Los Juegos de Genus [4] Primera Fase

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Mi cuerpo se movió por instinto hacia atrás y mis brazos se corrieron hacia la derecha en un intento de desviar el ataque, un sin sentido, el ataque ya había sido lanzado. El tiempo se detuvo de nuevo, mire la espalda de Trozard y vi como unos pequeños y esporádicos rayos amarillos empezaban a dirigirse en su dirección; entonces, de mi garganta salió un grito.  

  ― ¡Trozard ! ―  

 En un instante, cuando la honda de rayos estaba a punto de tocar su espalda pude ver como su cuerpo empezaba a arquearse de manera natural para esquivar el ataque. Vi como se movía, de manera magnificente hacia el costado derecho del pasillo rocoso que él estaba protegiendo, grave error. 

Al moverse, dejo un espacio desprotegido. Pude ver entonces, que varios proyectiles mágicos, lanzados por los G-Trolls, se dirigían hacia mi. Un escalofrió recorrió mi cuerpo, Shield con las pocas fuerzas que le quedaban se interpuso en la trayectoria de una de las cinco esferas de fuego color morado que volaban con intención de matar.  

A mi vista el tiempo volvió a la normalidad, escuche varios golpes y la cueva que Trozard estaba defendiendo de pronto se vio envuelta en humo. Solo alcancé a estornudar una vez antes de que  este desapareciera, y de lo que vi aprendí mi primera lección de batalla. Lo mas simple y común que se debe hacer en la vida diaria "Pensar antes de actuar".  

Trozard había dislocado su hombro para protegerme de los proyectiles con su Forthanima. Había aprovechado que su gran mazo podía expulsar vapor ardiente para moverse a la velocidad del sonido, otro peso para mi conciencia, Trozard no había tenido tiempo para acomodarse, había activado su Forthanima de inmediato quemando su pierna izquierda.  

― ¡Laxus atento! no hay tiempo que perder ― Grito Diaxe, que había visto lo sucedido de reojo.  

― Los Quinoid debieron de atacar otro de los pasillos de la cueva. Sora, Corvinus, ataquen a los G-Trolls con todo lo que tengan, tenemos que movernos rápido.  

De inmediato Sora se lanzó al pasillo donde se encontraba Trozard malherido e ignorándolo de un momento para otro se encontraba donde los G-Trolls, atacó sin clemencia con su Windblade. Corvinus atacó desde donde se encontraba disparando rápidamente y cargando cartuchos con aterradora sincronía. Dalana coloó su rifle en su espalda y camino hasta donde me encontraba, me empujo en la espalda y me hizo caminar; luego, agarro el brazo de Trozard y lo ayudo a caminar hacia donde se encontraba Sora peleando. Corvinus nos siguió, sin dejar de disparar y cubrir todos los huecos en la defensa de Sora, a causa de su feroz ataque.   

Diaxe se quedó de ultimo y entró al pasillo protegiendó nuestra retaguardia. A la mitad del recorrido pude observar unas escaleras  y una rampa que subían al segundo piso en direcciones opuestas.   

― ¡Alto!  

Todos paramos en seco. 

― Trozard ¿puedes pelear?  

―Si, solo son unos raspones ― rió Trozard con su gran sonrisa. 

― Apoya a Sora de inmediato, no podemos subir hasta que nos deshagamos de los G-Trolls.  

― ¿Qué crees que estaba intentando hacer? No me equipe con Horaja solo porque me sienta el naranja.  

Cogió a Dalana de la cintura, se inclino con ella y la beso en la mejilla.  

―Gracias, pero soy un hombre de una sola mujer.  

Y de pronto escuche un fuerte estallido, Trozard se encontraba en medio del combate de Sora, agachado y con su puño enterrado en la tierra, acababa de eliminar a uno de los G-Trolls. Se levantó lentamente, miró a Sora con una gran sonrisa, me miró, me guiño el ojo, estiró sus manos y aparecieron esferas de fuego en las palmas de su manos.  

El siguiente combate fue rápido e increíblemente sincronizado entre Sora, Trozard y los disparos de Corvinus. Parecía un gran baile en el que lograron eliminar a otros dos G-Trolls, los demás escaparon dejando un muro de fuego entre ellos y sus atacantes. La intensidad de la batalla de pronto termino y me sentí afanado, sentí el mismo sentimiento que acosa a un ratón antes de ser cazado por un gato o a eso lo asemeje.

― ¡Al segundo piso, rápido! la segunda fase comenzará en cualquier momento. Sora, conmigo al frente, Trozard cuídanos la espalda ― Grito Diaxe.

Nos movimos de inmediato, subimos durante tres minutos corriendo y nos detuvimos antes de llegar. Diaxe bajó la mano con la que nos había indicado que nos detuviéramos, se agacho dejando su vientre en el suelo, unió dos de sus dedos de la mano derecha y de la armadura de su dedo índice derecho salió un pequeño tuvo con un espejo en su extremo. Lo saco al segundo piso y observo durante unos segundos todo el lugar. 

― Es seguro, subamos. Sora tu cabeza vale 3 puntos, Trozard, Corvinus y Dalana las de ustedes valen dos. Tengan cuidado. 

Subimos rápidamente, Trozard se recostó contra una de las paredes y Dalana empezó a curarlo. Entonces me relaje; aunque, el sentimiento que me había llegado en el primer piso no desaparecía, me sentía atrapado.  

Sin embargo ese pequeño suspiro me permitió admirar el segundo piso del laberinto.Teniá el aspecto de una fabrica abandonada en la cual la naturaleza empezaba a reclamar su territorio. Había tecnología corroída, metal oxidado y plantas, muchas plantas. 

Fue cuando me senté que sonaron tres grandes compuertas abrirse. 

― Ya liberaron a las criaturas, comenzó la segunda fase. Hablen en voz baja, no sabemos que clase de criaturas sean ― susurro Diaxe con la mano en alto y con el puño cerrado.

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Hola muchas gracias por todo el apoyo que he recibido últimamente la verdad lo aprecio mucho.

Como dije en un mensaje que envié. Gracias por leer, votar, comentar y  seguirme. Suelo enviar mensajes de agradecimiento a cada uno de mis seguidores y a quienes me votan mucho pero debido a que han aumentado bastante rápido, cada vez me queda mas difícil poder mandarles mensajes a todos pero créanme que noto quienes me siguen y siempre reviso quienes votan y comentan. =)

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