Capítulo 151: Una canasta aplastada

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Algo claramente no estaba bien, la forma en que jugaban... ¿Estaban jugando un juego de baloncesto, o peleando una guerra?

Wang Li estaba realmente ansioso de que Chen Yang y Lu Feng pudieran empezar a darse puñetazos. Chen An, por otro lado, se acostaba boca abajo en la silla con los ojos medio cerrados--- estaba disfrutando del masaje del otro como un felino grande y relajado.

"Un poco más abajo de allí, sí, ¡justo ahí! Así es, manténgalo ahí." Chen An hacía ruidos embarazosos cuando daba órdenes, sin saber lo inapropiadamente sexy que era en un salón de baloncesto.

Era cierto que mucha atención se dirigía a Lu Feng y Chen Yang, que estaban encerrados en una batalla en el campo. Aún así, los estudiantes no dejaron de notar al hombre que se recostaba en la silla.

Media hora fue realmente apresurada... Chen An murmuró para sí mismo.

Además, ese joven parecía haber lanzado la precaución al viento y ser cada vez más imprudente. Le había dicho que se tomara las cosas con calma, pero el joven se sumergió directamente. Y tuvo el valor de encontrar una excusa después: el tiempo era limitado.

Limitado tu trasero. Si el tiempo era limitado, ¿por qué no terminaste con ello, en vez de estirarlo sin parar?

"Tío Chen, ¿está realmente bien?" Wang Li preguntó en voz baja mientras hacía su papel de masajista de relleno.

Chen Yang y Lu Feng ya estaban teniendo un enfrentamiento frontal en la corte. Un ataque fue lanzado después de otro. Al principio, Lu Feng estaba a la defensiva, mientras que Chen Yang tomó la ofensiva.

Wang Li había visto entrenar a Chen Yang en los últimos días y sabía claramente que Chen Yang era muy capaz de un tiro de largo alcance. Chen Yang, sin embargo, eligió ir hacia adelante. Rompió la defensa de Lu Feng e hizo un hermoso golpe.

Este inconfundible desafío provocó con éxito a Lu Feng, y lo puso en un estado combativo. La siguiente vez que Chen Yang cortó la defensa de Lu Feng e intentó hacer un mate, Lu Feng hizo su contraataque a una velocidad formidablemente rápida, saltando y bloqueando efectivamente el tiro de Chen Yang.

¿Fue esto un juego de baloncesto? No, parecía más bien dos guerreros luchando con cada centímetro de su fuerza, hasta la última gota de su sangre, para defender su posición y honor, y para ganar el corazón de su reina.

"¡Tío Chen, mira! ¡Parece como si quisieran hacerse pedazos el uno al otro!" Wang Li estaba agradecido de que estuvieran en una cancha de baloncesto. Si había armas cerca, no podía imaginar cuánto daño colateral se causaría.

"Déjenlos", Chen An se ahorró una mirada a los dos, uno atacando y el otro bloqueando. Sonrió y continuó, "los jóvenes tienen sus momentos embriagadores. No pueden mantenerlo en secreto para siempre. Si tienen que fingir todo el tiempo, algún día explotarán. Es mejor que puedan desahogarse un poco en un partido de baloncesto."

Chen An estaba encariñado con Chen Yang, y también le gustaba Lu Feng.

No iba a dejar a los demás por Lu Feng, o a dejar a nadie por Chen Yang.

De hecho, había muchas similitudes entre estos dos jóvenes: la voluntad de ganar, el deseo de controlarlo todo, y sobre todo, sus complicados sentimientos hacia él.

Estas similitudes podían resultar en una camaradería, o enemistad, que era el caso en esta etapa, y no parecía probable que cambiara en el futuro inmediato.

Dadas sus conexiones con él, Lu Feng y Chen Yang habían elegido ignorar la existencia del otro, y fingían que no podían ver al otro.

Pero no podía durar así para siempre. No podían seguir así el resto de sus vidas, especialmente cuando tenían que jugar como miembros del mismo equipo. Tendrían que buscar el apoyo del otro, y así la rivalidad que sentían entre ellos no podría ser barrida bajo la alfombra por más tiempo.

El renacimiento de Chen AnWhere stories live. Discover now