Aún no nos conocemos

Capítulo 61

Chloe 22/12/1979

He estado con náuseas toda una maldita semana ¿saben que es eso? Mi garganta me arde y mi guata me duele, no es nada cómodo y lo peor es que James se está preocupando mucho. Es tierno, lo sé, pero no quiero que por mi culpa se desconcentre en el trabajo y le pase algo malo.

- Tienes que ir a San Mungo, puede ser algo grave —ahora me está repitiendo eso por quinta vez en menos de una hora.

- James, cariño, relájate un poco —le dije mientras me acercaba para abrazarlo—. Alice va a venir en la tarde porque tiene el día libre y le pido que me acompañe donde Poppy ¿ya? —él asintió con un puchero que desapareció con un pequeño beso que le deje en sus labios.

- Está bien, solo me preocupo por ti. No me gusta verte enferma. Además de que estás pálida y más flaca, sabes que siempre te ves hermosa, pero estás decaída, tus ojitos ya no brillan tanto.

- Voy a estar bien, James. Ya verás que al llegar a casa vas a ver que todo está bien y que solo me hizo mal comerme un paquete de barritas entero —dije y él negó resignado—. Te amo.

- Yo también —dijo poniéndose su chaleco de uniforme y dándome un beso de despedida—. Voy a tratar de llegar temprano ¿si? —dijo y asentí con una sonrisa antes de que desapareciera por la chimenea.

- ¡Llegó tu niñera! —gritó Alice cuando apareció por la chimenea segundos después de que James se fue.

- ¿Niñera? —pregunte divertida y ella se rió.

- Bueno, doctora porque tú estás en tu luna, en tu mundo y no estás dándole importancia a tus síntomas, querida —dijo y de una bolsa saco una caja que me la lanzó y yo atrapé.

- ¿Prueba de embarazo? —pregunte confundida hasta que mi boca se abrió al darme cuenta de algo.

- Aja, querida. Nauseas, vomito y mareos —dijo y yo me lleve mi mano libre a la cabeza—. ¿Cómo no se te ocurrió?

- Es que con James lo estamos intentando y quiero un hijo, en serio lo quiero, pero no quiero ilusionarme. Sé que esto puede tomar tiempo, pero oh por Merlin —dije con una sonrisa hasta que me dio pánico y tire la prueba a un sillón—. ¡Oh por Merlin!

- Chloe, relájate —dijo al verme caminar en círculos.

- No puedo hacerlo, Alice —dije con ganas de llorar—. Además, necesito a mi mamá y quizás ella no vaya a durar por 9 meses más —dije lloriqueando y ella me dio una cachetada.

- ¡Respira, mujer! —dijo y yo asentí con miedo—. No vas a estar sola. Estoy yo, Camille, Lily y la señora Potter, todas mujeres increíbles y la mamá de James, ella no te va a dejar ¿entiendes? Y también puede que tu mamá mejore, así que respira —dijo y yo asentí respirando.

- Hazla conmigo —dije más tranquila y ella me miro confundida.

- ¿Qué? —dijo sin entender nada.

- Haz la prueba conmigo —dije y ella empezó a negar, pero con un semblante triste—. ¿Qué pasó, Alice?

- Es que con Frank ya llevamos un año intentándolo, incluso antes de casarnos y no, siempre sale negativa, así que he dejado de hacer pruebas —dijo con los ojos tristes—, pero puedo hacer uno contigo, si te sientes más segura, yo lo hago —dijo y le di una sonrisa agradecida.

- Gracias —dije y ella asintió con una sonrisa.

- ¿Hagámoslo ahora? —preguntó y me entró el pánico.

- Necesito una copa primero —dije y ella me tomo de los hombros para dirigirme al baño.

- Tendrás una copa cuando salga negativo —dijo divertida y me sonroje al acordarme que eso daña al feto.