón de entre la multitud de gente comencé a identificar a Patrick que se acercaba elegante mientras cargaba una de sus armas, Evan hacia lo mismo deshaciéndose de un cigarrillo deteniéndose para aplastar la colilla, y el ultimo en aproximarse fue tío Michael, se acercaba cauteloso con un elegante bastón negro como soporte, los ojos se le llenaron de lágrimas al igual que a mí, se detuvieron los tres a un costado de Alec mientras la prensa hacia expresiones de sorpresa, sacando fotos y grabando con pequeñas grabadoras portátiles, si esta información salía a la luz, había mucho en riesgo. Escuche como Henry chasqueaba la lengua y movía el dedo índice y medio en círculos, los disparos comenzaron a sonar y me agache en un acto reflejo, cuando pararon, levante la mirada esperando encontrar lo peor, pero no fue así, la gente de la prensa estaba tirada en el suelo...sin vida.

—Y ahora que tenemos un poco de privacidad....podemos negociar el asunto de con quién debe casare Miranda.

—No está a discusión Henry, no vine aquí a tener una conversación de bienes, no vine aquí a pedirte por favor que no te cases, no vine aquí a tener piedad de ti por habérnosla arrancado por todo este tiempo, por haberla hecho sufrir y con ella a nosotros también—dijo Alec seguro mirándolo decidido y retador.

—Vaya...directo al grano—dijo Henry observándome de reojo con una advertencia impresa.

—Se acabó Henry—musite logrando que me mirara irónico. Samanta y Tania estaban apenas unos pasos detrás de mí, cuidando que no fuera a escapar de alguna manera.

—Tyson saca a mi madre de aquí—ordeno Henry a uno de sus hombres, asintió obediente y guio a la madre de Henry fuera del lugar, que me miraba con recelo, como culpándome de todo esto. En un acto descarado, levante la mano para decirle adiós con una sonrisa socarrona en los labios, Olivia frunció el ceño y siguió caminando guiada por el que parecía llamarse Tyson, un hombre piel obscura de casi dos metros que intimidaba a cualquiera.

— ¿Y tú crees que dejare que te la lleves así de fácil? —pregunto Henry mientras pasaba el dedo índice por sus labios.

— ¿Y tú crees que yo vine a pedirte permiso Wilson? —contesto Alec esbozando media sonrisa descaradamente.