Leyendas de héroes

Sora

Frenaron el relato. Se estaban preocupando, desde el momento que empezaron a hablar sobre lo que aconteció en el bosque mi cuerpo no paraba de temblar y mis dientes tiritaban de manera brusca.

– Eso no lo recordaba– me decía intentando calmarme – Eso no era lo que recordaba –  repetía una y otra ves, mientras tapaba con ambas manos mis oídos. Estaba asustado, lo que había acontecido esa noche había sido anormal y fue entonces que recordé a la mujer.

Quede paralizado.

Sora se levanto, siempre tuvo una gran empatía por lo que manejaba muy bien situaciones como esta; por el contrario, Yaboth estaba a punto de llorar, era la primera ves que veía a alguien sufrir emocionalmente. Y como era de esperar de él, ya me quería y me tenía un gran aprecio, aunque en ese momento yo no lo sabía, la verdad no se si él ya lo sabia.

El abrazo de Sora fue cálido, amable y lleno de amor. Eso basto para que regresara a la realidad. Mire a Sora, tenia los ojos cerrados y me abrazaba fuerte mientras sonreía. Yaboth me miraba preocupado, no sabia que hacer y por gran parte de su vida jamás supo que hacer en situaciones como esta.

– Solo es el pasado, solo el pasado, un pasado sellado que no te puede hacer daño. Tienes que soportarlo…  si no lo haces no serás capas de dejar esos complejos que tienes de inferioridad. Eres un héroe y tienes que estar orgulloso de eso, no martirizarte – Me susurro Sora al oído.

Me calme, aspire y exhale profundamente por lo que me concientice de la situación. Estaba apoyando mi cabeza en los pechos de Sora, me sorprendí, me sonroje y de inmediato me zafé de sus brazos lanzándome al suelo. Reacción que la sorprendió. Yaboth, por otro lado, por alguna razón noto lo que estaba sucediendo y empezó a burlarse. Sora empezó a reírse también y  por la misma vergüenza no pude evitar sonreír.

Después de unos segundos Yaboth se puso serio – Laxus tenemos que continuar con… – alcanzo a decir antes de que Sora lo interrumpiera –si quieres puedes nombrar a tu otro Rekam antes de continuar, así te puedes relajar un poco – explico mientras se sentaba.

Asentí, nombrar a esas bolitas azules era divertido y esta vez no lo pensé mucho, los recuerdos encontrados me ayudaron. Tenia que ser algo alusivo a mis hermanos, y como sabia que se encontraban conmigo, que eran mi energía para seguir adelante, el nombre llego por si solo – Dinamo, se llamara Dinamo –

Y mientras sonreía con mis amigos me llego un pensamiento que me intrigo ¿Cómo supo Sora que me sentía inferior a los demás héroes?