No corregido
Observé el concierto desde donde siempre lo hacía. El concierto pasó demasiado rápido y ya estaba caminando entre la multitud para entrar de nuevo dentro. Me fijé en el escenario, como un chico intentó acercarse a Justin y fue empujado y tirado por los de seguridad.
Me agarraron del brazo y miré confundida a la chica, que me señalaba su móvil. Posé para la foto, después otra, y otra, y cuando me di cuenta, estaba en el centro de un cúmulo de gente que me pedía que le dijese a Justin esto o lo otro, o simplemente sacando fotos.
- Chicas, por favor. - Intenté moverme. Alguien me tiró del pelo y escuché en español que iban a caerme, y así lo hice. Había un resalto en medio de la pista y con tanta gente no lo vi.
Separé a las chicas con fuerza, intentando alejarlas de mí porque estaba empezando a agobiarme. Me levanté y vi a Mike acercarse a mí abriendose paso. Me pegué a él como si fuera mi salvavidas y él me sacó de allí.
- Deberias de haber entrado antes, como siempre haces. ¿Que te ha pasado?
- Me he quedado mirando al chico que ha saltado al escenario. - respiré hondo.
- ¿Estás bien?
- Sí, un poco agobiada, pero bien. Gracias Mike.
- De nada, Abigail.- me sonrió.
Caminé por los pasillos, buscando el camerino de Justin y Nick se unió en mi búsqueda. - Por aquí no es. - me sonrió.
- ¿No? - me quedé parada y lo miré.
- Vamos - puso un brazo alrededor de mis hombros. - Te conozco desde hace mucho tiempo y no se apenas nada de ti.
- Sí, es cierto. Bueno no sueles estar mucho alrededor de Justin cuando estoy yo.
- Tienes toda la razón. He estado ocupado, estoy grabando un video con mi dron.
- ¿Tienes un dron?
- Sí, hoy he estado grabando. Te avisaré cuando suba el video en Instagram.
- Estaré pendiente.
- Aquí es, chica española.
- Gracias - le sonreí. - Te debo una.
- Sí, una cerveza estaría bien.
- Me lo apunto.
Llamé a la puerta y Justin no tardó en abrir. - Hola. Vamos a esperar a que se vaya todo el mundo, ¿Vale?
- Vale. ¿Puedo pasar?
- Por supuesto. Te he estado viendo en los últimos conciertos. Te veo más animada.
Me encogi de hombros y me senté en un sofá. - He decidido disfrutar de la vida.
Justin sonrió de lado. - Me alegra escuchar eso. Aunque te sigo notando rara.
- ¿Rara? - frunci levemente mi ceño.
- Estás... diferente. No sé si quiero a la chica de antes o a esta. No eres tú.
- Sigo siendo yo.
- Necesito que vuelvas a coger las riendas, pequeña. Necesito tu genio y tu fortaleza.
- Sigo teniendo mi genio y mi fortaleza. - Negué con la cabeza. - Solo estoy cansada, Justin. Psicologicamente estoy echa polvo. Lo de las chicas en Praga... - lami mis labios. - Rompiste mi corazón. Pero mi madre es lo más importante ahora. Estoy... cansada, muy cansada. Estoy dolida y cansada. - repetí. - Y también tengo miedo.
Justin se sentó a mi lado y puso su brazo alrededor de mis hombros. Apoyé mi cabeza en su hombro y lo abracé. - Todo va a estar bien. Tu madre está luchando y su familia está ahí, apoyandola. No quiero romper tu corazón, no de nuevo. - cerré los ojos. - Quiero que seas feliz, no quiero que te guardes tus sentimientos, si tienes que explotar o llorar, hazlo. Estaré aquí.
Besé su mejilla y uno de los chicos de Mic Lowry entró. - Hola - sonrió. - Hemos quedado con unas chicas para tomar algo, por si queriais venir.
- Noche con mi chica - sonrió Justin.
- Esta bien, si cambiais de opinión, ya sabes, Llámame.
- Lo haré.
La puerta se cerró. - ¿Y así es como conoces a las chicas?
- Sí, más o menos. Mira. - Justin sacó un colgante de debajo de su camiseta y vi que llevaba colgado mi anillo. Lo sujete. - Estaba buscando una cadena que me gustase para ponermelo.
- Pensé que lo habías olvidado en cualquier parte.
Justin me miró ofendido. - ¿Quién te crees que soy? - negó con la cabeza. - Tu falta de confianza en mí me ofende. - Sonreí un poco.
- Lo siento - Justin puso su mano en mi pierna y la apretó.
Llamaron a la puerta y Mike no tardó en aparecer. - Podemos irnos, chicos.
Perfecto. Estaba deseando llegar a casa y cenar. Agarré la mano de Justin mientras íbamos al coche.
Durante el camino, me dediqué a mirar por la ventana mientras yo no se quien sonaba en mis oídos. Justin y yo habiamos decidido cambiar nuestra música. - Esto es puro pop comercial. - se quejó Justin pasando canciones.
Lo miré alzando la ceja. - Sí, es que tengo muchas canciones tuyas. - le quité mi móvil y Justin me dio un golpe en la cabeza. - Ay. ¡No me des! - le di en su pierna. - Escucha esta. - me quité el cinturón y me puse en el asiento de en medio. Me puse el cinturón y me puse un auricular.
- No me gusta.
- Callate y escucha. - me apoyé en su hombro.
Justin cogió mi mano y entrelazamos nuestros dedos. - We all know the story never ends. - canté en voz baja y Justin besó mi frente.
La canción terminó. - ¿Quién canta? - preguntó.
- Lauv.
- No se quien es.
- Tiene canciones muy buenas. - Starboy de The Weeknd empezó a sonar en la radio. - ¡Oh dios mio! ¡Dale voz a eso! - me quité el auricular y Hugo no tardó en darle volumen.
- Espero que esto no salga del coche porque va a ser la primera y la última vez que me van a escuchar cantar. - alcé mi voz por encima de la música. Escuché la risa de mis acompañantes y Justin empezó a cantar conmigo.
- You talking money, need a hearing aid. You talking 'bout me, I don't see a shade. Switch out my side, I'll take any line. I switch out my car If I kill any pain. Ha ha ha ha ha ha - bailamos - Look what you've done. Ha ha ha ha ha ha - I'm a motherfucking Starboy.
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Después de cenar, me puse en el sofá y Justin no tardó en poner una película. El logo de Disney apareció y abrí mi boca. - ¿Es enserio?
Justin sonrió. - Completamente. - se sentó a mi lado, palmeando mi pierna. - Mi chica quería ver la Bella Durmiente y la va a ver.
Sonreí y pellizqué su mejilla. - Si es que eres muy tierno cuando quieres.
- Yo soy tierno siempre.
- Por supuesto.
Tuve que decir, que ver el momento en el que Aurora y Felipe bailaban en el bosque, siempre me emocionaba y me hacia querer dar vueltas por todo el salón. - Felipe siempre ha sido uno de mis principes favoritos. - le confesé.
- ¿Sí? Pensé que era el de Blancanieves.
Negué con la cabeza. - Él de Blancanieves ni siquiera aparece cinco minutos en la película. Ósea, le canta al principio, y luego, cuando los enanitos consiguen matar a la bruja, llega él, le da un beso, y ya lo tiene todo hecho. Felipe lucha por ella - señalé la pantalla y Justin no tardó en soltar una carcajada.
- ¿Estás enamorada del personaje de una película de Disney?
- Si algún dia vamos juntos a Disney World, por favor, que esté Felipe.
Justin sonrió divertido. - Lo veremos. ¿Y Aurora es tu princesa favorita?
- Sí, aunque... me gusta mucho Mulan.
- ¿Mulan? ¿Por qué?
- Porque es valiente e hizo algo que nadie se atrevería a hacer. Princesas reales y valientes, como Rapunzel o la de Brave.
- No he visto esas películas. Ni siquiera Mulan. Y esta es la primera vez que la estoy viendo.
Abrí los ojos de par en par - ¡Que me dices! Tenemos que hacer un maratón Disney.
- Ni loco.
- Oh vamos - ronroneé y me acerqué a su rostro. - Se bueno conmigo. - pasé mi nariz y mis labios por su mejilla. - Y haré lo que quieras - mordí su oreja.
- ¿Harás lo que quiera por un maratón de Disney?
- Ajam.
Pasé mi lengua por su oreja. - Tentadora propuesta.
- Sí - me separé de él y me puse bien para seguir viendo la película. - Creo que utilizaré esa táctica más a menudo.
- Te has aprovechado de mí.
- Shhhh - moví mi mano - Ahora viene la mejor parte, va a pincharse el dedo con la rueca. No sé por qué las hadas madrinas la dejan sola. - comenté.
La sala estaba a oscuras y solo alumbraba la televisión, Justin se habia quedado dormido hacia un rato y no pude evitar sonreír al verlo aún con las gafas puestas.
La película terminó y miré a Justin. Decidí ir a buscar mi móvil y hacerle una foto. Vi que tenía un sms. ¿Quién envia sms hoy en día?
No pude sacarle la foto porque el sms me dejó completamente descolocada.
Una foto mía en la playa. Debajo un mensaje de lo más extraño.
Ojalá yo pudiera hacerte sonreír, él no te merece.
Fruncí el ceño. Número privado.
Le saqué una captura y se la pasé a Diego y a Victor.
Si es una broma, no tiene gracia.
Sí, tenia un grupo de WhatsApp con esos dos.
Victor: Yo no he sido.
Diego: Yo tampoco.
Victor: No ha salido ninguna foto tuya o de Justin en Lisboa, es la primera vez que veo esa foto.
Diego: Y yo.
¿Seguro?
Diego: Completamente.
Victor: Sí.
Salí de WhatsApp y volví a mirar el mensaje. Decidí llamar a Justin, empujando levemente su hombro. - ¿Ya ha terminado la película?
- Sí.
Justin bostezó y se estiró. Se quitó las gafas, dejandolas en la mesa y froto su rostro. - ¿Vamos a la cama? - Asenti. Apagué la televisión y la luz y lo seguí a la habitación. Seguramente, las protagonistas de mis libros o de las series que veía, se callarian y no le dirian nada a nadie. Yo estaba tan intranquila que no podía no compartirlo con Justin.
- ¿Justin?-
- ¿Mmmm? - dijo abriendo la cama.
- He recibido un mensaje extraño de un número oculto.
Mi novio, a pesar de que la mayoría de sus neuronas estaban dormidas, cogió mi telefono y vio el mensaje. - ¿Que pone? - me preguntó.
- Ojalá yo pudiera hacerte sonreír, él no te merece.
- ¿No es alguno de tus amigos?
Negué con la cabeza - Me han dicho que no. No ha salido ninguna foto nuestra aquí.
- Será alguna broma de alguien. - volvió a bostezar. - Si vuelve a enviarte algún mensaje, dímelo y lo arreglaremos.
Junté mis labios en una fina línea. No quedandome tranquila.
- ¿Vienes? - Miré a Justin, que ya estaba dentro de la cama.
Puse el móvil a cargar y apagué la luz. Las suaves y calientes sábanas me recibieron y cerré los ojos.
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¿Será una broma? Y si es así, ¿Quien será? ¿Deberían preocuparse? O ¿Serán los chicos gastandole una broma a Abigail?
Estoy en las últimas semanas antes de las vacaciones y como la mayoría, estoy llena de exámenes y trabajos, por eso no he podido subir antes.
Decirles que pronto publicaré mi segundo libro «Recuerda Diciembre». Pueden seguirme en mi pagina de facebook. Sería fantastico vuestro apoyo :3
Spotify (sigo añadiendo canciones y aceptando sugerencias que querais que añada)
E Instagram :)