Leyendas de héroes

Los Juegos de Genus [7] Segunda Fase

Mis manos se volvieron de pronto muy ligeras, sentía como la energía fluía a través de ellas. Sentí la respiración de mis amigos, sus corazones palpitar y hasta la sangre que pasaba por sus espaldas. Fue entonces cuando noté que estábamos haciendo retroceder al Pharon.

Diaxe y Trozard relajaron los músculos de sus espaldas; tensionados luego de la inadvertida quemadura, que resultaba un precio muy pequeño para el placer que producía contrarrestar el poder de un Pharon.

Nuestros Rekan se encontraban revoloteando alrededor de nuestro oponente, golpeándolo, o protegiendo a Diaxe y a Trozard  de los ataques que realizaba con sus plumas.

Dábamos un paso firme cada 30 segundos, estábamos arrinconando al Pharon contra la pared, pero ya casi no me quedaba energía para pasarles a mis compañeros.Me empecé a poner nervioso, tenía que pensar en una solución rápida que no le diera la ventaja al Pharon.

― Me estoy quedando sin energía, necesito recolectar más― grité alarmado.

Ambos héroes me escucharon pero no se desconcentraron ni un segundo, nos encontrábamos en una mala situación y cada uno de ellos se encontraba ocupado inmovilizando un brazo del Pharon.

Nuestro oponente estaba a punto de golpear la pared con su espalda, podíamos obtener una posición favorable, pero sin más energía no veía cómo podría alguno de ellos asestar el golpe final.

―¡Yo me encargo!― gritó Dinamo con todas sus fuerzas.

Luego la armónica ventaja que habíamos estado llevando se tambaleo. Dinamo golpeó con bastante impulso y fuerza la cara de un Pharon que ni siquiera se había molestado en prestarles atención a los simples Rekan.

Su cuerpo perdió la fuerza por un segundo, que bastó para cambiar la dirección en la que lo llevábamos. Sin saber como, el ataque de Dinamo me re-abasteció de energía pero fue tanta que no pude controlar la forma en que se las pasaba a Diaxe y Trozard.Por lo que los sobrecargue de energía, salieron impulsados, empujando al Pharon, hacia una rampa de descenso que llevaba al primer piso del laberinto.

Caí de cara contra el piso, me levante lo mas rápido que pude. Mis manos se encontraban peladas, ya no tenía piel y me escurría una fina capa de sangre que se mezclaba con la suciedad del lugar. Gire mi cabeza hacia la rampa y pude ver como el Pharon golpeaba a Trozard en el vientre, desmoronando la armadura que llevaba puesta.

Sin embargo, la situación no había empeorado del todo, de Trozard salían pequeños rayos eléctricos de color amarillo. El contra ataque no tardó, Trozard golpeó con su puño derecho el costado del Pharon, Diaxe enseguida con un pequeño cuchillo que había guardado en sus botas apuñaló a su perplejo oponente en el cuello, casi un golpe fatal.

El Pharon se enardeció y arremetió con toda su furia contra los dos hiperactivos héroes. Comenzando así  una feroz batalla en la que no cedía ninguna parte. Diaxe y Trozard, ayudados por sus Rekan, atacaban coordinadamente al irritado Pharon que atacaba con sus plumas metálicas como si de dagas se tratára.

Me cautivó la increíble lucha, que empezaba a desplazarse al primer piso y cuando pensé que empezábamos a ganar. Sentí una presencia con sed de sangre a varios metros detrás mío. Mi piel se erizó y un escalofrió recorrió mi cuerpo, Shield todavía no se había recuperado y Dinamo se encontraba tambaleando en el aire luego de su imprudente ataque.

¿Devia de atacar con energía? o ¿deberia de intentar escapar? la energía podría llegar a  volver más fuerte a quien quiera que estuviera detrás mío y por otro lado, escapar solo alargaría unos cuantos segundo mi eliminación.

¿Que debería hacer?

Mis amigos se encontraban luchando con el Pharon, no me podrían ayudar por mas que quisieran. Una gota de sudor descendió de mi frente el ser con sed de sangre se encontraba ya a un paso de mi. No era el Bio-Berserker, esa criatura me habría embestido a la primera oportunidad o me habría eliminado rápidamente de un zarpazo.

Fue entonces que sentí una mano fría y pequeña acariciar mi mejilla derecha; quede inmóvil del miedo, no tenía idea de como reaccionar y para el colmo el ser ahora me abrazaba por detrás. ¡Era el cuerpo de una mujer! La sentí como apretaba su cuerpo contra el mío, sentí su respiración en mi nuca; luego, me beso en el cuello.

Me sonroje y asuste al mismo tiempo, lo que estaba sucediendo no tenía sentido. Entonces, una sombra oscura, de la que salían los brazos que me habían abrazado se materializó frente a mi. No lo podía creer, el impacto me sacudió y me hizo volver en mí. Retrocedí unos cuantos pasos y pude comprobar la identidad de quien se encontraba frente a mi.

Era la joven que me había intentado comer hace unas noches atrás. Reconocí su oscuro pelo con ondulaciones cautivantes, y me volví a sorprender por su increíble belleza, su piel pálida, sus carnosos labios rojos y sus ojos dorados me fascinaban.

Se paró frente a mi y noté que era más alta que yo por unos cuantos centímetros. Cerré mis puños con fuerza y empecé a intentar revertir la forma en que funcionaba mi ataque, tenía que lograr extraer su energía para evitar que me atacara; sin embargo, por alguna razón, sentía que hacia algo que no debía.

― Mi delicioso héroe, sabía que te encontraría por aquí.

Mi cuerpo se estremeció con sus palabras.  

―Me hiciste algo que no debería de haber hecho todavía, y te has ganado varios enemigos...

Se detuvo un momento, acarició mi mejilla con su mano derecha y luego con su dedo índice delineo mis labios. Nunca había sentido tantas sensaciones opuestas al mismo tiempo, me sentía asustado y excitado al mismo tiempo, incómodo y tranquilo, intimidado y protegido… por un momento dejé de sentir su sed de sangre.

―Pero eso no importa, me gustan los machos intrépidos y con coraje. Ya hablé con mi padre sobre lo que sucedió y está dispuesto a dejar que seas uno de mis pretendientes si al menos llegas a la cuarta fase.

Casi me caigo al escuchar sus palabras ¿de que estaba hablando?

―Espero que lo logres, en verdad me interesas― Sonrió la Vhighoul, me beso el la mejilla, se transformó en una sombra y desapareció con velocidad entre las estructuras del segundo piso.

Apenas desapareció de mi vista se esfumó el gran peso que me oprimía. No podía parar a pensar en lo que acababa de suceder, tenía que ver como se encontraban Diaxe y Trozard.

Seguían peleando, la energía se les empezaba a agotar y aún así dominaban el combate. Empecé a cargar mis manos para ayudarlos, pero me acorde de que había revertido mi poder por lo que me concentre en volverlo a la normalidad. No iba a quitarles la energía que les quedaba, ya había metido la pata suficientes veces.

Cuando logré volver a la normalidad mi ataque, vi como la energía de ambos héroes volvía a lo habitual. El Pharon vio su oportunidad, descendió rápidamente hasta el primer piso, materializó el arma con la que se debió de haber equipado al comienzo, un sable khopesh, y cuando se dispuso a atacar con toda su fuerza, se convirtió en piedra.

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Hola, muchas gracias por llegar conmigo hasta este punto. Sin su apoyo créanme que no lo habría logrado. (Busquen por Google sable Khopesh, es un arma que me gsta mucho)

Les quiero informar que es muy posible que realice un viaje la próxima semana a Asia para hacer un voluntariado en Myanmar, por lo que les pido paciencia para las próximas dos semanas mientras se resuelve todo. Para estas semanas es posible que publique los capítulos antes o después del viernes, la verdad no estoy seguro.

El voluntariado durará aproximadamente 6 meses por lo que por ese tiempo publicare los capítulos con el horario del país donde estaré.

SEGUIRÉ PUBLICANDO TODAS LAS SEMANAS

Así que no se preocupen. =)