161. Max

45.7K 8.2K 2.7K
                                    

Escena 4/6

--------------

El timbre sonó cuando me encontraba recostado sobre mi sofá viendo uno de esos programas de televisión en el que cocineros compiten. Gilmour estaba sentado sobre mi pecho lamiento un recipiente que contenía aún unos cuantos Doritos. Me levanté de mala gana, ajusté al resto de mi cuerpo la prótesis, caminé hasta la puerta principal y cuando abrí lo primero que ví fue un paquete pequeño.

—¿Max Solatano? —me preguntó alguien. Mis ojos fueron del paquete al mensajero que, ansioso, contenía una sonrisa—. ¿Pu-pu-puede firmar aquí de recibido?

—Claro —Alcancé la pluma y cuartilla que me estaba ofreciendo y firmé.

—¿Ta-ta-también puede darme un autógrafo?

—¿Por qué no? —suspiré, firmándole también su camiseta. Cogí mi paquete, despedí al chico y entré de vuelta. 

—¿Qué crees que sea, Gilmour? —pregunté a mi gato sacudiendo cerca de mi oído aquel paquete que, noté, no pesaba mucho. Después asentí como si de alguna manera ya lo supiera. Miranda me había avisado que pronto llegaría... esto. 

Retiré sin el menor cuidado las pegatinas que protegían lo que estaba dentro, dejé caer la envoltura al piso y ya sólo quedó en mis manos...

Enlace

Finley Becher y Suhail Didier 

Agosto de 2016

Por fin nos casamos y esperamos tu compañía el próximo...

La invitación de su boda. 

—Y tenía que ser en la vispera de mi cumpleaños, ¿no? —expuse con molestia a Gilmour que, cuando estoy en el apartamento, me sigue a todas partes—. Pero llegó justo a tiempo, amigo —le hice saber con actitud—. Justo a tiempo. 

De ese modo, llevando el sobre color marfil conmigo, crucé la sala de estar hasta el cuarto de baño dispuesto para visitas. Ahí abrí la puerta, aunque la dejé un poco abierta por Gilmour, que continuaba acompañándome. 

Me extraña mucho cuando estoy lejos.

Desabroché mi cinturón, liberé el botón que matenía en su lugar mis vaqueros, los dejé caer junto con mis boxer y, acomodando con cuidado a mi campeón, me senté sobre el vater. Había comido mucho. 

En esa posición hice lo mío mientras con bufonada leía lo escrito en la invitación. Terminé y proseguí a levantar del vater media nalga en lo que también dirigí la hoja con los nombres de Finley y Suhail a mi culo. 

—Es suave, Gilmour —le dije al gato, terminando con la hoja para a continuación coger el sobre. Así todo hasta que mi culo volvió a quedar rosadito—. ¿Dónde está tu apoyo moral? —alegué a mi compañero al verle huir—. Vamos, no huele tan mal.

Y estaba por levantarme del vater cuando al mirar hacia bajo noté que del sobre había caído un añadido:

Favor de presentar invitación. 

Bendita mi suerte. 

—Mierda —gruñí—. Mierda... Literal.


--------

Gracias por estar votando y comentando.

(/ - \) Seguimos...

(/ - \) Seguimos

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Max & Suhail ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora