Aún no nos conocemos

Capítulo 47

Chloe
Bueno... volvimos a Hogwarts más rápido de lo que yo creí. Ese fue el primer pensamiento que cruzo por mi mente cuando entre a la oficina del director a través su chimenea.

- Lo siento, llegue tarde —dije al darme cuenta que la reunión ya había empezado e interrumpí. Camille y Louis me están viendo con sonrisas burlonas.

- No se preocupe, señorita Evans. Acabamos de empezar —dijo mi ex-director con una de sus típicas sonrisas y yo le agradecí con la mirada una vez que llegue al lado de mis amigos.

>> Como decía... el Mundo Mágico está entrando en una guerra —dijo y se me congeló la sangre ¿justo hoy debía ir directo al grano?—. Como ya sabrán, Voldemort —al escuchar ese nombre todos nos paralizamos— a ido tomando terreno junto a sus seguidores, los cuales se hacen llamar mortífagos —me estoy golpeando mentalmente a causa de que esos simples nombres me hacen estremecer de miedo, pero que débil, son solo nombres—. ¿Si, señorita Mckinnon? —preguntó y un dolor en el pecho se me instaló al acordarme de que leí ese apellido en el periódico.

- Disculpe la interrupción, profesor —pero si ella es la amiga de Lily, Marlene, no sabía su apellido o le hubiese dado las condolencias—, ¿pero puede ir al grano? ¿Por qué estamos acá? —preguntó con el ceño fruncido.

- Bueno, ahora que son mayores de edad, he decido invitarlos a formar parte de la "Orden del fénix" —dijo y eso llamo mi atención—, es una asociación secreta que yo mismo he fundado para luchar contra Voldemort, algunos de sus padres ya forman parte de esta —dijo dándole una mirada significativa a Marlene y ella la bajó aturdida, creo que es mestiza, pero no me acuerdo.

- ¿Cómo funciona? —escuche la voz de Severus y mi corazón dio un salto al notar que todos mis amigos están presente, tengo miedo.

- Pues a veces habrán misiones donde serán enviados en grupos, como ir a reclutar a más integrantes o ir a los enfrentamientos —dijo como si fuera tan simple.

- ¿Y qué pasa si salimos heridos? —preguntó Regulus y tengo un nudo en mi garganta. Él ni siquiera es mayor de edad.

- Serán enviados a San Mungo donde me aseguraré de que sean tratados por Sanadores que pertenezcan a la Orden —respondió y yo baje la mirada. Si estoy trabajando ¿podrían traerme el cuerpo de algún conocido o amigo? Con solo pensarlo me dieron ganas de vomitar.

- Yo quiero unirme —al escuchar la voz de Marlene, mi mirada se dirigió a ella. Se ve tan segura, a pesar de que sabe que quizás sus padres murieron por asuntos de la Orden ¿acaso no tiene miedo? Pero qué pienso, obvio que tiene miedo y la forma en la que su cuerpo tiembla lo demuestra.

- Nosotros también —dirigí mi vista a donde se encuentran Gideon y Fabián, se ven más grandes, pero siguen teniendo esas sonrisas confiadas y traviesas. Mi mirada se cruzó con la de Fabián y me guiñó el ojo. Ridículo, pensé mientras se me formaba una pequeña sonrisa. 

- También nosotras —con miedo dirigí mi vista hacia Lily y otra amiga suya, creo que se llama Dorcas.

- Y yo —dijeron Severus y Regulus a la vez, para luego mirarse como dos hermanos lo hacen, con preocupación por el otro en su mirada.

- Nosotros también —dijeron Remus y Sirius tomados de la mano, y yo quiero llorar ¿por qué no puedo ser igual de valiente?

Después cada invitado fue levantando su mano. Entre ellos, dos Ravenclaw que reconozco como Pandora y Xenophilius. Frank y Alice también levantaron la mano. Louis con Camille.

- Chloe —escuche un susurro a mi derecha y mi mirada se encontró con la de James—. Todos tenemos miedo —dijo con una pequeña sonrisa—, y eso no te hace débil, pero recuerda que al igual que nosotros, ellos no se irán sin pelear antes —dijo entrelazando nuestros dedos y yo sonreí con tristeza—. Lo haremos juntos si quieres ¿ya? —dijo y yo asentí mientras levantaba nuestras manos unidas.