El renacimiento de Chen An

Capítulo 78: Bromas en la piscina (Parte II)

Chen no creía que Ivanov lo ahogaría en la piscina, al menos no ahora.

Este hombre repugnante sólo quería ver su apariencia indefensa y cómo buscaba ayuda en su desesperación. Era asqueroso y malo. Una vez que realmente buscó ayuda, pudo ser rescatado del agua inmediatamente. ¿Pero no sería eso satisfacer su fantasía?

No importaba cuán profunda fuera la piscina, mientras el agua cubriera la parte superior de su cabeza, Chen An no veía ninguna diferencia entre la piscina y el mar. El cuerpo que caía en la piscina se hundía en el fondo de la misma. Es más, Ivanov maliciosamente agarró el cuello de Chen An con su mano y lo presionó intencionalmente en el agua.

A través del agua de la piscina, podía ver la malvada sonrisa de Ivanov. El oso parecía estar diciendo algo. La voz pasó tenuemente por el agua de la piscina a los oídos de Chen An, vagamente como "ruégame".

El oxígeno de la boca y la nariz formando pequeñas burbujas que corrían a la superficie del agua, la asfixia era incómoda, y Chen An apretó ligeramente el puño. El tiempo era como el agua estancada, lento y largo, y la visión borrosa original se había vuelto más y más borrosa. Ivanov, así como el mundo entero, se volvió confuso.

En un momento dado, Chen An parecía haber vuelto hace más de un año. Se paró en el balcón, sonrió y saludó a Lu Feng que se dirigía hacia él. Vio claramente la cara excitante y radiante de Lu Feng cuando lo vio saludando. Era la primera vez que Lu Feng mostraba una brillante y radiante sonrisa frente a él.

Entonces sacó su pistola y la apuntó a su sien. Cuando la sangre roja y brillante le nubló la visión, pudo ver cada expresión del rostro de Lu Feng muy claramente antes de que cayera en la oscuridad sin límites.

Justo cuando se paró frente a Lu Feng, cada expresión de Lu Feng fue claramente vista por él, desde la esperanza a la desesperación, desde la emoción a la sorpresa, desde la alegría a la tristeza.

Algo se rompió. El mundo de Lu Feng se derrumbó. Parecía escuchar el sonido de su cráneo rompiéndose.

Lo que era más terrible era por qué antes de cerrar los ojos, no sólo pensó en Chang Le, sino también en Lu Feng, un huérfano que fue recogido de la calle por él y se arrodilló frente a su cama y le susurró a su lado repetidamente: ¿podrías amarme? Incluso por un día, un segundo...

De repente, el cuerpo fue abrazado y arrastrado fuera del agua. Los pensamientos de Chen An volvieron repentinamente al mundo real desde el momento anterior a la muerte de su última vida. El hombre que recibió el aliento instantáneamente se asfixió y tosió después de que alguien le golpeara la espalda con fuerza.

Todavía estaba en la niebla. Chen An, acostado en el hombro de Ivanov, jadeaba. Escuchó a Ivanov decir en su oído, "Nunca he visto un hombre como tú. ¿No tienes miedo de ahogarte? ¿Es tan difícil llegar a mí?"

"Bastardo..." El que acaba de salir del agua no pudo oír claramente la voz de Ivanov. Sintió que había una capa de agua en sus oídos. Chen An cerró los ojos dolorosamente. Su visión seguía siendo borrosa. Necesitaba una toalla seca.

"Debería haberte ahogado hace un momento".

Ivanov de repente se sintió impotente. Presionó la nuca de Chen An y besó al hombre que no quería matar, lamiendo y saqueando mientras el hombre aún estaba sin poder.

Nunca supo cuánto tiempo no había sentido el impulso que podía encenderse con sólo un beso.

Ivanov sintió como si acabara de despertar el amor hace muchos años. Estaba verde y nervioso. Alejó la mano de Chen An y puso su mano en su ropa. Sintió que el hombre en sus brazos comenzó a luchar. Ivanov, en virtud de su fuerza física y la debilidad de Chen An en el agua, besó fuertemente al hombre mientras le tiraba de los pantalones.

Chen An, que no se había recuperado, mordió con fuerza, y la lengua de Ivanov sangró repentinamente. El Oso regañó y tuvo que abandonar los labios del hombre: "¡Maldición!"