El renacimiento de Chen An

Capítulo 85: Capital con interés

La sangre de color rojo brillante estalló, e Ivanov gimió debido al dolor repentino y tuvo que agacharse.

Miró a Chen An que tenía una cara tranquila. La expresión de la cara del hombre le dijo que no era la primera vez que Chen An disparaba.

Chen An estiró su dedo índice y lo agitó suavemente: "Mantén a tu guardaespaldas alejado de mí. La próxima bala no le dará a tu pierna, sino a tu corazón."

"¡Cariño, realmente me sorprendiste!" Cada palabra fue pronunciada con fuerza, con él rechinando los dientes, de lo que ahora se podía imaginar el estado de ánimo de Ivanov.

"Mira tu actual expresión, ira, falta de voluntad e incluso un poco de conmoción y dolor. Es una lástima que nuestro pequeño Ivan se enamorara de un hombre al principio de su aventura amorosa. Desafortunadamente, es como un estudiante con retraso mental en el jardín de infancia. Eres tan torpe que quiero pegarte fuerte."

Chen An miró a la policía internacional que venía de la cubierta y sonrió a Ivanov, que había derramado mucha sangre. "¿Me odias, Ivanov? Ten en cuenta el dolor de hoy, se quedará contigo toda tu vida hasta que te vayas al infierno."

"Me has traicionado..."

"Nunca ha habido lealtad. ¿De dónde viene la traición, Ivan? Eres realmente tonto."

Ding Sheng, vestido como un policía especial negro, fue el primero en correr hacia Chen An. Los ojos de Chen An se volvieron menos fríos y se puso nervioso e indefenso con una pistola en la mano.

"Todo está bien." Ding Sheng ordenó a la gente que agarraran a los guardaespaldas que estaban a su lado, y se adelantó y abrazó suavemente a Chen An.

Al ver esto, Ivanov se sentó en el suelo y se rió como si hubiera visto algo muy divertido.

Ivanov fue arrestado por Ding Sheng sólo por poseer armas en privado. La gente de Medio Oriente se las había arreglado para encogerse.

Ding Sheng seguía ocupado en todas partes. Chen An, como un "encubierto" especial, recibió un cuidado especial por parte de Ding Sheng. No fue llevado a la estación de policía, ni tampoco a grabar confesiones.

"Ivanov ha sido enviado a los Estados Unidos para su vigilancia y tratamiento. El bastardo contrató un abogado, pero no lo dejaré sentirse bien."

Después de que Ivanov fue capturado, el grupo regresó a Singapur, y Ding Sheng, que estaba a cargo del caso, tuvo que regresar a los Estados Unidos en estos dos días, pero de alguna manera seguía preocupado por Chen An.

"An, ¿realmente no quieres ir a América conmigo?" Ding Sheng preguntó de nuevo. Podría darle al hombre una buena protección si estuviera cerca de él.

Ivanov fue capturado temporalmente, pero quién sabía si Ivanov encontraría otra oportunidad de salir corriendo.

"Saliendo durante meses, todo lo que experimenté fue como un sueño irreal. Ahora sólo quiero ir a casa y dormir bien." Por supuesto, Chen An no seguiría a Ding Sheng de regreso a los Estados Unidos.

Ding Sheng frunció el ceño. "Pero es demasiado peligroso. Ivanov no te dejará ir fácilmente."

Podría decirse que Chen An contribuyó más de la mitad del éxito en atrapar a Ivanov esta vez.

"No te preocupes. ¿No me diste una nueva identidad? Dejaré Shanghai después de un período de descanso. Ivanov no me encontrará."

Con la insistencia inquebrantable de Chen An, Ding Sheng no tuvo más remedio que renunciar a la idea de dejar que Chen An volviera a los Estados Unidos con él por el momento. Sintió mucha pena por Chen An porque tuvo que renunciar a su identidad actual y a su vida diaria y tuvo que dejar Shangai.

De vuelta en su habitación, Chen An se apoyó en la cama y sacó una pequeña caja de cigarrillos de sus brazos. Había un pequeño chip escondido dentro.

El hombre tomó el chip y sonrió. Parecía que además de los mil millones de dólares que ya había recibido, podía vender el verdadero chip.

En cuanto a lo que los multimillonarios de Medio Oriente harían cuando descubrieran que los chips que recibieron eran falsos, ese sería el problema de Ivanov.