33.- Esa es mi chica.

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Miranda

Alec sin aviso le soltó un golpe con la mano hecha puño en la boca, Evan giro la cara bruscamente y cuando se incorporó pude ver el hilo de sangre que tenía en la comisura de los labios, Evan contesto el golpe dando justo en la ceja que también comenzó a sangrarle a Alec. Alec se incorporó y limpio la sangre que empezaba a salir de su ceja con la remera para que no le impidiera la vista, un golpe al estómago fue lo siguiente que sintió Evan, soltó un gruñido sofocado y le regreso el golpe a la altura del hígado, lo que hizo que Alec cayera al suelo, me lleve las manos a la boca asustada, jamás pensé que de verdad se fueran a tirar a matar, no podía hablar, estaba estupefacta. Evan se acercó a él y le dio una patada en el estómago antes de subirse en él y tomarlo por el cuello, Alec empleo toda la fuerza que le quedaba e invirtió los lugares, se puso encima de Evan y comenzó a golpear con el puño una y otra vez la cara de Evan, gotas de la sangre combinada de ambos se esparcía por el suelo de mi habitación. Evan lo empujo y quedaron ambos tirados en el suelo, recuperando el aliento, se acercó lo más rápido que su coordinación aun le permitía hacia Alec y le solo otro golpe en la boca, rápidamente el labio inferior de Alec se tornó rojo por la sangre, Evan se agacho a donde estaba su saco y saco un arma, Alec lo miro de reojo e hizo lo mismo sacando la suya de su chaqueta que aún estaba en el suelo, se apuntaron directo a la cabeza sin titubear, se observaban con odio y cuando menos acorde ya estaba caminando sin voluntad propia hacia ellos, trate de mantener la calma para no hacerles saber lo asustada que estaba.

- ¡Demonios, basta! Ya se molieron a golpes, véanse las caras, están sangrando e hinchados...a ninguno de los dos les queda rastro alguno de su atractivo rostro-dije mirándolos alternadamente, la sangre de la ceja de Alec no dejaba de brotar y la mejilla de Evan estaba lo bastante hinchada como para dejar de notar su marcada mandíbula.

-Ahora, quiero que ambos me entreguen sus armas, lo último que quiero es sacar a dos cadáveres de mi habitación. -mi voz sonaba bastante despreocupada como para desconcertarlos así que me alegre por ello, en ese momento Pat y Jessica entraron en mi habitación y observaron la escena, Pat sonrió divertido y Jessica se llevó las manos a la boca asustada, Pat se agacho para susurrarle algo y Jessica asintió retirándose. Pat entro en la habitación cerrando la puerta tras él.

-Me gustaría ver la cara de Michael cuando vea esta sangrienta escena que formaron frente a su sobrina adorada convaleciente-dijo aplaudiendo mientras se acercaba, lo mire divertida y le guiñe un ojo, Alec y Evan seguían apuntándose.

-Caballeros, entréguenme sus armas-les ordene mientras seguían observándose con odio, Alec fue el primero que me la entrego, se acercó a mí y pude ver lo hinchada que tenía ya la ceja, no dejaba de sangrarle, tenía el labio roto, pero la sangre de ahí la limpiaba con su lengua, Evan hizo lo mismo y a diferencia de Alec él tenía el ojo morado y la mejilla muy hinchada e igual el labio no dejaba de sangrarle, cuando tenía las dos armas en mi poder, empuñe la que me entrego Alec y apunte a Evan que me miro desconcertado, dispare y la bala paso por un lado de su cabeza sin hacerle ningún daño, después empuñe el arma que me entrego Evan y dispare a Alec que también estaba desconcertado, la bala tomo el mismo trayecto que la que le dispare a Evan paso por su lado sin hacerle daño, ambos se habían agachado en acto reflejo y yo los mire coqueta cuando se levantaron, lance las armas a la cama y los aplausos de Pat resonaron en toda la habitación.

-Creo que eso bastara para llamar la atención de tío Michael y todo el equipo de seguridad, le deben una larga explicación a tío Michael, caballeros.

-Esa es mi chica-dijo Pat mirándolos de reojo. -Espero que con esto entiendan que no deben hacerla enojar muchachos, ya llame a Andrew para que los atienda, no debe tardar en llegar. -un instante después el equipo de seguridad entro armado hasta los dientes y detrás de ellos tío Michael.

PREFIERO MORIR ©Where stories live. Discover now