Aún no nos conocemos

Capítulo 70

James 14/02/1981
Ya tengo todo listo y ya dormí a mis criaturas, así que no deberían darle tantos problemas al tío Lunático. Nada puede salir mal.

- Mi amor —dije entrando a la pieza y no la vi por ningún lado, pero la ventana está abierta—. Siempre hace lo mismo —me dije a mi mismo mientras tomaba bien la caja entre mis manos y salí por la ventana para encontrármela acostada en el techo leyendo su libro favorito.

- Hola —dijo con una sonrisa cuando me vio y sonreí.

- Te tengo un regalo de aniversario —dije y ella puso cara de espantada.

- No, yo no te compre nada para nuestro aniversario, James —dijo con un puchero y negué mientras me sentaba a su lado.

- Mejor dicho no lo compre yo, pero si es un regalo para ti —dije y se lo tendí.

- ¿Seguro? —preguntó tomándolo con desconfianza y yo me reí.

- Seguro, Chloe. Solo ábrelo. —dije y ella lo abrió con una sonrisa que desapareció al ver el vestido—. ¿Qué pasó? —pregunte temeroso porque era el vestido de mi madre.

- James, es... es hermoso y es... el que uso tu madre, es decir... ósea yo me acuerdo de haberlo visto en fotos, James. No creo que a mi no se me verá tan bien —dijo mordiéndose el labio inferior nerviosa y yo solté una risa.

- Se te verá esplendido, Chloe. Tú confía en mi.

- Pero era de tu mamá... —dijo encogiéndose de hombres y le acaricie la mejilla.

- Lo sé, ella me lo dio. Dijo que se te vería espectacular y no tengo dudas de eso —dije y ella se sonrojó—. Quiero que te lo pongas para las 21 —dije y me miro sorprendida—. Tengo una sorpresa más —dije y ella sonrió.

- ¿Vestirás un terno? —pregunto y yo asentí—. Te ves guapo con terno —dijo y ahora yo me sonroje, y también me reí nervioso.

- Me voy antes de que me pongas más rojo —dije y escuché su risa—. ¿Puedes no bajar hasta que sea la hora... por favor? —le supliqué y ella asintió, así que estoy apunto de entrar por la ventana.

- James —me llamo y volví a sacar la cabeza—. Te amo —dijo y puse cara de embobado.

- También te amo, mi lady.

Listo ya son las nueve, así que debería estar viendo a Chloe saliendo por la puerta trasera y... si, ahí está.

El amor de mi vida con ese vestido morado largo que deja sus hombros al descubiertos, pero que igual son tapados por su pelo pelirrojo que cae como cascada encima de ellos. Creo que me enamore.

- Te ves muy guapo —dijo cuando me acerqué y baje la mirada nervioso.

- Yo... tú... tú te ves hermosa —dije tartamudeando y escuché su risa mientras me tomaba del mentón para levantar mi vista y la vi sonrojada.

- James, el lugar está hermoso —dijo viendo las luces que colgué y la mesa que se encuentra en el medio del patio, decorada con unas gardenias.

- Me alegra que te guste —dije y la acerqué a mi para darle un beso que fue correspondido.

- Yo... también te tengo un regalo —dijo mostrándome una pequeña caja—. Hace tiempo que quise dártela, pero no encontré el momento —dijo sonrojada y tome la caja entre mis manos.

- Gracias —dije y abrí la caja con mucho cuidado para encontrarme con una pulsera plateada—. Gracias es muy bonita —dije dándole un beso en la nariz.

- No es solo una pulsera —dijo y la sacó de la caja para ponérmela en mi muñeca—. Es mágica y con el tiempo se irán escribiendo nombres o fecha importantes para ti, solo tienes que pensarlo y se escribirán  —dijo y me fijé en la pulsera que ahora está escribiendo los nombres de Chloe, Maya y Harry Potter en ella.—. También si necesitas encontrar a una persona, se formará una flecha en el nombre si es que ya está escrito —dijo y cerré los ojos para pensar en Chloe y los abrí al sentir un mini descarga que viene de la muñeca que muestra una flecha que palpita mostrando a Chloe.