One-Shots Multifandom

15. GRIMM

Nickonroe

Nick sintió el cuerpo de su lado moverse suavemente, él abrió los ojos dejándolos clavados en El techo. La persona de su lado sonrió antes de acercarse a él y dejar un beso en el cuello de este haciendo sonreír a Nick.

- ¿Te vas a quedar?- Preguntó la voz del hombre contra su cuello haciendo que el grimm se estremeciera. Nick suspiró y apartó a Monroe de él. El Blutbad miró a Nick vestirse mientras él se acomodaba en su cama sintiéndose ligeramente mal.- ¿Por qué no la dejas?- Nick se sentó en la cama y Monroe aprovechó para tirar de él y dejarlo tumbado, el blutbad volvió a besar el cuello del grimm. Nick apartó de nuevo a Monroe y se quedó mirando el techo con una mueca triste.

- A veces, no es tan simple.- Dijo antes de negar y sentarse, se acercó a Monroe y besó los labios de este con suavidad. Monroe llevó su mano a la mejilla del chico y la acarició metiendo su lengua dentro de la boca de este. Nick le dolió pero se separó del hombre antes de coger la chaqueta.

- Pues yo me estoy cansando de ser el tercero en discordia.- Dijo antes de tumbarse dándole la espalda a Nick, este suspiró antes de negar y salir de casa del hombre.

Era cierto que esta situación no era nada justa para el Blutbad, pero en ese momento no podía ofrecerle más, no podía dejar a Juliette así, ella había estado en sus peores momentos. Monroe fue un amor a primera vista, después de que gracias a él descubriera todo el mundo Wasen, se dio cuenta de que necesitaba más de ese hombre. Todo ocurrió solo, no tuvieron que forzar nada, al parecer el blutbad también se sentía así hacia su persona. Ahora se sentía mucho mejor entre los brazos del hombre que tener a la mujer abrazada a su cintura. Abrió la puerta de la casa que compartía con la mujer y entró sorprendiéndose al encontrar a Juliette sentada en el sofá con su móvil en las manos. Nick abrió los ojos sorprendido antes de tragar saliva. Negó y llevó su mano a la nuca al darse cuenta de lo gilipollas que había sido al dejar el móvil en casa cargando.

- ¿Desde cuando?- Preguntó dolida, Nick suspiró antes de sentarse en el sofá de enfrente de ella, apretó su puño antes de frotar sus manos nervioso.- ¿Desde cuando me pones los cuernos Nick?

- Desde hace un año.- Juliette abrió los ojos sorprendida antes de asentir y dejar el teléfono en la mesa.- Juliette espera.- Dijo cogiéndola de la muñeca. La chica lo miró con el ceño fruncido antes de tirar de su mano y separarse del tacto de Nick.- Yo lo siento, pero lo amo mucho.- Juliette negó antes de levantar las manos y se fue al piso de arriba.

Eso se había complicado, más de los que esperaba, no esperaba que ella se diera cuenta aún, tenía pensado dejarla, algún día. Eso facilitaba las cosas de alguna manera. La mujer volvió a bajar con una maleta y pasó por su lado sin ni siquiera darle una mirada rápida. Nick pensó que se iría sin más, pero no fue así, se detuvo en la puerta y tragó saliva.

- ¿Quien es?- Preguntó dolida, Nick se quedó callado, no quería que ella supiera el nombre, no quería que él fuera el blanco de ella.

- Eso no es relevante, él no es el culpable.- Juliette se giró mientras algunas lágrimas caían por sus ojos.

- ¿Lo conozco verdad?- Nick cerró la boca y apartó la mirada avergonzado, no podía.- ¿Es Hank?- Nick frunció el ceño antes de negar mirándola a los ojos.

- No por dios, él es completamente hetero, tiene novia.- Dijo Nick antes de encoger los hombros y notar la mirada furiosa de la chica.

- Y tu también tenias, y eso no impidió que te metieras en la cama de otra persona.- Nick suspiró antes de negar cansada.- ¿Sabes qué? Me da igual, me voy a ir a casa de Rosalee.- Nick asintió antes de escuchar el portazo, él caminó de nuevo al sofá y se dejó caer mientras cogía su teléfono y abría el contacto que únicamente tenía una llamita de fuego como nombre.

Nick: Lo sabe, se ha ido de casa. Pero tranquilo no le he dicho tu nombre, irá a casa de Rosalee. Buenas noches y siento lo de antes. Te quiero.

Nick bloqueó la pantalla antes de recostar su cabeza contra el sofá y tapar sus ojos, todo era una mierda en ese momento. Se levantó decidido a olvidar lo que había pasado esa tarde y se acostó, mañana no tenía que trabajar así que aprovechara para intentar solucionar las cosas con su blutbad.

*

Los golpes suaves en su puerta hizo que Nick mirara la pantalla del teléfono, solamente eran las ocho de la mañana. Vio dos mensajes, pero no le dio importancia ya que la persona que lo estaba esperando estaba aumentando su fuerza a la hora de golpear la puerta.

- Ya voy.- Dije mientras bajaba por la escalera, miró por el cristal y frunció el ceño al ver a dos personas ahí. Abrió y Hank le sonrió triste antes de acercarse y abrazar a Nick. Monroe estaba detrás y encogió los hombros antes de que la mirada del policía volviera a su compañero.

- Me llamo anoche Juliette, deberías haberle dicho tu antes, te lo dije.- Nick suspiró antes de dejarlo pasar y hacer que Monroe entrará, cerró la puerta y se giró encontrándose al blutbad demasiado cerca.

- ¿Me has perdonado?- Preguntó en un susurro Nick, antes de que Monroe se acercara y besara los labios del hombre con cariño, Nick sonrió antes de llevar sus manos al cuello y dejarse pegar en la puerta.

- ¿No has visto los mensajes, verdad?

- Me acabo de levantar, me habéis despertado.- Monroe sonrió antes de rodear la cintura del policía y bajar su boca al cuello de este. Nick mordió su labio antes de separar al blutbad con una sonrisa.- Hank está en la cocina.- Susurró antes de que Monroe sonriera y se alejara con las manos en alto. Nick sonrió antes de coger la mano de este y tirar de él hasta la cocina. Hank los miró con una sonrisa antes de servir tres tazas de café.

- ¿Lo vais hacer público?- Preguntó llevando su taza a la boca, Nick hizo una mueca antes de tragar el líquido caliente de su boca.

- Lo mejor será esperar que esto se calme, Juliette podría explotar y no quiero que le haga nada a Monroe.- El blutbad sonrió triste antes de dejar un beso en la mejilla del policía, Hank sonrió y miró la hora de su teléfono antes de resoplar y dejar la taza en el fregadero.

- Bueno chicos, os dejo, que debo volver con Wu.- Nick asintió antes de ver a su amigo desaparecer, justo después la puerta sonó cerrándose. Nick miró a Monroe y tiró de él para volver al cuarto, era temprano y no debía ir a trabajar. Nick se metió en la cama antes de coger el teléfono y comprobar los mensajes después de cambiar el nombre del contacto. Los dos de Monroe.

Monroe: Está bien, no te preocupes por eso, está todo perdonado. Quizás fui un poco demasiado exagerado.

Monroe: ¿Cómo estas? ¿Te ha hecho algo?

Nick sonrió antes de sentir a su hombre abrazarlo desde la espalda y apoyar su cabeza en el hombro de Nick para ver la pantalla.

- ¿Ya no soy llamita?- Nick se rió antes de girarse un poco y dejar un beso en los labios de este.

- Ahora eres mi novio.- Monroe sonrió antes de separarse de él y quitarle el móvil, dejando así las manos libres. Monroe se puso encima antes de sonreirá y acercarse de nuevo a la boca de Nick.

- Dilo de nuevo.

- Eres mi novio.- Susurró Nick sintiendo los besos de wasen en su cuello, el policía llevó sus manos a la espalda de este mientras intentaba quitarle la camiseta, debían reconciliarse en condiciones.