Princesa de un castillo de monstruos

46. En el abismo de los recuerdos

Capítulo escrito con música tristona de fondo :")

***

Lo lamenté.

Los recuerdos que perdí se liberaron al ver a Sauto. Todo lo que olvidé se desató y me abrió un mundo de ensueño.

Estaba frío y oscuro, y quería ayuda pero no había nadie a mi alrededor. Me quedé aovillada, abrazando mis piernas con los brazos. No sabía cuánto tiempo llevaba en este vacío o si tendría la oportunidad de ver la luz otro día. Por más que buscaba a mi alrededor una salida, la oscuridad solo se extendía, como si tuviera la intención de aprisionarme una eternidad. No importaba cuanto llorara, nadie me veía, nadie era capaz de consolarme; no importaba cuán fuerte elevara mis gritos, nadie me escuchaba; y aunque pidiera ayuda, nadie venía a mí. Solo me quedé con el frío de la eterna noche, de la soledad y con un desgarro en la garganta.

Sollocé en silencio, sin saber qué hacer.

Estaba atrapada en un punto muerto. Quizá esto era el precio a pagar por haber reprimido a alguien a este dolor y vacío. Tal vez era momento de sufrir estas mismas emociones para comprender mis acciones al olvidar mis recuerdos más apreciados. Sin embargo, no recordaba bien a quién había dañado o qué olvidé en el pasado, o si tuve una vida fuera de este lugar. Solo tenía esa extraña sensación de incertidumbre.

Estaba sola.

"Lo siento. Lo siento. Lo siento."

¿A quién pedía disculpas? No lo sabía. ¿Por qué me sentía culpable? Lo desconocía. Mis preguntas no tenían respuestas. No tenía nada.

Lamentaba el hecho de estar aquí, aunque no sabía exactamente la razón. Yo ansiaba salir, quería conseguir esa libertad, deseaba vivir esa vida que esa persona quería para mí. Pero estaba estancada. Paralizada en un sitio desconocido, sin salida ni luz. Sentía el miedo calar en mis huesos, oprimiendo mi corazón en un mar de sentimientos. Era tristeza, susto y dolor... sobre todo dolor.

—Por favor. Por favor —balbuceé—. Creo que estoy rompiéndome ahora mismo. ¿Qué debería hacer?

"Por favor. ¿Qué tenía que hacer? ¿Por qué tenía la sensación de ir a alguna parte?"

Algo andaba mal en mí. Muchas cosas comenzaron a girar dentro de mi cabeza, y me quedé con la impresión de que tenía algo pendiente que hacer, pero no lo recordaba bien. La obligación a la cual debía responder estaba perdiendo claridad más y más. Solo poseía el sentimiento de que no estaba bien seguir con esto.

Todo lo que tenía adelante era un abismo infernal. No existía punto de partida ni final. Solo había la nada misma. No veía ni mis manos o alguna luz al que debía seguir. Si debía crear mi propio camino para salir, no lo sabía, y tampoco me creía capaz de hacerlo.

Por favor. No importaba cuanto suplicara, el resultado era el mismo. El silencio era lo único que obtenía al mascullar palabras sin sentido. Todo esto podría ser una ilusión que mi mente creaba, pero ¿cómo podría conseguir detenerlo? ¿Cómo abandonar este lugar cuando no existía nada?

Por favor. Quizá no debería esforzarme tanto.

El tiempo quizá transcurría lento o rápido, no lo sabía. Pronto mis lágrimas ya no salieron de mis ojos, pronto dejé de hablar, de moverme o intentar encontrar una salida. No sabía lo que esperaba o si cambiaría algo el quedarme así, pero estaba perdida. Totalmente.

Por favor, alguien. Alguien.

En algún momento en medio de esa oscuridad, cerré los ojos, lo que no hizo mucha diferencia en mi visión. Para cuando volví a abrirlos, todo ese vacío había sido sustituido por el color verde de un bosque. Sentí las texturas del césped con mis manos, alcé la vista para ver el cielo de un azul claro y la copa de los árboles. ¿Esto se trataba de un sueño? Tal vez...