Undercover // Justin Bieber

By desirealba

3.1M 117K 21.5K

Encuentrame en las sombras, estaré protegida, hasta mañana. Está seguro de que no te sigan. No necesitas otr... More

En secreto.
Prólogo
Uno.
Dos.
Tres.
Cuatro.
Cinco.
Seis.
Siete.
Ocho.
Nueve.
Diez.
Once.
Doce.
Trece.
Catorce.
Quince.
Dieciseis.
Diecisiete.
Dieciocho.
Diecinueve.
Veinte.
Veintiuno.
Veintidos.
Veintitres.
Veinticuatro.
Veinticinco.
Veintiseis.
Veintisiete.
Veintiocho - Veintinueve
Treinta.
Treinta y uno.
Treinta y dos.
Treinta y tres- Treinta y cuatro- Treinta y cinco.
Treinta y seis.
Treinta y siete.
Treinta y ocho.
Treinta y nueve.
Cuarenta.
Cuarenta y uno.
Cuarenta y dos.
Cuarenta y tres.
Cuarenta y cuatro.
Cuarenta y cinco.
Cuarenta y seis.
Segunda Temporada. Prólogo
Uno.
Dos.
Tres.
Cuatro.
Cinco.
Seis.
Siete.
Ocho.
Nueve.
Diez.
Once.
Doce
Trece y Catorce
Quince
Dieciseis y Diecisiete
Dieciocho
Diecinueve.
Veinte
Veintiuno.
Veintidós.
Veintitres.
Veinticuatro.
Veinticinco
Veintiseis
Veintisiete
Veintiocho
Veintinueve
Treinta
Treinta y uno
Treinta y dos
Treinta y tres
Treinta y cuatro
Epílogo
Navidad.
Nuevos capitulos.
1. Extra Navidad.
2. Extra Navidad
3. Extra navidad.
4.Extra Navidad. Fin
Aclaración.
Capitulo extra por los 2.5K
¿Tercera temporada?
TERCERA TEMPORADA
Cast
Prólogo
Uno
Dos
Tres
Cuatro.
Cinco
Seis
Siete
Ocho [I]
Ocho [II]
Nueve
Diez [I]
Diez [II]
Once
Doce
Trece
Catorce [I]
Catorce [II]
Quince
Dieciseis
Diecisiete
Dieciocho
Diecinueve
Veinte
Veintiuno [I]
Veintiuno [II]
Veintidos
Veintitres
Veinticuatro [I]
Veinticuatro [II]
Veinticinco [I]
Veinticinco [II]
Veintiseis
Veintisiete [I]
Veintisiete [II]
Veintiocho
Veintinueve [I]
Veintinueve [II]
Veintinueve [III]
Capitulo privado subido
Treinta [I]
Treinta [II]
Treinta [III]
Treinta y uno [I]
Treinta y uno [II]
Treinta y dos [I]
Treinta y dos [II]
Treinta y dos [III]
Treinta y tres [I]
Treinta y tres [II]
Treinta y tres [III]
Treinta y cuatro [I]
Treinta y cuatro [II]
Treinta y cuatro [III]
Treinta y cinco [I]
Treinta y cinco [II]
Treinta y cinco [III]
Treinta y seis [I]
Treinta y seis [II]
Treinta y siete
Treinta y ocho [I]
Treinta y ocho [II]
Treinta y nueve [I]
Treinta y nueve [II]
Cuarenta.
Cuarenta y uno.
Cuarenta y dos.
Cuarenta y tres.
Cuarenta y cuatro.
Cuarenta y cinco.
Cuarenta y seis (extra)
Cuarenta y siete
Cuarenta y ocho
Cuarenta y nueve
Cincuenta
Cincuenta y uno
Cincuenta y dos
Cincuenta y tres.
Cincuenta y cuatro
Cincuenta y cinco.
Cincuenta y seis
Cincuenta y siete
Cincuenta y ocho
Cincuenta y nueve
Sesenta
Sesenta y uno
Sesenta y dos
Sesenta y tres
Sesenta y cuatro. «final»
Sesenta y cinco (extra)
Sesenta y seis (extra)
Sesenta y siete (extra) Penúltimo
Sesenta y ocho (extra) FINAL

Treinta y uno [III]

5.7K 339 29
By desirealba

ABIGAIL


Él soltó mis cuerdas cuando entró la tercera vez y vio que ya no estaba llorando y estaba tranquila. La verdad era que ya no me quedaban más lágrimas, solo se escapaban de mi boca pequeños suspiros que se convertían en sollozos. Cuando tuve las cuerdas fueras de mi cuerpo, él me miró con advertencia para que no hiciera ninguna estupidez. Me quedé quieta mientras me quitaba las cuerdas de las muñecas. Sentí la liberación de mis extremidades y moví mis muñecas de manera circular.

— Te traeré algo de comer. - dijo.

Salió de la habitación, cerrando la puerta y echando la llave. Siempre que salía lo hacía, pensando que podría escaparme. La verdad es que intenté soltar mis muñecas, pero fracasé, haciéndome daño. Miré las marcas rojas que habían dejado y miré a la puerta cuando escuché de nuevo la llave en la cerradura.

Entró y cerró la puerta. En la mesa dejó un plato con lasaña. El olor entró por mis fosas nasales e hizo mis tripas rugir. ¿Qué día era?

Me puso un tenedor y una servilleta. Miré atentamente todos sus movimientos hasta que se sentó al otro lado de la mesa, observándome.

— No tiene veneno, lo prometo - sonrió de lado. Nos quedamos mirándonos un momento y él suspiró. — De acuerdo, te dejaré sola. - se levantó.

Abrió la puerta y salió cerrándola. Miré la lasaña indecisa. ¿Comía? Tenía hambre, eso no podía negarlo, pero si comía, él saldría ganando. Aunque me convenía no enfadarlo. Cerré los ojos y miré a mi alrededor. Observé la cama pequeña, perfectamente hecha. Las paredes eran blancas y tenía un armario y una cómoda. La habitación era más grande que la mía.

Me levanté y me sujeté a la silla. No sabía cuánto tiempo llevaba sentada, así que mis piernas agradecieron un poco de movimiento. Me asomé a la ventana, abrazándome a mí misma. Hacía frío. La ventana tenía barrotes, pero no estábamos en una casa, si no en un piso. Ni siquiera veía el suelo de la calle desde aquí, y no había nada alrededor.

— Pisos de nueva construcción - su voz me sobresaltó y me giré asustada. — Come, por favor. - señaló el plato. — Ahora.

Me acerqué a la mesa y me senté de nuevo. Cuando cogí el tenedor, me di cuenta que estaba temblando. — No deberías estar asustada - dijo calmado. — Como te dije antes, no voy a hacerte daño.

Dejé el tenedor en la mesa, incapaz de comer. Él bufó realmente molesto. - ¿No vas a comer? - No dije nada. — Bien, como quieras.

Cogió el plato enfadado y se fue de la habitación dando un portazo. Fui a la cama y me metí entre las sabanas para tapar mi cuerpo. Aún llevaba el vestido y las medias. No sabía cómo iban a encontrarme, y estaba asustada.

Me quedé en la cama, temblando debajo de las mantas. Él no quería hacerme daño ¿Para qué me había secuestrado entonces?

Secuestrado. Estaba secuestrada. La piel se me puso de gallina de nuevo.

Me levanté y volví a mirar por la ventana, intentando reconocer el lugar, moviendo los barrotes. No había nada que pudiera hacer. Además, si los barrotes no estuvieran, tampoco podría saltar por la ventana.

Me senté en el borde de la cama y la puerta volvió a abrirse. Él me dejó la ropa encima de la silla, también unos deportes. No hablé, pero cuando salió, no tardé en cambiarme, no me sentía cómoda en ese vestido, y además, hacía frío.

Esa noche, ni siquiera se acercó con la cena, así que me acosté y a las horas, el sueño me venció.

A la mañana siguiente, abrí los ojos y el estaba sentado en la silla observándome. Me sobresalte y me senté en la cama. — Buenos días — dijo.

No contesté y él suspiró pesadamente. — Te traeré el desayuno.

Lo vi desaparecer y me levanté. Le preguntaría por qué me había secuestrado. También le preguntaría por qué no planeaba hacerme daño. Tenía que saber cuáles eran sus intenciones.

Entró con el desayuno y esta vez me senté en la silla, dispuesta a desayunar. — Vaya, hoy sí tienes hambre — sonrió y se sentó frente de mí.

Miré con inseguridad la comida. — No está envenenada, te lo dije — levantó sus manos.

Bebí un poco de café y mordí la tostada. Mastique lentamente y lo miré. Me miraba satisfecho, no me cuadraba. ¿Qué secuestrador alimentaría a su rehén?

— ¿Por qué? - mi voz sonó ronca y carraspeé.

— ¿El qué?

— ¿Por qué me tienes aquí?

— Surgió. La verdad es que no esperaba verte esa noche. — se acercó a la mesa. — ¿Es eso a lo que te refieres?

— ¿Por qué no quieres hacerme daño?

— ¿Por qué debería hacerte daño?

Estaba empezando a agobiarme porque no estaba contestando ninguna pregunta.

Respiré profundamente. — ¿Por qué me enviabas claveles?

— Oh — sonrió. — Ya sé dónde quieres llegar. Me gustas Abigail. — Dejé de respirar un momento — Él no te merece.

— ¿Y tú sí? — susurré.

Él frunció el ceño, molesto. — Sí. Te trataría mejor que él.

— ¿Qué es lo que quieres exactamente?

— Solo quiero estar contigo. Quería conocerte.

Negué con la cabeza. — Podrías haberme conocido en la calle.

— ¿Y te hubieras parado a hablar con un desconocido? — sonrió cínico. — Claro que no. Estás demasiado obsesionada con Bieber como para mirar a otro.

No me di cuenta de que había empezado a temblar. — ¿Por eso no vas a hacerme daño? Porque... ¿Te gusto? — pregunté con voz temblorosa.

— Exacto.

Tragué saliva sonoramente. — No puedes retenerme aquí.

— Claro que puedo, lo estoy haciendo. Esto es lo mejor para ti.

— ¿Para mí? — me señalé.

— Sí. Ya me lo agradecerás con el tiempo. — se levantó.

— ¿¡Agradecerte el que!? — me levanté. — ¿¡Qué me tengas aquí encerrada!?

Él cerró la puerta con llave y grité frustrada. Tiré todo lo que estaba en la mesa, rompiéndolo y llenando el suelo. Empecé a llorar de rabia y me acerqué a la puerta. La golpeé. — ¡No puedes tenerme aquí encerrada! ¡Por favor, déjame salir! — Tiré del pomo de la puerta y me arrodille en el suelo.

No iba a abrirme y mucho menos me iba a dejar salir. Sollocé, pegada a la puerta.

Acabé tendida de nuevo en la cama. Lloré y maldije a la vida, hasta que me calmé y dejé de llorar.

Mi secuestrador no tardó en entrar en la habitación. — Limpia todo esto. — dijo con autoridad.

Me giré y lo miré con la ceja alzada. — No.

Apretó su mandíbula y me levanté. — No juegues conmigo, Abigail.

— Déjame salir.

— ¡Recoge!

— ¡No!

— Maldita sea.

Se acercó a mí y me cogió con fuerza del brazo. Me echó al suelo, al lado del plato y el vaso roto. Cogió mis piernas y tiró de mis piernas.

Grité.

Estaba sacándome de la habitación. No quería saber dónde me llevaba. Me agarré al quicio de la puerta, pero él tenía más fuerza que yo, así que siguió arrastrándome hasta una habitación oscura.

— Te quedarás aquí hasta que aprendas de que va esto. A mí no vuelvas a hablarme de esa manera — cogió mi mejilla entre sus dedos y me soltó al momento.

Cerró la puerta y me quedé a oscuras. No entraba ni una raja de luz por ningún sitio. Me quedé allí, pegada a la puerta y abrazándome a mí misma por lo que me pareció una eternidad.

¿Qué estaría haciendo mamá? ¿Estaría bien? ¿Y Daniel? ¿Estaría Justin aquí o seguiría en Los Ángeles?

Cerré los ojos, imaginándome de nuevo en Barbados, en la moto de agua con mi hermano, viendo a mi madre feliz y a Justin. Estaba contento y yo también lo estaba, a pesar de todo. A los años le había contado lo de mi padre, sólo porque él había preguntado. Se había interesado por mi vida y eso me había gustado.

Recordé lo dura que había sido mi madre, pidiéndome que me fuera a Miami, que ella no pasaría año nuevo con nosotros. ¿Por qué? Ambos me dejaron sola ese día. Si me hubiera ido a Miami, no hubiera pasado nada de esto. Yo no me hubiera encontrado a ese chico y no estaría ahora aquí. Pero era algo inevitable.

Él sol dio en mi piel y suspiré maravillada por las vistas. Escuché a gente hablar y me giré para ver a Justin acercarse a donde estaba el pequeño bullicio. Había allí fans que querían verlo. Él charló durante un minuto, se despidió y me miró. Se acercó a mí cantando algo con una voz grave. Reí mientras él se acercaba con los brazos abiertos y lo abracé.

¿Sabes lo que pienso? – me separé de él y lo miré.

¿El qué?

Rodeó mis hombros con uno de sus brazos.- Nos está yendo bastante bien, por lo menos por ahora.

La verdad es que sí. Es sorprendente lo que podemos llegar a ser si mantienes tu pene dentro de tus pantalones.

Augh, eso ha sido un golpe bajo. Pero me lo merezco. ¿Debería quizás guardar mi pene solo para mí?

Dudo que lo hagas, te encantan que toquen tu pene.

Me gusta que me lo toques tú.

Solté una carcajada y me puse frente a él. – Claro, claro. – Puse mis manos en su pecho y bajé por él hasta llegar a su bañador.

¿Estás seduciéndome?

Pensé que ya te tenía seducido.

Desde que me dijiste "Justin" – puso voz de chica.

Lo empujé. – Yo no hablo así, y segundo, eres un mentiroso.

Caminé, alejándome de él. Me alzaron y pegué un gritito. Me agarré del cuello de Justin y reí. Él estaba corriendo hacia la piscina. Saltó y cerré los ojos, preparada para sumergirme en el agua. Justin me soltó debajo del agua y salí a la superficie. Reí cuando Justin movió su cabeza de lado a lado, tal cual perro. Echó su pelo hacia atrás y se acercó a mí. Me agarré de su cuello y rodeé su cintura con mis piernas. – Te amo – dijo en español.

Te amo – contesté.

Juntamos nuestros labios y nuestro beso se vio interrumpido cuando los niños empezaron a tirarse a nuestro lado, haciéndonos que nos separáramos y empecé a reír.

______________

¡Hola! Aquí otro capítulo. Espero que les guste. No los hago muy largos porque me llevaría más tiempo y prefiero que tengan algo para leer.

¿Preguntas, dudas, comentarios sobre lo que está pasando?

Contesto a las preguntas:

Creé la historia porque me costaba encontrar una historia así. "Real". He leído historias realmente fantásticas de cómo una fan conoce a Justin y todo sucede de forma muy mágica. Escribo lo que quiero leer y he intentado imaginarme cómo sería si él se fijara en alguna de nosotras. He intentado imaginarme cómo sería él y una relación con él.

Sigo escribiendo esta historia porque es mi forma de evadirme y me encanta Undercover. Me encanta imaginarme como sería una relación con él, que si en Barbados o en su casa y me encanta escribirlo. Es como imaginar un perfecto sueño, aunque con sus problemas, claro está.

Sigo añadiendo canciones :3

Continue Reading

You'll Also Like

2.4K 286 21
Bastó un giro inesperado en su vida para que todo estuviera de cabeza en un solo parpadeo, consternado por la conmoción y la pérdida en el momento, l...
385K 11K 20
Ellos se atraían mutuamente, pero ambos tenían novios. Por un "mal entendido", se separan de sus parejas. ______ es acosada por su ex-pareja, Diego...
2.2M 227K 131
Dónde Jisung tiene personalidad y alma de niño, y Minho solo es un estudiante malhumorado. ❝ ━𝘔𝘪𝘯𝘩𝘰 𝘩𝘺𝘶𝘯𝘨, ¿𝘭𝘦 𝘨𝘶𝘴𝘵𝘢 𝘮𝘪𝘴 𝘰𝘳𝘦𝘫...
699K 26.5K 78
¿Quién dice que las casualidades no existen? Ella era una fan más obsesionada por el británico de ojos verdes. Él acaba de terminar su gira buscando...